Tiempo De...

Capítulo 2

Las voces de las chicas se encontraba a mi alrededor a la vez que un cuerpo se apegaba a mí. El silencio en ella era obvio pero sabía quien era. Marie.

Abrí los ojos aún encontrándome abrumada mientras Jessica contaba lo que había pasado, supe que estaban las demás aquí antes de verlas y así era.

-Despertó- informó Hana, es justo como Marie me la describió, de sus sueños. Su vientre estaba crecido y tenía ese brillo hermoso que solo se obtiene al traer una nueva vida.

-¿Como te sientes?

-Débil- era cierto, no me sentía así hace mucho pese a que estaba prisionera.

-Namjoon dice que drenaste todas sus energías, también la tuya.- Jenny pareció dudar -Estamos sin dones, todos nosotros.

-Oh

-No la abrumes con eso- interrumpió Lluvia. -¿Tienes hambre?

-Si, y quiero bañarme- mi cuerpo estaba cubierto pero podía sentir la suciedad en el.

-Claro, traeré tijeras para cortar tu cabello.- esta se puso de pie.

-¡No quiero cortar!- el amo solía acariciarlo, creo que le gustaba largo. -¿Peinarlo?

-Iré por un peine entonces.- esta salió de la habitación mientras las otras me miraban de manera fija. Marie permanecía a mi lado en silencio y con ojos perdidos. Parecía un cachorro.

Apenas Lluvia regresó lo hizo con menesteres de limpieza y ropa cual dejó sobre la cama y ambas nos metimos al baño. -¿Qué pasa con Marie?

-SeokJin

-¿Él...

-Se fue- me metí a la bañera y esta comenzó a dejar caer el agua en ella, mi cabello se humedeció de manera rápida. -Ella se alteró mucho. Le dijo que no tenían nada.

-¿Porqué haría algo así?

-El la reprendió por irse, estaba destrozado, dolido y molesto. Y descargó esa furia en reclamos al a penas ella despertar. Ella le reclamó devuelta sobre tratarla de loca y encerrarla y el dijo que no lo suficiente si al final acabó rompiendo lo que tenían. Entonces ella dijo que no tenían nada más que deseo sexual por el otro.- suspiró y comenzó a echar el limpiador para mi cabello -Entonces el se molestó más y le dijo que dejara de comportarse como una jodida niña. Ella dijo algo sobre el y la edad de las momias- pareció contener una risa -Y luego hubo silencio, después de unos minutos ella dijo que no lo quería cerca y el tomó sus cosas y se largó.

—Eso es.

-Malo, lo sé. Marie apenas se alimenta y vuelve a recostarse a tu lado. Da pena verla.

-No quería perjudicar lo que tenían.

-No lo hiciste tú. Creo que nunca tuvieron buenas bases.

-¿Cómo estás tú?

-Bien. Hana está muy agradecida contigo por descubrir lo que la perseguía, había pensado en creer que estaba loca. Querían a su bebé es lo más probable.

-¿Por qué hablas de otros cuando pregunto por ti?

-Me intimidas

-Nadie nunca había dicho algo como eso. No sobre mí- admití, esta había enjuagado ya dos veces mi cabello y ahora dejaba masajes mientras trataba de desenredarlo.

-Solo estoy algo abrumada por lo que pasó allá- continuaba con mi cabello -¿Crees que más de esas criaturas vengan por nosotras?

-Por mí- admití -Solo una hija mía puede darle lo que ellos quieren ahora que yo no. -¿Cómo es eso de que están sin dones?

-Aún no los recuperamos- dijo -Solo Hoseok, pero solo los de hada.

-¿Jess?

-Ella no.

-Quiero ir abajo y hablar con...

-Lo sé- dijo divertida -Madai- llamó, parecía dudar.

-¿Si?

-Hay algo que deberías saber.

...

Las palabras de lluvia se repetían dentro de mi cabeza mientras bajaba las escaleras. Luego del baño me convencí de que debía haber una explicación para esto, así que les pedí dejarnos a mi y a Marie quien estaba renuente a dejar mi habitación, me cambié de ropa y decidí bajar y enfrentar lo que sea que me espere abajo.

Tomé una bocanada de aire cuando la vi sentada en la encimera de la cocina. Su cabello plata resaltaba en la casa, su piel blanca y delicada era hermosa. Ella lo era. Puedo imaginar porque el amo la desea.

Me convencí a mi misma de que buscaba reemplazarme. De que ahora que estoy aquí va a dejarla y me sentí mal por ella, pero era lo correcto. El...

El es importante para mí, lo amo. Y si el no lo hace el amor que siento por el es suficiente para ambos.

Lejos de encontrarse sola, los Kim la acompañaban, en la cocina, en un lugar donde apenas logré verlo estaba el amo, tan hermoso como siempre. Su vista dio con la mía y juro que lo vi contenerse para no caminar en mi dirección, aún así debíamos hablar.

Debía saber todo lo que siento por él, que ningún sentimiento murió. Al contrario, se hicieron más intensos.

-Amo, me gustaría hablar.- lo vi tomar un plato en sus manos, picaba fruta, para ella. Nunca hizo algo así por mí, ni siquiera me trató como... sacudí mi cabeza ante los pensamientos deprimentes.

-Gracias Yoongi- su voz era dulce, fina y delicada. Como ella. Pero lo que en realidad llamó mi atención fue el hecho de como lo llamó.

Es su nombre, eso lo sé. Solo que nunca me atreví a decirlo en voz alta. Más por que era tan riguroso para que lo llamara Amo en lugar de Señor Min que por cualquier otra cosa.

De pronto la realidad me golpeó, la miraba diferente a ella. Nunca me vió así. Su mirada era deseoso, llena de lujuria, enojo. Pero nunca ternura, nunca...

¿En verdad será suficiente todo el amor que siento por él? ¿Me aceptará devuelta siquiera?

.