Capítulo 27🖤

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Amara

― ¿Quién es ella?― Pregunta suavemente Kath. Estoy apunto de responder pero ella lo hace por mi:

―Su mejor amiga―, responde segura.

―Es Dalila.

― ¿Ahora soy simplemente Dalila?― Pregunta, haciéndose la confundida.

― ¿No es así cómo te llamas?

―Siempre me has tratado más... cariñosa. ¿Qué te pasa? Estas muy seca.

―Oh, disculpame no recibirte con mil amores después de que me hayas metido en esta situación.

― ¿Yo? Cielo, te salve de esta situación. Yo fui la que habló con Damian, quien le contó que estabas con ese tal Adonis. Gracias a mi estas viva.

― ¿Sabes que? ¿Dónde queda el baño? Necesito quitarme esta sangre de encima― No quiero perder el tiempo, porque se que diga lo que diga, Dalila se esforzará por verse cómo la víctima.

Agradezco cuando no habla más y nos indica donde está el baño. Primero ayudo a Kath para que se limpie, le indico que salga para que se vista y luego me doy una ducha yo. Trato de demorar un poco. Tengo miedo. Se supone que hice todo esto por mis hermanos, por mi familia. Para que no terminaran involucrados en todo esto.

¿Y qué hice? Fracase.

¿Habrá alguna cosa que pueda hacer bien?

¿Dónde está esa Amara que era perfecta?

Esa Amara que se preocupaba por ser la mejor de sus clases y que su única preocupación era fingir que éramos la familia perfecta ante todos.

Pero ahora sé que nada será lo mismo. Se que esa ilusión de "somos la familia perfecta" quedó arruinada. Se que no ocultaré más mis sentimientos hacia Adam, porque lo amo y tardé años en poder aceptarlo.

―Cielo, ¿todo bien ahí? Llevas mucho tiempo adentro―, su voz empieza a irritarme.

―Ya salgo, Dalila―, grito mientras me envuelvo en la toalla. Miro mi reflejo en el espejo. Tengo algunos rasguños pero nada del otro mundo. Del resto... me veo igual. O eso parece.

Una vez que salgo Katherine ya está organizada. Tiene dos coletas en su cabello, están un poco torcidas pero se las hizo ella.

―Mira, esto fue lo que escogí para ti― Me entrega una minifalda blanca de mezclilla junto con una blusa rosa y unas sandalias de este mismo color.

Luzco esa ropa mientras trato de organizar mi cabello para que no se vea tan fatal. Al final me rindo y termino por haceme un moño suelto, mi cabello ya esta un poco más largo desde que Dalila lo corto. Me hago un maquillaje natural y ya estoy.

― ¿Estás emocionada?― El silencio es interrumpido por la voz de Kath. Dalila solo se queda de pie, observando. Parece estar pensando en que es lo próximo que dirá.

―Y nerviosa―, afirmo.

― ¿Tu hermana es la niña que me saludó en la llamada cuando me estaba probando aquel vestido?

―Esa misma. La rubia―, sonrio al pensar que dentro de unos momentos la estare abrazando―, tiene casi tu edad; 9.

―Espero llevarme bien con ella―, sonríe.

―Estoy segura de que le agradaras

Pasan unos minutos más y Ágata entra a la habitación. Luce diferente a cuando estaba como infiltrada. Se ve mucho más... Letal. Su belleza es indescriptible. Tiene un conjunto pegado que resalta todas sus curvas. Observo que tiene 2 armas en cada lado.

Secreto prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora