26

1.4K 107 1
                                    

Iba Jungkook en los asientos de atrás de un gran coche acompañado de Charlie Puth, había colaborado en una canción con él. La canción le hizo gracia, todas las frases que le tocaron cantar parecían su vida con TN en estos momentos.

Todas esas palabras tenían un gran significado, no podía sacarla de su mente, y saber que alguien que no conocía estaba tras ella lo tenía ardiendo de celos, unos muy malos...malísimos.

—Mira aquí —le dijo Charlie con el móvil en la mano, estaba grabando.

Jungkook sonreía y los dos empezaron a recrear música haciendo sonidos con sus bocas y dando golpes sobre las puertas.


Estaban divirtiéndose hasta que al mirar por la ventanilla Jungkook pudo ver a TN.

No podía ser cierto, era ella ¡Por Dios! Era la chica que cómo decía la canción: de izquierda a derecha de su mente se le aparecía día y noche.

Estaba de pie en la acera, reía junto a dos chicas de su edad, llevaba un pantalón corto de color negro que dejaba ver su piel ligeramente tostada y sus esbeltas piernas. Después pudo admirar ese top brillante que hacía ver su pecho más bonito que nunca. ¿Dónde iría así vestida? Quería salir corriendo en su busca. ¿Pero cómo hacerlo sin ser visto por todos los que pasaban por allí?

Miró a Charlie y como sus conversaciones eran limitadas por ser de países distintos y no saber ninguno hablar el idioma del otro muy bien, se puso nervioso. JK entendía el inglés más de lo que hablaba, así que con palabras sueltas se comunicaba a veces cuando su traductora Nicole no se encontraba a su lado, y ahora era uno de esos momentos.

—Girl —le dijo señalando con el dedo a TN.

El otro miró atento dónde señalaba su compañero de canto.

—¿Hay una chica que te gusta ahí? —le dijo Charlie.

Jungkook asintió.

—¿Cuál de las tres?

—Brown skin —piel morena le decía.

—Ahhh Ok —reía Charlie— beautiful girl.

A uno de los hombres que había delante le indicó el cantante estadounidense que le dijera a la chica que quería hablar con ella.

TN reía con sus amigas, habían quedado en ir a una sala de música bastante famosa que habían abierto recientemente. Un hombre bastante guapo se les acercó.

—Hola señoritas espero que no se asusten pero vengo a decirle que quieren hablar con usted —miró y señaló a TN.

—¿Conmigo? ¿Quién? —dijo ella desconcertada sin entender de qué se trataba.

—Lo siento pero no puedo decir su nombre delante de ellas, solo se lo diré a usted a solas —el hombre le sonrió.

Las compañeras del hospital en el que ella trabajaba la miraron.

—¿Tienes un admirador? No nos habías dicho nada...eres mala TN —le dijo una entre risas.

—Yo con que fuese éste que tenemos aquí delante me conformaba —dijo la otra bajito y mordiéndose el labio.

Jungkook miraba desde el interior del coche por la ventanilla y nervioso no pudo remediar bajarla y llamarla al ver que no se movía de su sitio.

—¡TN! —le gritó con media ventanilla bajada que dejaba ver solo sus ojos negros.

Ella abrió los suyos de par en par sorprendida.

—Esos ojos....¿Dónde he visto yo esos ojos? —dijo una de sus amiga.

Se puso nerviosa, ¿Estaba loco? ¿Qué estaba haciendo? Lo podían reconocer y ya los medios habían preguntado por ella una vez, y él la negó.

Sin saber qué hacer para pararlo escuchó de nuevo la voz que tanto le gustaba escuchar en el silencio de su habitación.

—¡TN ven! Por favor...

Nerviosa y para que se callase de una vez por todas, fue andando hacia el coche y se puso frente a la ventanilla....mirando esos ojos negros que era lo único que veía suspiró molesta.

—¿Estás loco? ¿Para que pegas esas voces diciendo mi nombre? —escuchar sus palabras en coreano lo hicieron ponerse feliz, tenía que llevar un traductor a todas horas a su lado, y ahora que no lo tenía y con su acompañante que solo podía decir frases cortas y sueltas, se sintió feliz.

—Sube..

—¿Que suba donde?

—Atras conmigo, me cambiaré de asiento para estar contigo —tenía esa sonrisa tan bonita aunque ella no podía verla, pero sabía que sonreía porque sus ojos lo delataban. Esa era una de las cosas que amaba TN de Jungkook. Sus ojos sonreían antes que sus labios.

—No sé que pretendes pero...

Jungkook bajó la ventanilla del todo y Charlie Puth apareció moviendo su mano saludando sonriente a su lado.

—Hola chica piel morena —le dijo éste recordando las palabras que le dijo Jungkook antes.

—¡Señor! —ella se puso la mano en la boca por la impresión.

—Sube por favor, no podemos seguir por más tiempo aquí parados, si las fans nos ven puede ser peligroso —le habló en inglés Charlie.

—Cariño sube por favor, necesito hablar contigo —le dijo en coreano Jungkook.

Conocer dos idiomas era un lujo en éste momento pensó TN.

Se abrió la puerta de atrás del coche y Jungkook gateó hasta estar esperándola.

Ella subió y se sentó a su lado demasiado tensa.

Estaba enfadada con él aún, pero sin embargo allí lo tenía con una gran sonrisa y guapísimo, verlo con su pelo echado atrás engominado era un deseo para cualquier chica o chico que quería tenerlo tan cerca como ella lo tenía en éste momento.

—Creo que os conocéis ¿No es así? —le preguntó Charlie a TN.

Ella asintió.

—Ya veo, al ver su cara al mirarte ahora y cuando se dió cuenta que eras tú antes lo delata —reía el cantante.

Ella asintió y le sonrió, después miró más seria a su desastre que la miraba en trance.

—Qué vergüenzas me haces pasar algunas veces —le dijo en tono bajo.

—¿Vergüenza es lo único que te hago pasar? También te hago sentir otras cosas, no hagas que te refresque la memoria —ella se puso nerviosa, lo estaba escuchando todo el otro—. No te preocupes, no tiene idea de coreano, así que decirte que te he echado mucho de menos solo lo sabremos tú y yo.

—No digas eso, lo nuestro acabó. Lo dejaste bien claro.

—Lo que necesitamos es hablar esto a solas.

—No quiero hablar nada.

La situación se estaba volviendo rara para el otro que estaba dentro del coche.

—Dile que quiero ir a mi hotel, que nos lleve hasta allí.

Hablaba de Puth.

—Lo dirás por tí, yo no pienso ir.

—Tenemos que hablar y aquí no puedo.

—Te he dicho que ya está todo hablado.

Allí los dos enfadados y suavizando el tono para que el otro no se enterase de nada.

Suspiró Jungkook y miró a Charlie.

—For the car let's go down —le dijo con una sonrisa cómplice y cogió después la mano de TN con fuerza mirándola con deseo.

—¡No Jungkook! No iré contigo...

ME ENAMORÉ DE UNA ARMY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora