14. Encontrada

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Todos estamos desayunando, papá es un terco que decidió salir de la casa de acampar y dejar de descansar.

Carol: ¿Más huevo, Ellie? —asentí ya qué tengo la boca llena de comida.

Extiendo el plato y echa un poco más, sonreí agradecida, trague lo que tenia en la boca.

Ellie: Gracias, Carol —ella sonrie un poco.

Ella se aleja para seguir repartiendo la comida, miro hacia los demás que parecen algo tensos.

De reojo miro hacia Lori, quizás deba de decirle que sé por accidente sobre su embarazo o quizás ya no este embarazada.

¿Sé lo habrá dicho a Rick? O quizás no porque Carl ya lo habría sabido y me lo hubiera contado en seguida.

Vaya qué es confuso los problemas de los grandes.

Daryl: Ardilla —lo miro —. ¿En que piensas? Que no estas comiendo.

Ellie: En nada, solo me perdí por un momento —sonreí un poco antes de seguir comiendo.

Glenn: Oiga —volteamos a verlo —. Saben... en el granero hay caminantes.

Todos dejamos de comer, trague la comida que tenía en la boca con dificultad.

Dejamos los platos donde sea y nos levantamos, papá me toma de la mano.

Todos caminamos hacia el granero, miro hacia la casa cuando Maggie entra apresurada.

Nos detenemos a un dos metros de distancia de la puerta del granero, Shane es el único que se acerca.

Mantiene distancia, pero aún así intenta ver por los orificios hacia adentro.

Se aleja cuando empujan ligeramente la puerta, camina hacia nosotros.

Shane: No me digas que estas de acuerdo con esto —dice molesto.

Rick No, no lo estoy —pero… —. Pero somos los huéspedes. No es nuestro lugar.

Shane: ¡Pero son nuestras! —grita molesto

Glenn: Baja la voz —le pide, nervioso, viendo por unos segundos hacia la casa.

Andrea: No podemos pretender que esto no existe —apoya a Shane.

Shane: No esta bien. Pará nada —comienza a caminar de un lado a otro con pasos pesados y molesto —. O tenemos que entrar ahí y hacer las cosas bien o nos vamos. Hace tiempo que venimos hablando de Ford Bening.

Rick: No podemos irnos, Shane.

Shane: ¿Por qué, Rick? —se detiene para verlo —. ¿Por qué?

Carol: Porque mi hija aun no aparece —le recuerda.

Shane: Esta bien —lleva las manos a su rostro y suspira antes de alejarlas —. Creo que es hora de que empecemos a pensar en otra posibilidad.

Rick:Shane, no vamos a abandonar a Sophia.

Daryl: Estoy cerca de dar con la niña —lo miro, él no suelta mi mano —. Hace dos días hallé su maldita muñeca.

Shane: Una muñeca, Daryl —enfatiza como si no tuviera importancia —. Encontraste solo una muñeca.

Daryl: No sabes de que demonios hablas —lo sostengo con fuerza de la mano ya qué quiere acercarse a él.

Rick se coloca en medio y extiende los brazos para tener alejado a ambos del otro.

Shane: Solo digo lo que se debe decir —asegura —. Si encuentras una pista es en las primeras 48 horas.

Rick: Shane, basta.

𝗦𝗼𝗺𝗼𝘀 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲𝘃𝗶𝘃𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora