𝗦𝗼𝗺𝗼𝘀 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲𝘃𝗶𝘃𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀

54. Un Dia Normal, Por Ahora

Pasaron dos meses desde el derrumbe de los muros, muchas cosas han cambiado. Las personas ya saben defenderse por completo, llevan armas a donde sea que vayan.

Carl por suerte no perdió el ojo, pero si le quedo una quemadura cerca del ojo y eso lo hace sentir algo inseguro.

Ethan y Lilian vivien con Rick, Michonne, Carl y Jude. Nosotros ya no vivimos con ellos porque nos mudamos con la abuela para que no se sintiera sola y Carol nos acompaño.

Papá por su parte se alegro de que yo ya no comparta habitación con Carl.

Maggie ya tiene dos meses de embarazo, apenas se le nota aunque Daniel dice que si hay una gran diferencia, el menos emocionado por su pequeño hermano o hermana que viene en camino.

Eugene y Gabriel dejaron de ser unos cobardes y ahora hacen rondas de vigilancia más seguido.

A la abuela no le tomo mucho superar la muerte de Harold, pero sé que hay veces en las que se siente sola, por eso intento pasar más tiempo con ella aunque mis turnos de vigilancia me mantienen ocupada.

Daniel sigue sin hablar con Enid aunque ella sigue siendo parte de nuestro grupo de amigos, aunque si se le a visto más cariñoso con Lilian, eso no le agrada mucho a Ethan.

Ellos nos han contado que escaparon de su comunidad, por una discusión que tuvieron con alguien, no quisieron dar muchos detalles y entiendo que debe de ser difícil. Pero sin importar su pasado ahora están aquí, su presente es más importante.

Me encuentro en mi habitación afinando la guitarra que papá encontró días atrás.

Daryl: Ellie, ya debo de irme —volteo a verlo, asentí —. ¿Algo que quieras?

Ellie: Que encuentren comida.

Nos estamos quedando sin comida, somos muchos y necesitamos alimentarnos bien.

Daryl: Eso haremos —se acerca, besa mi frente —. Cuida de tu abuela y si vas a salir...

Ellie: Lleva tu arma a todos lados, lo sé papá —sonrie un poco.

Daryl: ¿Cuándo empezaste a crecer tanto? —reí un poco.

Ellie: Suenas a un anciano —me burlo un poco.

Daryl: Que chistosa —camina hacia la puerta —. Procura no regresar tan tarde.

Ellie: ¡Te quiero! —grito cuando salio de mi habitación.

Daryl: ¡Yo igual te quiero, señorita! —reí.

Toco la guitarra y sonrió cuando esta completamente afinada, veo el reloj en mi mesita de noche y ya casi es momento de salir.

Me levanto de la cama, tomo mi cinturón y me lo coloco rápido, salgo de la habitación y bajo corriendo las escaleras.

Stella: Ellie, no bajes así o puedes caerte —asentí —. Lleva esto si vas a salir.

Me extiende una bolsa.

Ellie: No creo que sea...

Stella: Son bocadillos para todos —tomo la bolsa y me la coloco en el otro hombro para que este cruzada —. Llevas tu arma.

Ellie: Si.

Stella: ¿Cuchillo?

Ellie: Tambien.

Stella: ¿Quieres llevar una gorra, puede hacer calor..?

Ellie: Abuela, solo saldremos un momento —le doy un beso en la mejilla —. Nos vemos después.

Salgo rápido de la casa y me acerco a la casa de Carl, literalmente es la de al lado.