—Yoongi —lo llamó ella.Él volteó para mirarla, estaba nervioso con las manos metidas en los bolsillos de su pantalón, tarareaba una canción y se hizo el silencio cuando la vio.
Él entendió que debía hablarle lo más calmado posible, hacer un esfuerzo para no parecer nervioso.
—¡Hey! ¿Ya habéis terminado de hablar Kookie y tú?
—Sí ya hemos hablado...ahora me gustaría que hablásemos tú y yo, si tú quieres por supuesto —le habló ella triste, no quería hacerle daño, no se lo merecía, siempre fue especial en su vida y no se perdonaría hacerle ningún daño.
Pasado...año 2013
TN y un grupo de amigas salían de su colegio y charlaban animadamente sobre una nueva boyband que había debutado en Seul en verano, les gustaba el k-pop, los k-dramas y sobre todo los chicos coreanos.
—¿Como se llaman? —dijo Martha.
—Chicos a prueba de balas, me encanta...me encanta, tienen un nombre potente —saltaba al lado de TN su amiga Elizabeth— Bantang Sondeonyand sería en coreano.
—Me gusta —dijo TN sonriendo.
—Y están de muerte, mirad —y con el móvil en la mano las cinco miraban las fotos de los chicos que habían debutado el trece de junio de ese año que solo eran unas adolescentes.
Estaban en invierno y TN en el silencio de su habitación se interesó por todos los integrantes, miraba sus fotos y escuchaba sus canciones. Sonreía mucho al ver sus bailes y sus actitudes de chicos malos, pero había uno que atrajo su atención entre todos.
Solo era una chica de secundaria, enamoradiza y muy sencilla que vestía con pantalones de chandals y sudaderas de colores. Se ilusionaba con artistas que parecían tímidos ante la fama. Al ver a Suga se percató de su forma de esconderse detrás de los demás. Lo veía sonreír como si no quisiera hacerlo pero que sin embargo era una de las más bonitas sonrisas que nunca había visto.
Ilusionada se aprendió su verdadero nombre, su edad, su año y lugar de nacimiento y se enamoró de su voz grave y sus versos rápidos de rap. Era tan guapo que se le hizo imprescindible ver las fotos que la agencia lanzaba sobre él en los medios coreanos.
Pronto se volvió su BIAS, nombre con el cual denominaban al integrante masculino con el que se sentían más conectadas e identificadas. Mira que había grupos que eran todo un éxito en aquel momento, pero sin embargo el que ella seguía era aquel que sus canciones la hacían sentirse bien consigo misma y con aquellos que lo mismo eran tiernos que se volvían unos diablos.
Toda su trayectoria la llevó religiosamente siempre y creía que estar enamorada de Suga durante todos éstos años era lo mejor que le había podido pasar.
Fue el antídoto a sus penas durante todo el tiempo, aún lo era aunque él no lo creyera.
Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ~>')~~~
—¿Quieres hablar conmigo? —le preguntó Yoongi preocupado por verla tan triste.
—Sí...creo que mereces una explicación de mi parte —se miraron en silencio por un momento.
Él le sonrió como ella siempre lo había visto y sin poder remediarlo se le saltaron las lágrimas.
—Oh...nooo...por favor no llores —llegó hasta ella Yoongi y la abrazó.
—Lo siento, de verdad que lo siento, has sido para mí alguien tan especial que nunca lo podrás creer —se echó en él para sentirlo aunque no como a un hombre sino como a su ídolo al que amaba.
—Ya veo —se dió cuenta de lo que pasaba—. Pero sin embargo has elegido a Kookie ¿Verdad?
—No sé cómo ha ocurrido, yo estaba enamorada de tí, de todo lo que tú eras —se separó y se limpió las lágrimas para mirarlo, sería violento seguir pegada a él.
—No te preocupes, te entiendo. Musculitos sabe cómo atraer a las chicas.
—No ha sido por eso, él nunca llamó mi atención, mientras que tú sí, eras todo para mí y ahora me he dado cuenta que siempre has sido mi amor platónico, ese que anhelas conocer y que idólatras por todo lo que te hace sentir —unas lágrimas le volvieron a rodar por la cara— pero con Jungkook es otra cosa, es...es...
—Es que te has enamorado de él TN, así de sencillo y aunque estoy triste yo nunca haría nada que le hiciera daño a Kookie —respiró fuerte — me gustas no voy a negar la evidencia, eres muy especial y si ése se pasa contigo ahí estaré para tí, ven cuando quieras que te demostraré que soy la mejor opción —sonrió de nuevo.
Estaban los dos mirándose y como un torbellino apareció Jungkook.
—Los veinte minutos ya han pasado —se puso al lado de TN y la cogió por la cintura, se dió cuenta que ninguno lo miraba— !yeyyyy! Que estoy aquí...
Su amigo lo miró con media sonrisa.
—Como la trates mal, cómo la hagas llorar o cómo se te ocurra dejarla no habrá otra oportunidad, iré en su busca y te la quitaré ¿Entendido? —le dijo en tono autoritario por ser el mayor.
—Hyung no digas babosadas, ella estará conmigo siempre —se volvió hacia ella y le clavó sus ojos negros con una sonrisita seductora— ¿A que sí? A que yo soy lo que tú siempre has querido? A Jeon Jungkook...el mejor.
Yoongi rodó sus ojos y sonrió. Su pequeño de ojos de Bambi se estaba comportando con esa actitud descarada, pero así lo quería y con el corazón roto se despidió de ellos porque ella no le contestaba a su querido novio, la veía triste y eso lo ponía triste a él también.
—Adiós TN —le dijo mirándola de frente.
—No es un adiós Yoongi, es un hasta pronto, espero poder hablar contigo de nuevo y tomarnos algo juntos..
—Eso, los tres juntos —dijo Jungkook guiñando al otro.
—Eres un tío con suerte —le dijo Yoongi y le dió un golpe en el hombro.
—Lo sé...joder que lo sé.
Se despidió de ellos sin más y se fue.
La opresión en el pecho que le dejó a TN no era cualquier cosa, ¿Cómo se podía estar enamorada de dos hombres a la vez? De distinta forma después de todo, pero enamorada...
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ME ENAMORÉ DE UNA ARMY
FanfictionEl viaje a las Vegas del grupo BTS quedará para siempre marcado a fuego para sus integrantes. Aunque será Jungkook, el más pequeño de todos, quien va a experimentar la mejor experiencia que jamás creyó tener.