ME ENAMORÉ DE UNA ARMY

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TN estaba tremendamente cansada, había pasado dentro del quirófano quince horas, fue porque tuvieron un trasplante de corazón, lo hizo ayudada por Mark y otros facultativos, los cuales, cada uno en su especialidad consiguieron que todo acabara en éxito.

Llegó al zoom y se desplomó. Había tenido que contratar una chica para que la ayudara con Bora, ya que Jungkook tardaría en volver. Jin tenía que terminar con su agenda en Argentina. No se lo reprochó en ningún momento, si ahora su amigo lo necesitaba lo comprendía y además se sentía feliz por saber que estaban juntos.

La chica que cuidaba a Bora lo hacía en el antiguo apartamento de TN, no podía llevarla al apartamento de Jungkook, nadie podía saber la conexión que había entre ellos. Ella se mudó allí hasta que él volviera.

Cuando la llevaba Jungkook a la guardería, se quedaba en el interior del coche y un hombre del staff la dejaba con las cuidadoras.

Todo se hacía correctamente para no ser descubiertos. Pronunciaban todos Jeon Bora, pero aún no había un papel que dejara claro que él era el padre de la niña, eso tenía a Jungkook en peor humor que a TN, no soportaba que solo llevara los apellidos de ella.

Miró su móvil que estaba dentro de su taquilla y se preocupó, tenía un montón de llamadas y mensajes de su novio.

JK: Hola nena, ¿Cómo va tu día hoy?

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JK: Cariño ¿Qué estás haciendo?

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JK: TN, ¿Tan ocupada estás que no me
contestas?

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JK: ¡¿Te pasó algo?! Por favor dime, estoy preocupado.

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JK: ¡Joder! ¡Contesta! ¿No?

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JK: Ok....espero que te estés divirtiendo dónde estés.

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JK: Estoy a punto de llorar ya, llamo a Hiari y apagado lo tiene.....el otro igual, sabe Dios dónde están esos dos metidos. ¿Es que en Seul han robado todos los putos teléfonos?

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JK: Me quedaré aquí en Argentina para siempre, así que ya no me verás más, no te preocupes, Jeon Jungkook se hará Argentino.

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Ella se quedó con la boca abierta, que temperamental era ¡Madre mía! Y qué poca paciencia tenía.

Estaba rodando sus ojos y resoplando y vio que tenía un llamada entrante, era él de nuevo. La canceló sin contestar pero le escribió un mensaje.

TN: Estoy viva, no te preocupes y relájate.

JK: ¿Porqué no coges el teléfono?

TN: Cómo estás en éste momento creo que si lo hago discutiremos, te conozco Jungkook.

JK: Y una mierda, yo no estoy de ningún modo en éste momento.

TN: Adiós Jungkook.

Apagó el teléfono y se echó a dormir por dos horas, después tenía que ver si el paciente seguía estable y más tarde iría con Bora, había función en la guardería, venían payasos.

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—¿Cómo ha podido apagar el teléfono? No puedo creerlo, ¡Joder! Suerte tiene que estoy lejos.

—Y llegó y se fue sin decir nada la ridícula, entra aquí sin decir ni quién es como si eso fuese normal.....¡Y tú! —le dió un grito Jin a Jungkook y lo señaló con el dedo— te dejas la puerta abierta aún sabiendo que eso nunca lo hacemos que es una cosa de siempre me cago en todo.

—¿Pero qué dices? —estaban los dos sentados en los sillones de la habitación y cada uno en su conversación.

—¿No has escuchado nada de lo que te he dicho? —se molestó Jin— ¡Qué por tu culpa entró aquí una mujer carajo!

Se levantó Jin enfadado y salió por la puerta, quería dar una vuelta y despejarse.

Entonces por el pasillo venía el director del hotel.

—Buenas señor Kim —le hizo una reverencia que Jin le correspondió

—¿Está todo de su agrado? —le preguntó el otro.

—Sí gracias, la suite es preciosa y el servicio estupendo, pero hubo una cosa que no se puede volver a repetir —allí iba a contar otra vez lo de la chica— se metió una chica de pronto...

—¿Una chica? —dijo aquel hombre corpulento, eso no se podía permitir allí en su hotel, era un lugar muy estricto y por eso había gente bastante importante— ¿Me puede decir cómo era?

—Pelo castaño claro, ojos almendrados, esbelta y muy avispada, demasiado diría yo —le comentó él, miraba a la nada recordando cada detalle de aquella "asaltahabitaciones" que le pareció guapísima.

—Hola papá —los dos se volvieron y Jin abrió los ojos impactado.

Era la chica de la que él llevaba hablando todo el día, ¡JODER! ¿Aquella era? No podía ser... Y es que vestía en ese momento con un vestido largo plateado, era de tirantes finos y escote pronunciado sin llegar a la vulgaridad, millones de piedrecitas brillaban sobre ella, su cuerpo estaba enfundado por aquel precioso y seductor vestido ajustado. Sus curvas eran algo de otro mundo, su pelo estaba recogido con una trenza que llegaba desde la frente hasta casi llegar al trasero.

¿Tan largo tenía el pelo ésta mañana? No se había fijado.

¡Tonto, que eres tonto, cierra la boca! Se dijo y la cerró apretándola para que no se le abriera de nuevo.

—Hija, estás preciosa —su padre la besó.

¿Hija? Pero si era una fans desesperada por verlo a él y a Jungkook, si lo que quería era tocarlo, devorarlo y sabe cuántas cosas más le haría.

—Señor Kim, ésta es mi hija Florencia, ¿A qué es bonita?

Él asintió tragando y entonces se dió cuenta que tanto que la llamó ridícula y el ridículo era él en éste momento que ni hablar podía.

Que se te cae la baba ¡Joder! No seas patético y endereza el cuerpo, mírala fijamente y que sepa que eres uno de los tíos más deseados del mundo mundial.

Y se armó de valor.

—Encantado de conocerte Florencia, soy Kim SeokJin —le dijo y cogió su mano para besarla delicadamente.

Ella se la dio pero lo miró de lado, era el idiota ese de la habitación, ahora lo había reconocido.... pero estaría callada, su padre se enfadaría por saber que discutió con él, y es que bajo ningún concepto podían discutir con un cliente, norma inquebrantable del hotel.

—¿Va de fiesta señorita? —le preguntó.

—Si señor, hoy es el día que se casa mi prima, lo hace en el salón principal del hotel —toda correcta le habló.

Mira sabe hablar bien, se dijo Jin de forma graciosa pero no sé rió, allí siguió con sus ojos clavados en ella y con sus labios carnosos haciendo una pequeña O sensual.

Ella también pensaba cosas de él.

"Ojos rasgados que no están mal, es muy blanco y eso me gusta, los labios son preciosos, ¡Qué carajos! Está de muerte, está buenísimo, aún no olvido la figura potente que tenía solo con la toalla puesta ummmm..."

Se relamió los labios inconscientemente y Jin tosió de pronto al verlos tan rojos y brillantes.

Había tensión sexual, mucha...demasiada...