Capítulo 1

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Mi cuerpo era apresado con fuerza, incluso me hacía doler. Acaricié su cabello creyendo que quien me tocaba era Hoseok, no era él.

-Despertaste- comenzó a llorar a la vez que me apretaba contra ella.

-¿Cómo están las demás? Lluvia y Madai, Marie

-Están bien, Madai aún duerme, pero está bien. Tiene que estarlo.- limpió sus lágrimas -La trajeron de vuelta- volvió a abrazarme no creyéndose aquello. -No me lo creo.

-Ni yo. Yo tampoco me lo creo, y estaba allá- negué -Ella...ella cambió, mucho. Si hubieras visto como mató a su propia madre sin remordimiento alguno.

-Pero ¿Porqué...

-Ella fue participe de todo lo qué pasó. Fue horrible, pero lo merecía, la perra no debería ser llamada su madre siquiera.
¿Por qué estoy aquí?

-Tu hermano no quiere dejarte sola un solo segundo. Fue por algo de comer, debe estar por llegar.

-Es un dramático

-Lo es. Está asustado. Todos lo estábamos.

-Pensé que nos llevaría con papá y mamá otra vez- negó

-Es que no sabes.- puso esa cara, su cara de chisme. -Había un hada aquí, tras los Kim, macho. No lo vi porque estaba ahí, tu sabes. Ocupada arriba tratando de saber que les pasaba a ustedes. Pero seguro era sexy, ellos siempre son sexys.

-El punto

-Madai lo atacó y Min lo mató. De una, razz, le arrancó la garganta sin preguntar. Se le fue encima y lo mató.

-Vaya. Siempre supe que era un maldito pero nunca lo vi en acción, solo lo que Honn... Hoseok me contó que hizo con Mino.

-Bueno.

-Madai va a estar feliz cuando despierte. Si el la defendió...

-Eso es otra cosa- dudó -No sabes, pero cuando te fuiste.

-No me fui, perseguía a Lluvia, cual quería escapar y me acabé metiendo en el lío.

-Bueno, cuando te auto-raptaste,- no dije nada, esa palabra ni existe de todas formas -SeokJin y Hoseok encontraron a Min medio muerto, un ángel lo atacó.

-Criatura de los Cielos.

-Deja de corregirme maldita.

-Los humanos los ven como algo bueno pero son los más malditos.

-Bueno, esos perros. Al parecer las armas que usan pueden matar cualquier ser inmortal, pero el no estaba solo. Había un hada con él, mierda Jess, es la viva imagen de Madai. No físicamente, pero en su forma de ser. Solo come fruta y vegetales- enumeró.

-La mayoría de las hadas y ninfas terrestres comen eso, las acuáticas peces.

-Cállate. También esta su forma de ser, dócil y sumisa.

-Ohh mierda, no me digas que lo hace llamarlo amo. Que retorcido es.

-No, eso es algo que dejó a Jungkook algo desubicado. El no le ha dirigido la palabra. Más bien solo Hoseok y SeokJin, ni siquiera Namjoon. Pero Jungkook me dijo que Min siempre fue muy de creerse superior, ese tipo de razas, las eternas, le generaban superioridad. Entonces se enseñoreaba sobre ellas. Pero ella lo tutea, le llama por su nombre.

-Eso es imposible, incluso los chicos le llaman por su apellido.

-Pues ella es "Yoongi aquí, Yoongi allá", él la atiende, está embobado con ella. Pela las frutas, las limpia, las pica y se las da de comer.

-Mientes- negó

-No lo hago, lo juro.

-¿Y ahora que?

-¿A qué te refieres?

-Bueno, Madai regresó. Con clara convicción de que venía por su amo, ¡mierda! No paraba de mencionarlo en todo momento, ninguna tuvo la valentía de decirle que no volvimos a verlo desde que se murió. Es que no sabes.

-¿Qué no sabemos?- entró mi hermano al cuarto -Deberías estar alimentándote y descansando. No chismeando.

-Cállate- exigí mientras tendía mi mano para que me pasara la sangre. Rompí la bolsa con mis dientes y absorbí todo el líquido. -Madai, ella ya no es como antes.

-Antes de que continúes con tus chismes voy a necesitar que por favor me digas. ¡¿Que mierda se te pasó por la cabeza al largarte así?! Pensaba que confiabas en mi para...

-Cállate- exigió su pareja -Ella solo trataba de detenerla.

-Lluvia parecía como loca. Vino a mi para tomar mi don e irse. No podía dejarla, Namjoon me mataría. Entonces no logré convencerla, acabamos encontrando a Marie casi muerta. Estábamos en Tierra Santa.

-Mierda

-Si, Mierda. Ni siquiera les creía hasta que no la ví con mis propios ojos. Hubieran estado ahí. Casi me muero.

-Si, de manera literal casi te mueres.

-En todo caso logré mi cometido, y ese era traer a Lluvia, quien a su vez traía a Marie y esta a Madai, todos felices. Ahora, si me disculpan... planeo ir a casa.- removí mis dedos como despedida pero mi poder no me hizo desaparecer. ¡Que carajos!

-Jess, estamos sin dones. Todos nosotros.

-¿Cómo? ¿Porqué?

-Madai hizo esto. Para salvarlas. Cuando te digo que se estaban muriendo ustedes tres lo digo enserio.

¿Me estaba muriendo?

Moría y honney no está aquí en espera de que despierte.






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