End 1.

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Al recorrer la habitación la tención comenzó a crecer entre los dos, sin quitarse el antifaz quito su saco caminando hasta mi desabrochando los botones de su camisa, saco la camisa de su pantalón y quito su corbata guardando la en su pantalón, cuando llegó hasta donde me encontraba la tención se volvió tan fuerte que me hizo retroceder hasta quedar pegada a la pared, se pegó a mi cuerpo.

- Que tan malo puedo ser contigo, señora comprometida.- Su voz se escuchaba más grave de lo normal, podía sentir su respiración en mi oreja. - respóndeme, Te hablé.

Jamás me había hablado de esa manera, senti como algo bajo de mi cuerpo, mi intimidad se comenzó a sentir caliente.

- Malo? - mi voz salió con dificultad.

- Si, no escuchaste.- Agarró mi barbilla un poco brusco, poniendo su mano casi en toda mi cara.- Responde.

Mirando directamente a sus ojos, los cuales tenían un brillo inusual, mezclado con el alcohol.

- Lo que quieras.

- Buena chica.

Se separó de mi, camino hasta la cama sentándose con las piernas abiertas, se desabrochó la hebilla de su cinturón dejándola suelta y desabrochó el botón de su pantalón.

- Ven.- Di un paso.- No, gatea.

- Que.- el solo sonrió, hizo una seña con sus dedos indicándome que gateara, la cama no estaba tan lejos desde donde me encontraba, caminando estaba a 5 pasos, pero él quería que me arrastrará.

- Haz lo que te digo, señora me dio el permiso de ser malo.- Dijo quitándose el cinturón del pantalón y dejándolo caer al piso sonando la hebilla, lo cual me hizo sobresaltar - Gatea.

Jamás me habían tratado de esta manera no sabía cómo reaccionar, pero no estoy tan sana como para decirle que se está pasando, yo le di permiso al fin de cuentas y no sé cómo pero algo en mi le gusto como se está portando.

Quite mis tacones y tome posición de gateo, dirigiéndose hasta el, iba a levantarme pero él no me lo permitió.

- Abajo, no tienes permiso de ponerte de pie.

- Porque.

- Silencio, hablas solo cuando se te ordene.

Tomo mi cabeza dirigiéndose hasta quedar mi boca pegada a su pantalón donde ya se encontraba su miembro ya queriendo explotar.

- Sácalo quiere salir.- Dijo.

Trate de separar mi rostro de su pantalón pero su mano no me permitió separarme.

- Suelta me, para poder hacerlo.- dije con mis manos en sus piernas intentado soltarme de su agarre.

- No, hazlo con la boca.

Esta loco, esto está a otro nivel ni cuando se supone que tenemos sexo me hacía hacer estas cosas.

- Está bien.- obedecí y con mis dientes comenzé a bajar la cremallera de su pantalón, y luego morsi su ropa interior bajando la, dejando su miembro al descubierto, el cual salió casi al instante chocando con mi rostro.

- Dale amor, si quieres que yo te de lo que viniste a buscar en esta habitación.

- Como?

- No te pedí que hablaras, solo hazlo.

Este actuar es demasiado nuevo para mí, es como si fuera la primera vez que miraba a Karlos, como si fuera la primera vez.

Lo metí a mi boca, podía sentir lo caliente que es su miembro en toda mi boca, comence a meterlo y sacarlo suave de mi boca, luego pase mi lengua dando círculos en la punta, Karlos hecho su cabeza hacia atrás suspirando y soltando un gemido bajo.

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⏰ Última actualización: Oct 19 ⏰

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