T3. CAPITULO 11: El nacimiento del más fuerte. Parte 1

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Ahhh~... Que bonito es un amanecer, en este tiempo que he viajado y dormido con Megumin, pude entender que no se necesita una cama cómoda, un lugar lujoso o una calefacción ante este amanecer con un cálido abrazo con la mujer que es tu novia y futura compañera de vida.

Kazuma:.... Ahhh~... - satisfecho y realizado - no puedo creer que esto se sintiera tan bien sin necesidad de sexo~♪ (⁠ *ω*⁠ )

En medio de mis delirios, pude ver que Megumin también parecía despertarse por mis ligeros movimientos.

Megumin: *Bostezo*... ¿Uhh?... - en un tono somnoliento - Buenos días Kazuma, ¿Cómo amaneciste?

Kazuma: Buenas... *Bostezo*... Buenos días Megumin, yo estoy bien. Pero háblame de tí, *acaricia su cabello* ¿Disfrutaste tu cumpleaños?

Megumin: Sí, en verdad gracias por todo lo que hiciste, en especial por gastar dinero para los demás.

Kazuma: Jajaja - con una sonrisa gentil - no necesitas agradecerlo Megumin ( ^⁠‿⁠^⁠)

Megumin: W-wow, ¿Lo dices en serio?

Kazuma: Después de todo no será gratis, contigo y Komekko son una excepción ya que es cortesía de "familia" y con las demás chicas todavía tengo una duda de como cobrarmelas sin quedar mal y que no sea malinterpretable, pero sin duda alguna me la cobraré a esos 2 que tragaron como cerdos.

Megumin (P):.... Bueno, debí imaginarlo, pero mejor así que antes ya me estaba algo de nervios (^⁠‿⁠^⁠ ;)

Megumin: Ehh... Es agradable tenerte cerca y todo, pero... ¿Puedes cepillar tus dientes? - en un tono asqueado pero también lo más gentil y amable posible - Ayer comiste Sushi y sake toda la noche y ahora no tienes ehh, ya sabes, el mejor aliento de todos (⁠・ั⁠ω⁠・ั⁠).

Kazuma:.... Oh, cierto, me olvidaba de eso, pero para ser justos tampoco hueles a rosas, también hueles a Sushi, Sake y aún hueles un poco a barbacoa de ayer.

Megumin:..... ¿Ah sí? (⁠•⁠ ⁠▽⁠ ⁠•⁠;⁠)

Después de ese incómodo momento, finalmente nos levantamos a cepillarnos los dientes y bañarnos para quitarnos la esencia de sake y pescado que teníamos (obviamente lo del baño es separado ya que ese nivel de nivel de confianza aún no está desarrollado).

Una vez estando limpios y en condiciones de estar presentables, estuvimos en la sala donde estábamos en el Kotatsu almorzando hasta que la legión de los muertos de hambre, digo, el resto de la familia de Megumin con Kazuto hicieron acto de presencia a unirse al almuerzo.

Después de comer las sobras de ayer, todos estábamos satisfechos y todos estábamos tranquilos hablando sobre ayer y qué habíamos hecho.

Un rato después de eso, Megumin y yo estábamos afuera de casa sentados viendo una escena curiosa de Komekko queriendo jugar con Kazuto.

*La escena de los niños*

Komekko: Vamos~... - en un tono se súplica por aburrimiento - Juega conmigo a las guerras de nieve~.... Anda, ¿Que te cuesta~?

Kazuto: *Suspiro*... Ya te dije que no, - en un tono gruñón - estoy viendo si no tengo nada raro en mi invernadero.

Komekko: Ohhh~... *Viendo el celular de Kazuto* ¿Que es eso que traes en la mano?

Kazuto: Un..... ¿Celular?

Komekko: Oh.... ¿Eso es el famoso celular de que todo el mundo habla? (⁠✯⁠ᴗ⁠✯⁠)

Kazuto:.... Uhhh... ¿Si? (⁠・⁠_⁠・⁠;⁠)

Komekko:.... *Se lo quita*

Kazuto: ¡Hey! ¿Que pasa? - claramente irritado - Devuélvemelo.

Bendito sea este maravilloso romance carmesí en el momento inoportuno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora