Amara
―Bien― Damian carraspea mientras deja su vaso en la mesita― Ya todos sabemos lo que sucedió aquí. Todo el rollo de que Amara estaba traficando droga para mí, pero la escoria esa se las ingenio para robarme esa mercancía.
―Adonis jamás será tan poderoso como tú― Dalila cambia su comportamiento... espera, ¿le está coqueteando?
¿Por qué me molesta eso?
―No te pedí tu opinión― Damian ni la mira mientras sigue hablando. La expresión de ella es para tomarle una foto y mandarla a enmarcar― Soy un hombre se podría decir... piadoso (cuando lo deseo)
― ¿Esto es muy gracioso para ti?― Centra su atención completamente en mí― ¿Qué buscas? ¿Diversión? Porque no es muy ameno para mí andar por la calle sin saber si me van a asesinar los hombres de Adonis, o peor, raptar y torturar. Así que te lo pregunto nuevamente Damian Dimitriou: ¿qué es lo que quieres? ¿No salde ya la deuda que tenía con toda la maldita información que te di de Adonis?
―Amara...
―No, Dalila. No me vengas a callar. Si tienes algo interesante que aportar e importante, espera tu jodido turno.
Damian ríe ante la situación. ¿Qué le gusta a este hombre? ¿Que me salga de mis estribos?
―Es simple Amara. Para iniciar: ¿de verdad crees que Adonis no te buscara hasta en la otra punta del mundo? ¿Crees que si te vas a Los Ángeles con tus hermanos todo estará bien? Pues no, dejame decirte que estás muy equivocada. Estarán peor, porque van a estar sin protección, protección que les puedo brindar yo.
― ¿A cambio de que?― Esta vez pregunta mi mellizo.
―De que trabajen para mi― se estira un poco en su silla.
― ¿Te volviste loco?― Me le rio en su cara, sarcásticamente― Oh sí, salí de donde la bestia porque muero por trabajar en tu organización. Claro, como mi sueño de toda la vida ha sido convertirme en una señorita de la mafia o algo así.
―No estoy contando ningún chiste como para que te rías, Amara. Hablo enserio, muy enserio― Su expresión cambia. Me asusta pero... ¿Me gusta?
―Esto no es lo que planee para mi vida Damian― le aseguro.
Miro a mi hermano, esperando que rechace la loca idea de inmediato, pero... él solo está pensativo. Mira a la nada mientras mueve su pierna ligeramente.
―Pero es tu destino, Amara. No te estoy pidiendo nada del otro mundo― dice, como si no tuviera importancia.
Miro la expresión de Sonny, está perpleja.
―Yo solo quería darle apoyo moral a mi amiga― murmura más para ella que para nosotros.
―Te follas a Agata― ahora la mira a ella― quien es... como yo. ¿Crees que te dejará ir así de fácil? No se engancha así casi con nadie.
― ¿Te ha hablado de mí?― Pregunta con interés.
― ¡Sonny!― La reprendo.
― ¿Qué? Es un poco reservada, ¿sabes? Debería trabajar en sus emociones.
― ¿Quién debería trabajar en sus emociones?
―Oh, hola Agata...
― ¿Qué sucedió con Regina?― Pregunta Damian en cuanto ella llega.
―Digamos que la obligue a irse un poco lejos de aquí. Supongo que los guardias la retendrán un poco pero después ella lo aceptara y se irá de compras, como siempre― Toma asiento al lado de Sonny― ¿De que estamos hablando?― Cambia el tema.
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Secreto prohibido
RomanceAmara Brown siempre ha creído o bueno, se ha tratado de convencer de que su vida es perfecta. A sus 20 años, lo único que piensa es en terminar su carrera universitaria y seguir en su burbuja de: "Tengo una vida perfecta". Pero... ¡Oh sorpresa! Amar...