Mi pecado I

Capítulo 12

Sofía:

El viento azotaba mi pelo haciendo algo más soportable las temperaturas. Durante todo el trayecto Tiffany no había dejado de hablar de todas las fiestas a las que íbamos a ir juntas, pero yo no podía dejar de pensar en el intruso que tenía metido en casa.

¿Por qué mi padre me hacía pasar por esto?

Metida en mis pensamientos no me di cuenta de todo lo que iban diciendo Tiffany y Ben mientras nos dirigíamos hacia nuestra zona.

Tenía que hablar con Sally. Necesitaba saber cuáles eran sus planes después de las pocas vacaciones que nos quedaban.

Tenía otro billete para ir a París y me temía que a mi padre no le haría mucha gracia cuando supiera para quién era. Tenía muy claro quien quería mi padre que fuera, el problema es que yo no estaba segura de seguir con él.

Podía oír perfectamente las palabras de mi padre. Lo egoísta y caprichosa que le resultaría, pero donde quedaba lo que verdaderamente quería. Mamá ya no estaba y no podía contar con su apoyo, ya no me quedaba nada, a mi padre lo estaban cambiando y si antes no pude contarle nada... ahora mucho menos.

Durante todo el trayecto estuve metida en mis pensamientos y no fui capaz de darle importancia a las voces que tenía a mi alrededor.

Ya sentados en nuestros asientos en la zona donde se concentraban todos los que poseían importantes influencias fue cuando llamaron mi atención moviendo las manos delante de mí.

-¿Cariño en que planeta estás? -la voz de Tiffany fue la primera en interesarse por la poca atención que les estaba dando. La risa de Ben se escuchó mientras le daba el primer sorbo a la copa que le habían servido.

Fue cuando fui consciente que las únicas que no tenían bebida éramos Sally y yo. Esta estaba concentrada en algo en su móvil.

Lo siento, mi llegada no ha sido del todo como esperaba -dije con cuidado. No quería dar demasiadas explicaciones, aunque necesitaba desahogarme con ellos. Sabía que sus caras al decirlo serían de auténtico horror.

-Lo sabemos, es una auténtica barbaridad, no entiendo como los periodistas quieren sacarlo en las revistas.

Me quedé un poco parada ante las palabras de Becca. ¿Lo sabían? Pero entonces caí. Las revistas, lo sabría todo el mundo, cosa que me llevó a preguntarme si Julio estaría enterado de todo esto.

-Pues yo sí que lo entiendo -el tono relajado de Sally hizo que todas nuestras miradas se centraran en ella-. ¡¿Qué?! -exclamó con sorpresa.

-Vamos ¿lo habéis visto bien?, es imposible que las miradas no estén sobre él -dijo con un tono pícaro.

-Esta chica no tiene remedio -suspiró Tiffany con repulsión. Los demás mostraron una pequeña carcajada en modo de apoyo a Tiffany, cosa que provocó en Sally que pusiera los ojos en blanco y se centrara en las vistas.