REFLECTORES EN EL HIELO.

Capitulo 41

Cuando las puertas se abrieron ahí estaba Enzo , me sonrió fue un camino bastante corto en el salón bien decorado con flores blancas y una alfombra de color rojo, Enzo estiró su mano a mi y yo la tomé.

-¿Listo mi amor?.- Sonrió.

-Listo, cómo nunca.-Enzo tenía un traje color negro bastante normal a comparación del mío, pero se veía muy guapo.

-Bienvenidos hoy a esta unión.-Dijo el abogado.-En dónde se firmara.-Saco de su carpeta los papeles.-El certificado que los acreditará como esposos.-Nos miró.-  Así qué ya pueden decir sus palabras.-Nos señaló.

-Bueno, Mati.-Enzo me sostuvo las manos.- Quiero decirte pequeño que llegaste a mi vida en el momento menos esperado y sin saberlo también llegaste a mi vida en el momento correcto, a revolucionarlo todo por que como te lo dije en algún momento jamás pensé que un niño tan lindo podría llegar a ser parte de mi vida, se que en el momento use otras palabras pero en el fondo fue eso lo que quise decir, y ahora estoy feliz de poder unir mi vida a tu lado y formar una familia junto a ti.- Suspiró.- Cada paso que damos me asusta igual o peor que a ti, tengo miedo de fallarte, de fallarles.- coloco lentamente su mano en mi vientre.-Pero aún con todos esos temores estoy seguro de qué te amo y te amaré hasta el último día de mi vida, hasta mis últimos pasos en está tierra.-Me dió un beso en la mejilla.

-Enzo, creó que no tengo palabras ensayadas o planeadas.-Hable.-Para expresar lo agradecido qué estoy al poder tenerte en mi vida, vos le das a este mundo Miles de colores, sos la persona más importante del mundo para mí, y estoy feliz y muy asustado también de saber qué formaré una familia junto a alguien que jamás imaginé tener, de hecho el amor jamás estuvo en mis planes hasta que te conocí y todo fue diferente, Te amo alfa, te amo hoy, te amare mañana y prometo amarte el resto de mi vida como si fuera el primero a tu lado.- Mis manos que aún me temblaban acariciaron su cabello.

-Con estás palabras y sentimientos les deseamos una vida llena de felicidad.-El abogado nos entrego un esfero .-Enzo Vogrincic tú aceptas a Matías Recalt cómo tu esposo.-Le preguntó.

-Acepto.-El abogado le señaló para qué firmara.

- Matías tu aceptas a Enzo cómo tú esposó.- Asentí.

-Acepto, claro qué si.-Firme y Enzo tomo nuevamente mis manos.

-Entonces está hecho, que lo que se ha unido hoy perdure para siempre.-Todos aplaudieron, Enzo me dió el segundo anillo que va sobre el de compromiso, la argolla de matrimonio que habíamos elegido eran en oro rosado y amarillo, se veía tan lindo que ahora compartamos anillos.-Pueden besarse vamos.-Dijo el.

Enzo puso sus manos en mis mejillas y levemente se acercó a mi hasta besarme de forma romántica, cuando se separó y me miró se acercó a mi oído.-Te he dicho lo malditamente sexy que te ves con ese traje.

-Gracias amor.-Bese su mejilla.-Puedes esperar hasta la tarde para quitarmelo verdad.-Enzo asintió.

Las felicitaciones y la comida fueron de ensueño.-Enzo gracias por traer a mi hermano aquí.

-Jure hacerte feliz, eso es lo que hago señor  Vogrincic.-Me reí ante el uso de su apellido para mí, ahora era literalmente así, yo pertenecía a la familia Vogrincic.

Todos estaban conversando y en la fiesta familiar y Enzo se acercó dónde mi.- Omega creó qué es hora qué nos separemos de todos y subamos a la habitación.-Susurro.-Ademas es costumbre el honrar la noche de bodas.

-Vamos entonces.-Tome su mano y Enzo paso susurrándole algo a Camí en el oído y ella asintió.

Subimos las escaleras y entramos a la habitación.