Capitulo 44

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Sougo y Abuto habían caminado hasta el parque en silencio. Aquel hombre había solicitado su ayuda pero fuera de eso no dijo ni una palabra más, los instintos del castaño no indicaban peligro así que si él quisiera atacarlo ya lo habría hecho.

-¿Dirás algo o acaso te gusta mi compañía?-Comento en tono burlón.

-Vaya si que eres insolente como el capitán.-Comparó el hombre con una sonrisa.

-No me compares con ese idiota.-Se quejó por tal comentario.

-Bien bien, pero no te enojes.-"Si que son iguales de actitud."pensó.-Bueno el asunto es que uno de mis informantes me dijo que el gran cazador Umibouzu llego a la Tierra.-Esas palabras captaron la atención del castaño.

-Y como buen perro faldero fuiste a decirle a tu amo.-Comento con malicia y preocupación la cual esa última trataba de no mostrarla al menos no frente a ese hombre.

-Ahí es donde te equivocas amiguito. Kamui no tiene idea que está aquí. En mas de una ocasión e logrado evitar que estos dos se encontraran y me gustaría que siga así.

-¿Que no los de tu raza buscan pelear?-Cuestiono.

-Así es, pero el capitán está cegado, piensa que matando a su propio padre tendrá la venganza que tanto quiere, pero se equivoca; solo creara un vacío en su interior y temo que si eso llega a pasar deje de ser el mismo idiota que ya es.

-¿Y yo que tengo que ver en esto?

-Al ver lo cercano que eres con la conejita quería ver si puedes mantener escondido a su padre. Yo me encargare del capitán, en estos momentos esta en la nave comiendo montones de comida que conseguí, pero debo volver para mantenerlo distraído el tiempo necesario para que ahí permanezca en lo que el señor se va ¿Puedo contar contigo?

-Bien haré lo que pueda.-Sougo analizaba la situación y era comprensible querer evitar una pelea entre bestias lo que no comprendía era que ganaba este hombre.

-Me alegro de escuchar eso.-Abuto se preparaba para marcharse de vuelta a la nave cuando Sougo no pudo evitar preguntar.

-¿Que ganas tu evitando todo esto? No creo que tu capitán se alegre si descubre tal traición.

-Kamui solo era un niño cuando lo conocí ¿Sabes que quería de mi?-Pregunto al castaño con una sonrisa melancólica.-Ayuda. Quería que lo llevara a el y a su madre enferma devuelta al planeta Kouan es decir el planeta natal de todo yato. Estaba dispuesto a llevarlos pero una tarde lluviosa el llego cubierto en sangre; la de su padre, al parecer habían peleado y él recurrió al único lugar que podía, nuestra nave. Desde ese día el a sido diferente se cegó por el odio y la venganza y lo único que había en su cabeza eran las peleas y el poder. Jamás lloro desde que abandonamos Ryokaku ni siquiera se pregunto que fue de su madre o hermana el solo sepultó toda emoción o sentimiento que una vez tuvo y se dejo guiar por sus instintos. Para mi el sigue siendo el niño ingenuo que quería mi ayuda, el solo necesita volver con su familia y si puedo evitar que cometa algo de lo que pueda arrepentirse entonces eso haré.

Una vez solo en el parque Sougo analizaba las palabras de Abuto, su perspectiva lo hacia comprender mas a aquel idiota y pudo comprender sus motivos de porque era como es. Tal vez sea un criminal con el cual no simpatizaba en nada pero era la familia de Kagura y si debía ayudar a que no cometa una tontería no podría oponerse porque el había prometido proteger a todos quienes son queridos por ella.

-Parece ser que te dejo algo inquieto su conversación.-La voz de Kagura se hizo presente sacándolo de sus pensamientos.

-Es de mala educación espiar a los demás.-Contesto.

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