Capítulo 45.- Enfrentando a la Lluvia.

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Al fin llegó el día, la plataforma no me lo estaba permitiendo, por eso apenas hoy pude publicar. Disculpen, sé que valdrá la pena esta espera que a mí también me tiene con los pelos de punta. Sean todos bienvenidos a la última parte del tenso POV de Jordan y todo lo que esconde. Se los dedico a ustedes.

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Todas las canciones de la historia están en Spotify, en una lista llamada: Si tú me amaras The love Story.

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"Sin lluvia, nada crecería. Aprende a amar las tormentas de tu vida"

Anónimo.

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Solo a modo de entrar en la última parte de este particular punto de vista, una canción que anuncia el fin. ¿De qué? No pares de leer y así lo descubras y te sorprendas como nunca. Programa, In The End, de la banda californiana, Linkin Park.

[Algún tiempo después]

Jordan

Lleno de frustración y muy confundido, entré a casa y cerré la puerta tras de mí. Cuando ingresé a la sala quedé petrificado. Incluso retrocedí un paso al ver a las tres en su nueva versión inquisidora, y si mencionaba eso, era porque a juzgar por la expresión en el semblante de mi hermana menor, solo Marina parecía estar de mi lado.

Hasta Harper negaba con la cabeza cuando me atravesó con los ojos. Tragué saliva y mi vista se perdió en la nada. No podía mirarlas a la cara después de lo que me atreví a hacer en su presencia ¡Carajo!

----Por fin regresaste, hijo---saludó sarcástica---¿Qué tal te fue?
----Del asco, madre, ¿qué esperabas? ---solté con osadía.
----¿Cómo te atreves a responder así? ---más que enfadada me reprendió sin perder un segundo.
----Lo lamento, pero es verdad---Gesticulé con las manos---¿Qué otra cosa podría decir?
----Algo que logre justificar tu conducta fuera de lugar, por ejemplo---expresó incisiva.
----Jacinda, por favor no me regañes como si fuera un niño---Repasé mi cara con las manos.
----¡Pero si así es como te comportas! Una reprimenda es lo mínimo que mereces.
----Tú te lo buscaste, idiota.
----¡No intervengas, Lacy! ---Ladré furioso.
----¡Claro que sí! Esta también es mi casa.
----Por desgracia debo compartir el techo contigo.
----¡Lárgate! Y así nos harás un gran favor a todos.
----Hijos, se están exaltando. Entren en razón---mamá trató de frenar todo.
----No le digas eso, Lacy. No eches a mi hermano.
----¡Cállate, Harper!
----¡No te atrevas a hablarle así! ---le grité al oír como se dirigía a mi hermanita.
----Entonces que no se meta.
----Chicos, contrólense---nos advirtió mi madre en medio de una tensa calma.
----¡Bruja, amargada!
----¡Imbécil, bueno para nada!
----¡Cierra la boca, mocosa!
----Mira quién lo dice.
----Muchachos, ya dejen eso---nos pidió mamá por tercera vez, ambos la ignoramos.
----No te inmiscuyas, esta charla es con nuestra madre, cuando solicitemos a una pendeja igual a ti, te llamaremos.
----Prefiero eso a ser una cornuda---Con los dedos, hizo una figura sobre su mollera.
----¡Por el amor de Dios! ---mamá se agarró la cabeza.
----¡Búscate un novio y jódele la vida a él!
----Eres un ... 
----¡YA PAREN DE PELEAR! 
Nos exigió al levantarse del sofá con la ayuda de Harper. Los dos nos callamos en el acto.
----No soporto que se peleen así. Debería darles vergüenza. 
Ambos la miramos con las mejillas ardiendo.
----No estamos en una barraca, compórtense.
----Lo siento, ma.
Se disculpó mi hermana, yo me mantuve aferrado al orgullo. Entonces hallé mi voz.
----Aún siguen aquí.
----Desde luego. De hecho; te estábamos esperando---respondió Jacinda un poco más tranquila.
----¿Y eso, para qué? ---Descansé el peso del cuerpo en una de mis piernas.
----Como que para qué, debemos hablar de lo que sucedió aquí esta tarde.
----Ok, ahora iré a mi cuarto. No estoy de humor para eso, quizás después, y solos, tú y yo. Con su permiso---Intenté caminar, mi madre me paralizó con un grito.
----¡Espérate ahí, Jordan!
----¡Rayos! ---mascullé mientras lo hacía. Las rodillas me temblaban a causa de la adrenalina.
----De mí no vas a escapar por la primera salida de incendios.
----Mamá, no quiero hablar de esto---gimoteé muy fastidiado---Ahora no.
----Pues, tendrás que oírme aunque no quieras. Así es como se arreglan las cosas en mi casa.
----No es necesario que menciones eso.
----De aquí no te mueves hasta que aclaremos todo.
----Ok, Jacinda---Me puse frente a ella de manos en cadera--- Te escucho.
----¿Qué es lo que acabas de hacer?
----¿Hablas de la discusión con Lacy? Ya la oíste, me odia.
----No me tomes el pelo, mocoso. Y responde lo que te pregunté---me exigió mientras apretaba los dientes.
----Cometer un error, meter la pata---Puse ambas palmas en mi frente y me di de golpes con ellas---No lo sé, Ma.
----¿"No lo sabes"? ¿Y quién si no?
----Qué fastidio---Me restregué los ojos de manera brusca---En serio.
----No me hables como si se tratara de uno de tus amigos ¡Ten algo de respeto!
----Lo siento, madre. No fue mi intención---susurré igual que a los cinco años.
----Esto es el colmo, Jordan. Nunca pensé que llegaría este día---Negó con la cabeza sin quitarme sus furiosos ojos de encima.
----¿Cuál?
----En que te vería actuar igual que un patán.
----Ma, lo siento... Yo...---traté de suavizarla, me interrumpió de manera enérgica.
----¡Fuiste injusto y cruel!, ¿acaso eso fue lo que te enseñé?
----No, pero en mi defensa, yo no lo sabía. Te juro que ni en sueños imaginé que algo así podría suceder.
----Esa es una respuesta vacía, inconsistente y estúpida. Viniendo de ti parece un insulto---espetó furiosa.
----Estás en lo cierto---Agaché la cabeza---Pero no sé qué más decir.
----Que pedirás perdón, eso quiero oír.
----Eso nunca, primero muerto---Alcé la cara y negué una y otra vez---Ya me conoces.
----Por lo mismo, estoy tan decepcionada de ti---murmuró y yo me quería enterrar.
----Mamá, no digas eso; me duele---gimoteé al volver los ojos hacia ella.
----Eso es para que en parte sepas lo que me ha causado tu actitud.
----Jacinda, comprende que...---Traté de hablar, pero me hizo callar de un grito que nos sobresaltó a todos; tan fuerte que retumbó en las paredes.
----¡Basta! No quiero oírte más.
----Lo siento---musité sin hallar dónde meterme.
----Si no estás dispuesto a asumir lo mal que te comportaste. No tenemos nada más de que hablar.
----Ma, no seas tan dura con él, está consciente de que cometió un error.
----No lo defiendas Marina, que se haga cargo de sus pachotadas. Tu hermano mayor es un hombre adulto que sabe perfectamente administrar sus errores igual que las consecuencias de ellos.
----Madre, solo quiero que te calmes. Podrías descompensarte.
----Estoy bien, hija, descuida.
----Pero mamá...
----¿Qué no lo viste hace un rato? Tu hermanito se comportó como todo un "Caballero"

Si Tú Me AmarasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora