Amara
―Luces nerviosa― mi hermano no se equivoca con su suposición.
―Lo estoy― no tiene caso mentirle. Adentro, en el lujoso restaurante, nos esperan todas las personas con las que más convivimos y a las que consideramos muy importantes.
Anunciaremos nuestro compromiso. Las únicas personas que están enteradas son Hayley y Ágata. No se... estoy nerviosa por todo. Respiro profundo y sonrío cuando llega Damián. Ambos toman mis manos y entramos.
Los presentes se preguntan: "¿Qué pasa?". Las únicas que saben lucen sonrientes. Al principio, no quería esta cena así para anunciarnos, ya que estamos todos reunidos y somos un blanco "fácil", pero mis futuros esposos se encargaron de todo.
―Hola― saludo a todos y mis hombres lo hacen igual.
―Luces guapísima, belleza tropical― me abraza Rebe, hace rato no me llamaba así. Un pequeño bulto se encuentra en su vientre, no es demasiado notorio, pero allí está.
―Como siempre― concuerda Sonny.
― ¿Cuál es el motivo de esta cena? ― Pregunta mamá después de un rato, cuando ya hemos ordenado.
― ¿Por qué tendría que haber un motivo? ― Pregunta Alicia, quien esta al lado de Eris y Hayley.
―No hay que adelantarnos― dice Adam, cambiando de tema.
Todos conversamos. Las cosas van bien, mis amigas y mis seres queridos son felices... dentro de lo que cabe. En unos pocos meses Rebe podrá saber el sexo del bebé y Ángel no puede estar más feliz. Sonny y Ágata están haciendo planes para viajar juntas y tener privacidad al máximo. Todo... todo marcha bien. Antes de venir, dejé unas flores en donde están los restos de Katherine. La culpa sigue allí, pero mi felicidad también. Es un tipo de lucha interna.
La noche continua, algunas anécdotas nos hacen reír, otras logran ponernos nostálgicos. Parecemos personas "normales". Ninguno de nosotros luce con preocupaciones, (sabemos disimular, pero también sabemos disfrutar cuando es el momento).
― ¡El postre está delicioso! ― Exclama Eris mientras se saborea.
―Chocolate, tu favorito― respondo.
Papá es el único que está impaciente. No puede ocultarlo, no al menos conmigo. Dejo que transcurran unos pocos minutos mas y una vez me siento preparada, me levanto. Armada de "valor" trato de hablar sin fallar en el intento.
―Aprovechando que todos están aquí, me gustaría hacer un brindis― Luciano comienza a sudar. No se ve nada bien y por un momento pienso en interrumpir esto y preguntarle, pero sigo adelante.
Mis prometidos me miran atentos. Damián tiene listo el anillo para volvérmelo a poner una vez todo esté revelado.
―Bueno... como todos ustedes saben, nuestro amor ha enfrentado muchísimos desafíos y obstáculos a lo largo del tiempo. Algunos podrían no comprender completamente nuestra relación, y eso está bien. Lo importante es que nosotros si entendemos este amor y esta conexión que compartimos.
Hago una pequeña pausa. La cara de casi todos es de confusión, la intriga los invade.
―Hoy, con bastante alegría y con una pizca de valentía― me rio de los nervios y Rebe imita mi acción, no dejándome sola― estamos comprometiéndonos a seguir construyendo un futuro juntos. Este compromiso no solo representa nuestro gran amor, sino toda nuestra determinación. Tenemos muy claro que todo esto desafía a las normas, pero sinceramente no nos importa. Así que levantemos esas copas en honor a este amor, a este amor sin límites.
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Secreto prohibido
RomansaAmara Brown siempre ha creído o bueno, se ha tratado de convencer de que su vida es perfecta. A sus 20 años, lo único que piensa es en terminar su carrera universitaria y seguir en su burbuja de: "Tengo una vida perfecta". Pero... ¡Oh sorpresa! Amar...