Los mejores momentos se viven lentamente y sin haberse planeado.
Hoy es un día fenomenal, con una enorme sonrisa camino a mi casillero mientras todos se quedan observando mis pasos, ya estoy acostumbrada a esto, es de esperarse que entre ellos estén susurrando mi nombre como si fuera una rata de laboratorio, hace mucho tiempo deje de preguntarme que es lo que ahora esta circulando en el Instituto.
Sigo mi recorrido hasta encontrar la figura de Mateo parado delante de mi casillero con una enorme sonrisa. Por un momento olvide lo que paso entre los dos, aún no supero lo que sucedió bajo la fuerte tormenta, me quedo de píe a su lado a la espera de que diga algo.
Mateo me escanea con sus encantadores ojos grises de arriba a bajo y con una sonrisa preciosa dice.
__¿Ya te encuentras mejor?
Y como si fuera un imán los recuerdos de la última vez que estuvimos juntos regresan a mí, provocando que mis mejillas se tornen rojizas, no puedo evitar sentirme avergonzada por la manera en la que reaccioné. Todavía me sigo preguntando porqué tuve que actuar de tal manera.
__¡Lamento mucho la manera en la que me comporte contigo aquella noche! ---digo lentamente
Mateo simplemente muestra su perfecta dentadura y con voz cálida empieza a decir.
__Aún me sigo preguntando que pasó ---dice más para el que para mí mirando hacía la nada __Todavía no e logrado entender que encadenó tu reacción tan defensiva
Susurra despacio, una sonrisa se asoma en mi rostro al recodar todo lo que tuvimos que pasar aquella noche Bayron y yo, lo que antes era una pesadilla ahora sea vuelto uno de mis mejores recuerdos junto a él. Otra vez me encuentro atrapada en sus hermosos ojos verdes, cautivada por el valle que hay en ellos empiezo a sonreír.
Suspiro profundo dejando que los agradables olores que abundan en el aire perforen mis pulmones, es el hermoso estar devuelta, estar en total tranquilidad, amo esta sensación, me encanta no tener que estar preocupada por lo que ocurrirá después. Me dedico a mirar a Mateo quien se encuentra aún con una agradable sonrisa.
__Reaccione de esa manera porque estaba exhausta y necesitaba un respiro, lamento mucho haberte hecho pasar tan mal momento
Él solamente sonríe, dejándome ver aquellos hoyuelos que lo hacen ver más tierno y adorable. Aún no logro entender porqué Amanda e Isabella lo catalogan como un chico despiadado, sé que no tengo mucho tiempo en esta ciudad pero en el poco tiempo que llevo conociéndolo e logrado apreciar que es un chico muy amistoso y siempre intenta hacer las cosas bien.
Es cierto que es solitario y siempre esta apartado de todos, pero aún así sigue siendo una persona muy encantadora con la que puedes pasar momentos muy placenteros, su voz tranquilizadora me trae devuelta cuando dice.
__¿Por qué eres así? --me quedo a la espera de que diga algo más por lo que este decide agregar __Eres una de esas chicas que siempre están en las subes, no te das cuenta de lo que pasa a tú alrededor, es como si fueras un títere al cual todos pueden manipular
Sigo pérdida en mis pensamientos tratando de procesan las palabras que han salido de sus labios, no entiendo qué quiere decir con ello. Hasta ahora e creído ser una persona muy observadora o al menos es lo que siempre me ha dicho que soy mi prima Hanna, quizás me halla mentido para hacerme sentir bien, pues no soy muy fuerte que digamos.
Reconozco que en su momento fuí un juguete al que todos manipulaban, pero me estado esforzado por cambiar, creí haberlo hecho por lo que no entiendo que ha querido decir Mateo con eso.
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Bajo las garras de mí acosador
Teen FictionMerry una chica como cualquier otra, con sueños y ambiciones, que se traslada a otra ciudad junto a sus padres para obtener nuevas oportunidades, toda su vida se ve afectada por el chico más misterioso, astuto y temido del Instituto. Un chico que gu...