ᴘʟᴀᴄᴇ ɪɴ ᴍᴇ | ɪꜱᴀᴀᴄ ʟᴀʜᴇʏ

Extra: 146 Candles

Narrador omnisciente:

Kelly es empujada fuera de su cama, las sábanas están enredadas en su cuerpo y hace una mueca cuando su cabeza choca con el frío suelo. ¿Qué demonios?

—Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti —canturrean cuatro voces a coro—. ¡Feliz cumpleaños Kelly!

Oh no, es su cumpleaños. Es un día cargado de emociones para ella, pues es el día que nació pero también el día que murió a manos de Damon.

Abre los ojos con pereza mientras se quita las sábanas del cuerpo. Vaya manera de empezar el día, ¿no? Cuando logra enfocar bien distingue a las cuatro figuras al pie de su cama. Stefan carga un pequeño pastel con los número 146, Damon tiene un vaso de sangre y Tyler uno de Bourbon mientras Caroline se encarga de grabar.

La sonrisa en los labios de Kelly es genuina, una que no se veían desde el que Isaac le pidió un tiempo. La vampiresa se levanta del suelo para acercarse a su familia.

—Pide un deseo —dice Caroline emocionada.

La pelinegra cierra sus ojos, lo único que siempre pide es que sus seres queridos estén bien. Cuando los abren nuevamente sopla las velas con facilidad, Damon le tiende el vaso y se lo bebe al seco luego hace lo mismo con el de Tyler.

—Odio esta tradición —hace una leve mueca al sentir la mezcla de alcohol y sangre—. Definitivamente no me gusta la sangre de animal.

—Todos lo hacemos —le recuerda Damon—. Es como nuestro ritual al cumplir años.

Los cinco se ríen a carcajadas, es verdad. Desde que son vampiros los tres Salvatore han apagado las velas y luego beben alcohol con sangre animal, la sangre animal es para molestar a Stefan. Desde que Tyler y Caroline se unieron a la extraña familia, también han tenido que hacerlo. No saben el motivo en especifico simplemente lo hacen.

—No te preocupes —susurra Damon—. La sangre no era de ningún animal emplumado.

—Vístete —ordena Tyler—. Te esperamos abajo.

—Quiero comer pastel —señala Damon—. Así que apúrate.

Los cuatro dejan su habitación con rapidez, Kelly revisa su celular encontrándose con mensajes de Rebekah, Hayley y Katherine. Luego de agradecerles se va a bañar y usar su velocidad vampírica para vestirse.

A medida que baja la escalera el olor a café se hace presente, le sumamos las voces y risas que provienen de la cocina. Apenas pone un pie dentro de la cocina es abordada por dos personitas.

—¡Feliz cumpleaños, colmillitos! —grita Stiles.

—Feliz cumpleaños, Kelly —le susurra Scott.

La vampiresa los abraza con más fuerza sintiéndose completa por primera vez en mucho tiempo. Ni siquiera ha pensado en Isaac desde que despertó y eso es nuevo.

Cuando se separan se fija en lo que ocurre a su alrededor. Stefan esta cocinando panqueques, Tyler lucha con la maquina de café, Caroline hace jugo de naranja y Damon decora los panqueques concentrado.

Isaac esta allí, eso hace que la cumpleañera trague saliva con dificultad. ¿Qué hace aquí? No le habla por días y está aquí como si nada. Siente la mano de Stiles entrelazarse con la suya a medida que se acercan a la mesa.

—Feliz cumpleaños, boni... Kelly —carraspea el rubio, se crea un silencio—. Espero que tengas un buen día.

—Estoy muy seguro de que era bueno hasta que te vio —murmura Tyler—. ¡Auch! —se queja cuando cierta rubia lo golpea—. Solo digo la verdad.