El diario de un rey: la coronación [LIBRO 1]

Capítulo XLVI: Entrenamientos III

10/01/2023

—Sí, ese espectáculo nocturno nos alegró el primer día de este año —comentó Cristel cuando finalizó de contarme cómo celebraron año nuevo en Onimod.

—Definitivamente, mis sueños se vuelven realidad. No todos, pero sí los más raros.

—Independientemente de si eso es bueno o no, ya que no lo sé, podríamos entrenar más en cuanto a control mental, para poder reducir ese tipo de sueños. Si es que te incomoda, claro.

—No, de hecho no será necesario. Papá ya me había dicho una vez que es algo bonito soñar cosas raras. Quizá entrenar el control mental pueda causar alteraciones en mi organismo.

Habíamos quedado en retomar los entrenamientos, con duración de una semana más. Estábamos ubicados de nuevo de en campo de entrenamientos, misma planicie al lado del volcán. Un lugar despoblado, desolado, perfecto para que nadie se diera cuenta de que ahí practicábamos con la magia.

No podíamos alargar la duración de los entrenamientos, porque el dieciséis de este mes comienzo a estudiar; y he decidido empeñarme a estudiar. Y con más razón, ya que la preparatoria probablemente sea mucho más cansada.

—Pues no hay tiempo que perder —continuó Cristel, luego se ubicó en el sitio de siempre—. El entrenamiento de hoy es básico: consiste en hacer movimientos rápidos. Cualquier movimiento que se te ocurra, pero que tenga como objetivo esquivar a tu rival y lanzar algún hechizo de vez en cuando.

Fue algo sencillo. Piruetas, saltos, patadas al aire, vueltas sobre el piso y demás movimientos... Para ser el primer día de la segunda semana, fue algo simple pero cansado.

11/01/2023

—Solo puedo confiar en ti —hablé, le había contado a mamá sobre esta segunda semana—. Estaré bien.

—Siempre y cuando no te olvides de...

—De mis deberes, lo sé. No te preocupes; nuevo año, nueva organización.

Salí y me teletransporté al campo de entrenamientos. De hecho, ya estoy aprendiendo a usar los portales invisibles.

—Debemos trabajar en eso —habló Cristel cuando aparecí en el lugar.

—¿En qué?

—Los portales. Debes saber que existen tres tipos: los invisibles, los visibles y los falsos. Los invisibles, como el que acabas de emplear, son para que seas más cuidadoso con tu entorno; perfecto para ti. Los visibles sirven más para viajar específicamente a Onimod. Y los falsos... Pues su nombre lo indica; sirven para crear confusiones entre una persona, animal u otra cosa. También puedes utilizarlos como portales para enviar una entidad hacia un punto remoto. Los portales falsos pueden ser invisibles, por lo que debes tener cuidado, porque podría haber uno en cualquier parte.

—Perfecto, anotado.

—Hay ocasiones en las que los portales no funcionan para nadie. Por ejemplo, si hay alguna interferencia mágica en tu entorno, los portales no funcionarán; y si lo hacen, pueden ser muy peligrosos.

—¿Cómo podría saber cuándo usar un portal?

—Si al momento de generar un portal, este desprende chispas negras, te indica que la analogía bidimensional de la magia está dañada. Un claro ejemplo fue cuando Onimod estaba fallando en cuanto a la ABM, en ese momento los portales no funcionaban bien.

—¿ABM? —repetí.

—Son las siglas de la frase "Analogía Bidimensional de la Magia". Esa analogía está compuesta por el tiempo, el espacio y la magia existente y utilizada. Esos tres factores fallan cuando alguien está empleando gran parte de la magia; el tiempo se descontrola, el espacio puede desaparecer y la magia también. Por eso es que no debes generar ni viajar en los portales cuando eso ocurra, porque podrían llevarte a un universo sin vida. Es decir, a un espacio vacío, perdido en la nada, sin cómo salir.