Ha pasado 1 semana de lo sucedido en la cena, no me comporte de la mejor manera delante de todos pero le pedí disculpa a mi mamá por levantarle la voz, me dijo que no pasaba nada y que la disculpara a ella también ya que ella sabe que ese tema me pone aún mal cada vez que lo mencionan.
Ese día charles se ofreció a llevarme a mi habitación y se quedó conmigo hasta que me quedé dormida.
Es la primera vez que me pasaba algo como esto, llorar frente a él no estaba en mis planes pero ya no aguantaba más cuando le terminé de contar.
El estuvo ahí todo ese lapso, no le importo que le hubiera manchado su camisa de maquillaje, que cualquier cosa que necesitara ahí estaría el para mí.
Me limpio mis lágrimas y me dio mimos en mi cabeza para quedarme dormida. Antes de cerrar mis ojos sentí sus labios en mi mejilla, fue un beso de "todo estará bien bonita" me sentí muy segura en ese momento con el.
Lando y Carlos por supuesto al día siguiente fueron a mi habitación y como si fuera ya costumbre se acercaron para abrazarme y me solté a llorar con ellos otra vez.
Se sintió muy bonito que fueran a buscarme por que se que les importó y les preocupó, se siente muy bonito tener esa confianza con ellos, que me vean llorar sin juzgarme, darme su hombro para desahogarme y estar para mi.
Arregle todo con todos, les pedí disculpas por haberme ido ese día sin decirles nada, ellos me comprendieron y dijeron que no había pasado nada.
Me encuentro en Cancun con mis padres ya que me vine con ellos para pasar las vacaciones, faltan dos semanas para la segunda carrera y quería tener mi mente despejada para cuando tuviera que volver.
Mis padres me dijeron que querían hablar de algo muy importante conmigo y que es muy importante mi opinión sobre eso.
Estoy muy nerviosa por lo que vayan a decirme, mi mamá está semana se empezó a sentir mal y se la pasó vomitando todo lo que comía, por eso venimos a la playa por que se que es su lugar para olvidarse de todo aquello.
Aunque mi mamá haya aguantado todo esto durante 10 años esto me hace creer que es muy fuerte, pero no me gusta verla sufrir de dolor antes de dormir, quisiera que ya no le doliera nada.
Cae la noche y mi papá nos llevó a comer frente al mar, es una mesa para nosotros tres solamente muy bonito. Estoy segura que este es el momento donde me dirán con tanta urgencia. Pero espero poder comer sin tener alguna preocupación.
- ¿Pasta verdad?.- pregunta mi padre antes de destapar mi plato.
- ¡Si! Ya extrañaba esto.- exalto como niña chiquita y mis padres tengan una pequeña carcajada.
- Sabíamos que te iba a gustar esto, es tu platillo favorita desde que eras una niña.- dice mi mamá sonriendome.
- A mi hermano y a mi nos encantaba la pasta que nos preparabas mamá.- digo con un suspiro mirando al cielo.
- Aún recuerdo cuando se la pasaban todo el día en el cuarto de música y la única manera de sacarlos de ahí era haciéndoles esa pasta.- reimos los tres al comentario que hace mi mamá.
- ¿Creen que Mateo este orgulloso de mi en este momento?.- digo sin pensarlo y mis padres solo me regalan una sonrisa de "por supuesto que sí hija" . Es algo que me he preguntado mucho este tiempo, después de su partida mi vida se fue para abajo y me dejé llevar por mis supuestos "amigos", batalle mucho para salir adelante, hasta que pude terminar mis estudios y entrar a trabajar a Ferrari, supe que mi vida volvió a tener sentido. Pero me gustaría que el estuviera aquí, me hace tanta falta.
Durante la comida estuvimos hablando mucho del pasado, algo que yo antes no me atrevía, pero teniendo a estar dos personas maravillosas enfrente mío no me puedo sentir más segura, ellos han hecho mucho por mí, estuvieron para mi cuando caí en depresion por lo de mi hermano, lloramos juntos cuando lo extrañamos, son los mejores padres.
- Hija, hay algo que queremos decirte.- mis padres me ven y se toman de sus manos.
- Lo hemos pensado bastante, no es un tema del cual nos guste tocar pero es la decisión de tu madre y yo solo quiero lo mejor para ella.- habla mi papá para después con una de sus manos toma la mía.
- Me están asustando papá ¿Que pasa?.- pregunto nerviosa
- Hija, como sabes estos 10 años han sido muy difíciles para mí, el medicamento ya no me hace efecto, las quimioterapias me hacen sentir cada vez mal y yo ya no quiero sentirme mal ya no quiero sentir dolor.- las palabras de mi mamá hace que se me haga un nudo en la garganta y se me humedescan mis ojos.
- Tu mamá tomó una decisión, yo al principio me opuse muchas veces pero yo amo a tu mamá y yo le prometí estar con ella en la enfermedad y respetar cada una de sus decisiones...
- Ya diganme por favor.- digo con una voz temblorosa
- Hija, he decidido... hacerme la eutanasia.- en mis ojos empiezan a caer unas cuantas lágrimas al escuchar lo que dice mi mamá. Me quedo pasmada a lo que acabo de escuchar ¿Mi mamá quiere morir? No puedo perderla a ella también, a ella no.
- Ma...mamá aún te falta mucho por vivir, no...no qu...quiero perderte a ti también.- digo con la voz entre cortada, solo siento que mis lágrimas resbalan por mis mejillas. A mis padres también se les empiezan a humedecer los ojos, los dos me toman de las manos más fuerte. Me paró de mi lugar y voy abrazar a mi mamá con todas mis fuerzas y empiezo a llorar en su hombro.
- Todo estará bien hija, yo estaré siempre contigo.- dice acariciandome mi espalda, diciendo en un susurro sollozando.
Mi mamá ha lucha por largos 10 años, cuando me ve yo se que disimula una sonrisa para no sentirme mal frente a ella, pero yo sé que esta sufriendo de dolor.
Yo sé que es una mujer muy valiente, dijo que se esperará un momento ya que se tiene que realizar muchas cosas para hacer la eutanasia, yo solo espero que me dure mi mamita un poco más y que no me le pase nada en ese transcurso de espera.
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Please don't go [Charles Leclerc]
FanfictionRachel García, una chica mexicana siguiendo su sueño de trabajar en la fórmula 1 desde pequeña, gracias a su padre y al monegasco de ojos verdes que conoció de pequeña, nace esa ilusión en trabajar en algún equipo de ellos. 10 años después ella cump...