Luna pasa la lengua alrededor de su cono de helado y me mira de reojo.
Hago mala cara y ella se ríe.
- ¿Qué? - Me pregunta alegremente
- Eres muy pequeña, ¿cómo puedes comer tanto? - Le reclamo
- Me encanta comer. No le digo que no a los placeres - Comenta alegremente, y vuelve a lamer su helado
Dejo escapar un suspiro y estiro mis piernas delante de mi cuerpo.
Estamos recostados en el pasto a la sombra de un árbol en un parque de un sector bonito lleno de restaurantes con clase en Houston.
Elegimos cualquier restaurante al azar y tomamos un almuerzo escandaloso de comida italiana, con postre y vino y toda la cosa.
Y ahora la señorita encontró un puesto de helado en la calle, y tiene la habilidad de seguir comiendo.
La miro con rencor y ella me pone el cono de helado frente a la cara.
Me inclino y tomo un bocado, pero estoy tan lleno que creo que podría morir.
- No sirvo para esto de los placeres - Me quejo
- ¿No?
Me mira entre esas pestañas injustamente largas con un ademán coqueto y suelto una risita.
Le doy un golpecito con el hombro y ella se ríe también, mientras se acomoda contra el tronco del árbol.
....Creo que podríamos llegar a estar un poco borrachos por la botella de vino que nos tomamos con nuestro almuerzo, aunque hace calor y tengo un poco de sueño, y no estoy muy seguro.
- Tienes cara de que serías muy bueno en eso. Me parece un desperdicio - Indica ella, haciendo un gesto apreciativo con la cabeza
Me inclino y tomo un mordisco más grande de su cono de helado como venganza.
- Háblame de tus más grandes placeres, y te diré qué tan bueno soy - Sugiero, levantando las cejas
- Comer. Dormir. Follar. No necesariamente en ese orden
Y luego lame el helado de una manera que hasta el espectador más casto consideraría seductora.
Creo que estoy más borracho de lo que creía.
- No soy tan bueno en comer como tú. Definitivamente apesto en dormir. Y en cuanto a follar....
- ¿Qué?
- Nunca nadie se ha quejado - Digo con un encogimiento de hombros
- ¿Nadie se ha quejado? - Exclama ella, indignada - ¿Esa es tu unidad de medida para decirme qué tanto rockeas en la cama?
- Creo que soy una estrella de rock nivel Axel Rose, pero no lo sé. No estoy haciendo mucho lo de follar últimamente
- Agh, ¿estás en la temporada?
- ¿Qué es la temporada?
- Ya sabes, ese periodo que tenemos todos, cuando no logramos conectar con nadie, y a la vez medio nos sabe a mierda el sexo casual, pero definitivamente somos jóvenes y vitales y queremos hacerlo, pero simplemente no se da
La miro de reojo, y creo que mi expresión desdichada lo dice todo, porque ella me ofrece el cono de helado como recompensa.
Rodeo la crema con mi lengua, y ella bizquea de una manera ligeramente graciosa.
No estoy siendo coqueto, ¿verdad?
No.
Solo estoy comiéndome un conito.
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Buenas noches, ladrón » Martín Vargas (Morat)
FanfictionSolo un beso, fue lo que te prometí. Uno solo. Pero esto es más que un beso, ladrón. Algo pasa entre los dos, y no podemos negarlo....