Mi pecado I

Capítulo 30

Sofía:

No pude parar mi reacción. Después de haber visitado la tumba de mi madre y volver a encontrarme con Julio necesitaba aquello. Necesitaba aquel contacto con Álex.

Cuando mi cerebro supo lo que estaba haciendo le envió una orden a mi cuerpo que pensé que me costaría más de acatar. Me contuve como nunca y lo dejé salir.

Volví a mirarme en el espejo. Mis ojos estaban cansados. Mis labios aún sentían los suyos con esa fuerza con la que besaba. Pasé mi mano por ellos cerrando los ojos intentando volver a aquel momento en el que parecía que todo era de otra manera, pero cuando los volví a abrir me di cuenta de que la realidad era otra muy diferente.

Me puse la camiseta blanca y salí al salón. Todos ya estaban acomodados en el sofá. Mackenzie y Ethan estaban en uno muy acurrucados mientras sonreían. Álex estaba en el otro a una punta. No tenía otra opción, no iba a estar en el mismo que aquellos dos acaramelados.

Me situé a la otra punta rezando para que Mackenzie y Ethan no se dieran cuenta de la tensión que había entre nosotros.

-¿Listos? -dijo Mackenzie en nuestra dirección. Su mano sujetaba el mando preparada para darle al Play.

-Espera, ¿qué película vas a poner? -pregunté con algo de preocupación.

-Es una de miedo -respondió Ethan con un tono mezclado entre oscuro y diversión.

Mi preocupación aumentó. Odiaba las películas de miedo, después estaba toda la noche sin poder dormir y con cualquier ruido mi mente se formaba una película muy alejada de la realidad. Mis manos se retorcieron un poco con nervios.

-¿Tienes miedo? -preguntó Álex con un tono de diversión. Esa sonrisita burlona la odiaba. Si se creía que iba a ser una miedica no pensaba darle el gusto.

-Yo no he dicho eso -le recriminé con mala cara.

-Solo preguntaba -soltó levantando las manos en señal de paz, pero su sonrisa burlona no había desaparecido. Me estaba provocando y no lo iba a conseguir, iba a ver esa película, luego me encerraría en mi habitación y todo pasaría.

-Venga, vamos a verla -respondí ignorando a Álex. Este se levantó y las luces se apagaron. Genial, una película de miedo con las luces apagadas, era con el pack completo.

Relájate Sofía solo es una estúpida película. Fue cuando el roce de algo se instaló en mi hombro haciéndome dar un pequeño salto.

-Lo siento, he tropezado buscando el sofá -el estúpido de Álex lo había hecho adrede.

-Una mierda, lo has hecho adrede -le repliqué con mal humor.

-Venga chicos, tiempo muerto -dijo Ethan haciéndonos callar. Álex soltó una risita la cual quise borrar con mi mano. Se sentó por fin y yo pude poner toda mi atención en la película.

*****

Todavía no se terminaba. ¿Pero cuánto duraba? Se me estaba haciendo eterno. De vez en cuando daba unos pequeños saltos de susto. Mackenzie en cambio estaba escondida en el brazo de su novio. ¿Para eso quería ponerla?

Sentía en algunos momentos la intensidad de la mirada se Álex. ¿Es que a él no le daba sustos? Mis brazos rodeaban mi cuerpo sintiéndome así algo más segura.

Cuando por fin se terminó no supe muy bien que sensación tenía. No me había gustado nada como se había resuelto todo, pero lo que contaba era que al fin se había terminado, lo malo era que ahora no podía ir a dormir.

Mi mente repetía en bucle todas las escenas más espantosas haciendo que mi piel se erizara.

-Que espanto de película -Mackenzie fue la primera en pronunciar unas palabras.