𝗦𝗼𝗺𝗼𝘀 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲𝘃𝗶𝘃𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀

26. Perdóname

Carl se fue con Rick y Michonne a King County, intente ir con ellos pero papá dijo que lo acompañaría a cazar así que no me libre de verlo.

Ellos se fueron en la madrugada, Rick dijo que hay lugares donde encontrar armas así que las traerán y si encuentran más provisiones mejor.

Carol esta terminando de desenredar mi cabello mientras estoy desayunando y jugando ajedrez con Daniel.

Daniel: Es extraño que no esté Carl —sonrie un poco —. Hay más silencio.

Sonreí un poco.

Ellie: Si, es muy griton —reimos un poco.

Daniel hace un movimiento en el ajedrez terminando la partida saliendo victorioso, pongo los ojos en blanco.

Ellie: Tramposo.

Daniel: No es mi culpa que no sepas jugar ajedrez —le saco la lengua y hace lo mismo.

Carol: Ellie, se enfriara tu comida —sigo comiendo —. Bien, tu cabello ya esta listo. Quizás deba de cortarlo un poco.

Ellie: Mi pelo de esta volviendo rubí, deja que disfrute mi pelo castaño —le pido.

Y es verdad, antes tenía pocos mechones y ahora se están volviendo más y más.

Mi pelo es extraño al igual que mis ojos.

Carol: Bien, pero al menos las puntas —asentí.

Daryl: Ellie, ¿ya estas lista? —volteo a verlo.

Ellie: ¿Para qué?

Daryl: Para ir a cazar, ardilla —suspiró.

Ellie: ¿No pueden ir solo tú y tío Merle? —pregunto —. Puedo ayudar más aquí.

Merle: Camaleón —aparece detrás de papá —. Hazle casi a tu viejo, ve por tus cosas que nos vamos a cazar.

Ellie: Cómo digas, tío —me levanto, camino hacia el bloque de celdas.

Llevo a mi celda y tomo el arco junto el carcaj, salgo y camino al comedor.

No es que no quiera ir a cazar, es más así aprendo más rápido a cazar y a despellejar un animal, aunque suene un poco cruel.

Pero las cosas con papá y mi tío Merle están incómodas, no quiero hablar mucho con ellos porque sigo enojada.

Llego al comedor y Daniel se acerca para chocar los puños.

Ellie: Nos vemos en un rato —camino detrás de papá y tío Merle.

Salimos al patio, el campo sigue lleno de caminantes. Los sigo para salir por otro lado.

Merle: He esperado cazar contigo desde hace mucho tiempo, camaleón —lo miro —. Al fin tu padre sigue uno de mis consejos.

Ellie: Lo que digas, tío —no lo miró.

Escucho un gran suspiros de papá, le pedí tiempo para que dejara de estar enojada con él, pero al parecer hará lo contrario.

En fin, intentaré no ser mal educada con ellos.