10- Seiun

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-Hay una cosa que no entiendo- dijo Dave.

-El que?- preguntó Dakota.

-Porque soy yo el que está atado en una silla?-

Dave estaba atado en una silla en mitad del salón porque Portia quería jugar a lo que en la Tierra sería indios y vaqueros, ella y Koi llevaban plumas en su cabeza a modo de diadema y la cara con pintura.

-Eso te pasa por ser el único humano- respondió Koi.

-Venga ya! Dakota también lo es!-

-Yo soy una vampira- replicó sacando la cámara de Dave y tomando una foto.

-De donde demonios sacaste eso?!- dijo atónito sin poder moverse.

-Llevamos días haciendo fotos y vídeos y ni te has dado cuenta- aclaró Portia- Ahora calla prisionero! Haremos un ritual para la diosa Seiun!-

-Porque tiene que ser a ella?- preguntó molesto Koi.

-Porque es linda-

-Es más linda la diosa Tara-

-No me importa tu opinión, me gusta más el pelo de Seiun!-

-Como sea- dijo rodando los ojos.

-Tenéis dioses aquí?- preguntó Dave.

-Hay unos cuantos. O bueno, había- respondió Dakota- Pero no es solo en este planeta, son los dioses de toda la galaxia-

-Increíble!- exclamó emocionado.

-Si, bueno, tampoco es para tanto- comentó Koi todavía molesto.

-Que le pasa con ellos?- susurró Dave a Dakota.

-Digamos que han tenido algún percance entre ellos, ya sabes, por ser un criminal y todo eso- explicó- Bueno, voy a comprar, no quiero que mi casa esté en llamas cuando vuelva-

-No prometo nada- respondió Koi con su típica sonrisa macabra.

-Portia, me le vigilas- le dijo a su hermana.

Portia solo asintió con la cabeza, orgullosa de que le dejaran un encargo importante.

-Tardaré un rato, ya que ALGUIEN decidió no colaborar a pesar de tener súper velocidad- dijo viendo a su hermana fijamente, ella solo miró al suelo.

Dakota salió de la casa y se montó en una especie de bicicleta alienígena, a Dave todavía le costaba asimilar la tecnología tan avanzada que tenían en esa galaxia.

-Entonces... Le cortamos en pedazos y lo asamos?- preguntó Koi a la niña sandía.

-Que?!- exclamó asustado Dave, todavía no podía decir cuando Koi decía algo en serio y cuando no.

-Mejor le metemos entero al horno- respondió la niña.

-AYUDAAA!!- gritó Dave siguiendo el juego mientras se tambaleaba en la silla.

-Silencio esclavo!!- y Portia se abalanzó sobre él tapando su boca. Porque todo el mundo hacia eso?

-Que extremidad quieres que chamusque primero?- preguntó el alien mientras de su mano aparecía una pequeña llama de fuego.

-Un brazo!- respondió sonriente la niña.

-A sus órdenes-

Portia se apartó de Dave para dejar que su amigo alien se acercara todavía con la llama en su mano.

-No me irás a quemar de verdad, no?- Dave estaba empezando a ponerse un poco nervioso, podía ver la sonrisa macabra de su amigo poco a poco hacerse más grande a medida que se acercaba.

La Galaxia Del DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora