-Y por eso las croquetas son la mejor comida que existe- terminó Kyo su relato sobre las croquetas.
-Sigo prefiriendo los pancakes- replicó Portia mientras se metía un trozo en la boca.
-Porque eres una mocosa inculta- se defendió el guaperas.
-Y tu eres un superficial- respondió la niña con una sonrisa.
-Como no voy a serlo con este rostro?- brillos salieron de su cabello nuevamente.
Mientras tanto, Dakota y Dave preparaban más pancakes para Koi y Lake, los cuales estaban sentados en una pequeña mesa un tanto alejados del resto.
Koi se había ofrecido a ayudar a cocinar, pero se negaron, la última vez que intentó utilizar la cocina esta terminó llena de humo negro.-Aquí tienen estimados clientes- Dave dejó dos platos en la mesa de alien y cyborg como si fuera un camarero.
-Muchas gracias buen hombre- respondió Lake siguiendo el juego.
Koi no dijo nada y empezó a comer lentamente.
En todos esos días que había estado encerrado por el dolor y la fiebre no había comido apropiadamente, su herida interna se lo impedía. Ahora que el dolor era menos, podía disfrutar un poco más de los pancakes.
Dave tocó su frente sin previo aviso, volviendo a comprobar la temperatura y por consecuencia, asustando al pobre alien.-Me asustaste, imbécil- le dió un manotazo para que dejara de tocarle.
-Perdón, solo quería volver a comprobar tu fiebre- se disculpó el humano- En esta nave hay medicamentos o algo para eso?-
-Esto es una nave de recreo, no hay medicamentos. Como mucho hay primeros auxilios- explicó el delincuente.
-Yo he oído que los baños de agua tibia suelen funcionar- comentó la cyborg.
-También los paños húmedos, pero eso ya se lo pusiste tu, verdad Dave?- preguntó Dakota de manera juguetona.
Alien y humano se sonrojaron, aunque el rojo de Koi casi no se notaba.
-Iré a darme un baño de esos- decidió Koi levantándose de la mesa con su plato en la mano.
-Porque no vas detrás de él, Dave?- siguió el juego Kyo.
-Ya paren con eso!!- exclamó el humano avergonzado a más no poder.
El alien salió de la cocina sin decir nada, totalmente normal. Cuando llegó a su baño personal y cerró la puerta soltó todo el aire que había reprimido en sus pulmones, dejando que el rojo subiera a su rostro.
<<Pero que mierda me pasa?!>> pensó tapándose la cara.
Se relajó, haciendo desaparecer su sonrojo inexplicable y apartando sus manos, quedando pensativo durante unos segundos.
Dave se veía igual que siempre, nada había sucedido con él. Quizás al haber extraído tan poco no le ha surgido efecto. Pero cuando entró en contacto con su magia por primera vez su cabello se volvió amarillo.
Hablando de magia, ya podría utilizar sus poderes? La herida seguía ahí, mucho menos que antes, pero seguía.Intento convertirse en un lobo. Nada.
Quizás debería de probar con algo que requiera menos energía.
Invocó un arma. Tampoco sucedió nada.
Y si prueba simplemente a acumular su magia en su mano?
Extendió la palma de su mano y cerró los ojos para concentrarse.
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La Galaxia Del Dios
Science FictionDave, un chico albino amante del mar, viaja a otra galaxia por error, donde conoce a un chico bastante interesante con el que luchará contra innumerables amenazas. -Capítulos de entre 1000 a 2000 palabras -En proceso -Importante leer el epílogo (cua...