KARLOS.Cuando salí con Erick de ese lugar sentía como todo cobraba sentido, las salidas con amigas, los viajes con las supuestas amigas o salidas donde su hermano, las cuales jamás pude ir pues ponía una que otra escusas.
- Hermano, mi madre nunca la tolero.- Dije limpiando mis lágrimas.
Eh estado en discordia con mi madre desde hace más 1ños cuando dijo que no iría a mi boda si era con ella, mi padre también estaba de acuerdo con ella nunca supe el porque hasta ahora, las madres siempre saben cuándo algo no encaja, tal es la discordia que ni mi hermana me habla.
- Yo tampoco la tolere porque sabía cómo era ella, no pasaba ninguna de sus mentiras.- Dijo Erick al otro lado de la llamada.- Siempre sospeche de ella hacia cosas que no encajaban con la historia.
Estábamos en llamada pues los dos habíamos llevado un auto.
- Te juro que yo solo queria hacerla feliz, darle estabilidad y me apaga así.
- Mira mejor dejemos el tema y cuando lleguemos hablamos bien concéntrate en la carretera si.
No cortamos la llamada pues Erick tenía miedo de que me fuera a otro lugar.
Llegamos a su casa y sacamos la primera botella, luego llegó la tercera, la cuarta y perdí la cuenta.
Me despertó el sonido de mi teléfono y mi mundo giro.
- Dios, que mareo- Dije sentando en el piso- Que hago en piso?- Ya estaba muy noche.
Tome el teléfono que no dejaba de sonar estaba al lado mío.
- Ay mi espalda- Está me trono cuando giré.
Mire la pantalla y era ella, en ese momento me surgió la furia nuevamente y tome otro trago de la botella que estaba a mi lado y en el de Erick que también estaba tirado en el piso.
Corte la llamada y justo cuando lo iba a apagar ví un mensaje que me había llegado hace mucho que decía proceso de divorcio.
- Aranza- Se me vino a la mente y la verdad los tragos no ayudaron.
Tome las llaves de mi auto y conduje hasta su hogar.
Me tomé mi tiempo de pensar que hacía en ese lugar, No lo pensé más y subí a su puerta toque pero no abrió.
- Tiene que estar durmiendo estúpido- Me dije a mi mismo.- Llámala.
Estaba como si mi cerebro fuera otra persona diciéndome que hacer.
La llamé y me respondió, se escuchaba algo agitada y me asusté.
Quería preguntarle que estaba haciendo pero era mejor no hacerlo no quería que se enojara más de lo que se que ya está.
- Abreme soy tu esposo.- Tengo miedo de pensar que está con alguien, se escucha agitada.
Tardo un rato en abrir y cuando lo hizo estaba hermosa, un poco sudada pero hermosa aún estaba vestida así que no creo que estuviera con alguien.
Estaba desesperada y me estaba asustando me pedia que la ayudara pero no le entendía que quería decir.
Lo entendí hasta que me beso, Ya se por qué está caliente me dije a mi mismo.
La baje dejando que su cuerpo se pegará al mío poniendo sus pies al piso y correspondiendo su beso, sabía vino tinto, estaba tomando no sabía si el día de mañana se iba a arrepentir o no, pero los tragos que ya tengo en mi sistema no me dejan pensar con claridad.
- Aranza- Dije separándome de ella.
- Que- Dijo buscando mi boca.
- Espera, espera- No dejaba ni hablar, así que la tome fuerte y la pegue a la pared.- No quiero que te arrepientas de nada si llegamos a pasar la raya te lo pido.
- Solo ayúdame no diré nada lo juro- Dijo desesperada.
No puedo, no puedo verla así ya no es solo ella quien está caliente.
Tome sus piernas y la enrolle en mi cintura besándola con más pasión que antes.
- Si, te arrepientes de esto te juro que al menos haré que no te olvides de todo lo que te haré.- Dije separando nuestros labios y caminando con ella hasta lo que supuse era su cuarto pues la unica puerta que estaba abierta era esa.
La puse en la cama y me subi en ella, aún besándola ella con desespero me apretó con las piernas de lo erecto que estaba me hizo jadear.
- Aranza- Le hable al oído- Por Dios que haré gritar más que nuestra primera vez.
Dije restregando mi entrepierna en la suya a lo que ella respondió con un gemido, Eso me despertó y me hizo saber que no estaba soñando por mi madre que hoy le dejo mi mano pintada en su trasero.
No encontraba como quitarle el vestido, esa tela es muy fina y se ve delicada.
- Lo siento por tu vestido, pero no me aguanto mi amor- Le dije tirando de el, rompiendo las tiras de este.
Ella se echó a reír.
- La corredera está atras- Dijo aún riendo.
La tome de las piernas, le di la vuelta y baje la cremallera dejándome ver la Gloria, la verdad es que no estoy tan borracho como para no recordar ese hermoso trasero.
Baje hasta el y le mordí una de sus nalgas a lo que ella gimió, recorrí toda su espalda con mi lengua hasta su cuello y lo único que escuchaba era a una Aranza sumamente excitada.
Termine de quitar el vestido puse mi boca en su cuello besando y mordiendo este, con mi mano baje por su espalda sintiendo como su piel se erizaba, terminando mi recorrido en su trasero el cuál azote a lo que ella respondió con un gemido ahogado contra el colchón y con sus manos apretando las sábanas.
- Te gusta- Le pregunté dándole otra.
- Ah ah, Si karlos si- Dijo agitada.
Hice que separara sus piernas y aún boca abajo quite la última prenda que tenía.
- Ya no tenemos vuelva atrás- Dile dije.
- Lo se, pero no importa.
Volví a manosear le el cuerpo viendo cómo se exitaba más y más, baje mi mano por su trasero le volví a separar las piernas y puse mi mano en el lugar que más queria tocar, ya estaba tan mojada que corrian algunas gotas por sus piernas.
- Diablo mi amor estás muy mojada.- iba a decir algo pero al comenzar a frotar suavemente su punto más sensible, apretó los labios ahorando los gemidos que saliando de ella.
- Ah, Ah ah.- Solo se podía escuchar los gemidos de Aranza y el sonido que hacía mi mano al hacer contacto en sus fluidos.
Baje hasta la entrada de su vagina y poco a poco puse dentro uno de mis dedos, estaba plenamente caliente, comencé a moverlo entro de ella.
- N...o, no- Dijo Aranza,- Detente Ah-
- Pero no parece que quisieras eso.
Dije saliendo de ella y volviendo a frotar su clítoris.
- Ah, karlos.
- Está bien ya se lo que quieres.- Dije separando mi mano de ella, ella levanto un poco la cabeza y me miró, pase mi lengua por el dedo que estaba dentro de ella y Aranza jadeo volteando y tapando su rostro.
- A no, mi amor no te de pena- Dije tomando sus piernas y dónde le vuelta, ella aún tenía el rostro tapado con sus manos.
Se las tome suavemente y le dije al oído.
- Sabes tan bien como la primera vez.
Ella solo volteo su rostro aún más roja de lo que ya estaba le di una sonrisa y comencé a dejar besos por su cuello, llegue a sus senos y tome uno con mi boca y el otro con la mano, Aranza jadeo saboree cada uno de sus senos, pase mi lengua por su abdomen, bajando hasta la frente de su muy bien rasurada felicidad le di un beso a lo que ella reacciono sobresaltada y sin avisar me di paso a este con mi lengua quedando en su clítoris y pasando mi lengua en este.
- Ah ah Karlos- tirando de separarme y doblan do su espalda, pero se que le va a encantar así que pase de una suave y lenta lamida y algo rápido y preciso.
- Ah Ah ah.- Sus gemidos hacen que mi cuerpo se prenda más y más.
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Hace como calor.😬
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PASA LA NOCHE CONMIGO
RomanceCómo es posible que tú vida cambie de la noche ala mañana. Tener una vida tranquila con ganas de emociones, pero no de esta manera. ~Sonido de llamada~ - Dónde estas- Estefy preguntaba al otro lado del teléfono con canciones de la disco de fondo. ...