24- Revelación nocturna

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El día acabó y todos fueron a sus respectivas habitaciones a descansar. Todos menos Dave, que tuvo que compartir habitación con Koi.

-Todavía no entiendo porque yo recibo el castigo- comentó el humano tumbado boca arriba en la cama de Koi.

-Golpeaste a un borracho y el plan se arruinó- contestó el alien sin mirarlo, tumbado a su lado.

-Porque te estaba intentando manosear y quitar el pañuelo- se defendió.

-Puedo defenderme solo, no soy débil-

-Lo se, pero no podías levantar sospechas-

-Ya que más da, mañana a mediodía llegaremos a Diuruno-

-Así es como se llama el planeta central?- preguntó girando su cabeza hacia su amigo.

-Si-

El silencio se hizo presente.

-Estas nervioso? Digo, ese es tu planeta, y hace tres siglos que no estas en el- preguntó Dave.

-No estoy nervioso. Estoy... -

No pudo terminar la frase.

-Asustado?-

-No. Más bien sería nostálgico- admitió el pequeño alien- El día que huí de allí fue el mismo día que mis padres y mi hermana murieron-

-Siento escuchar eso. No se que haría yo si pierdo a mi hermano-

-Ian, cierto?- Koi se movió para mirar a la cara al humano.

-Si, mi gemelo. Aunque no nos parecemos en nada, solo en altura- rió un poco- Echo de menos a mi familia y amigos-

Se quedaron en silencio un rato, cada uno pensando en su propia familia.

-Sabes? Vosotros me recordáis a mis amigos de la Tierra- expresó Dave.

-Enserio?- preguntó extrañado Koi.

-Si. Kyo me recuerda a mi amigo Dylan, Lake a Jayden, Portia a Mia y Dakota a mi mejor amiga Valentina. Ellas se llevarían muy bien, a las dos las encanta molestarme-

-Yo no te recuerdo a nadie?- preguntó curioso.

-Nop, eres único en tu especie- soltó una pequeña risa.

-Y... Como te molesta tu amiga Valentina?-

-Me suele llamar Dav, y no me gusta como suena esa apodo, pero ella sigue llamándomelo- sonrió al recordar todas las veces que lo había hecho.

-Dav. Te llamaré así a partir de ahora- Koi sonrió con malicia.

-Ni se te ocurra- Dave giró su cabeza nuevamente, quedando cara a cara con él.

-Es divertido-

-No lo es-

-Pues yo creo que si-

-Ya te digo que no-

-Dav, Dav, Dav, Dav, Dav- empezó a repetir seguido, hasta que Dave se hartó y le tapó la boca.

-Suficiente- dijo entre risas- Si tu me vas a molestar con eso, es justo que yo te moleste con otras cosas-

Koi apartó la mano de el humano, pero no la soltó.

-Ah si? Y con que planeas hacerlo?- sonrió maliciosamente- Que yo sepa yo tengo mucho más material para molestarte-

-Dame un ejemplo-

-Tu erección- el alien le sacó la lengua en señal de burla. El humano se sonrojó un poco.

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