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-. No.

La respuesta seria y fuerte de su padre le erizó la piel.

-. Pero padre, tengo que reunirme con él el miércoles a las 5 y el sábado para poder terminar...

El fuerte ruido de una cachetada resonó por la sala, impidiendo que Sasuke siguiera hablando.

-. ¿No es suficiente el tiempo que pasas fuera de la casa?.- frunció el ceño con enfado -. Tú puedes hacer ese trabajo sólo.

-. P-pero padre.- sostuvo su mejilla -. En verdad tengo que reunirme con él, sino lo hago bajaran mi calificación.

Fugaku lo pensó durante unos minutos.

-. De acuerdo, puedes reunirte con él.

Sasuke sonrió con alivio.

-. Pero te quiero aquí a las 7, si llegas un minuto tarde tendrás que atenerte a las consecuencias.- se acercó al rostro de su hijo y lo tomó con fuerza de las mejillas -. No te tomes muchas libertades, Sasuke.

Lo soltó y fue a su habitación, donde su esposa lo esperaba.

Los pasillos se encontraban solos, los alumnos estaban en sus aulas y los maestros impartían sus clases

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Los pasillos se encontraban solos, los alumnos estaban en sus aulas y los maestros impartían sus clases.

Sasuke hacía anotaciones cuando su celular comenzó a vibrar en su bolsillo, se extrañó por ello, pero decidió ignorarlo; no quería que el maestro le llamara la atención por usarlo en clases.

Al terminar la clase, se dispuso a guardar sus cosas, era hora del descanso y tenía hambre.

Sacó su celular para verificar las notificaciones, pero antes de poder revisarlas sintió un leve empujón.

-. Lo siento.- se disculpó Shino, quien iba dando vuelta en un pasillo hacia el salón.

-. Descuida, iba distraído.- Sasuke hizo una pequeña reverencia y se dispuso a seguir su camino.

-. ¿Iras a la cafetería?

Sasuke asintió a la pregunta mientras guardaba su celular.

-. ¿Puedo acompañarte?

-. ¿No están esperándote?.- Sasuke señaló al grupo que encontraba al frente del salón.

-. No, tenía pensado comer a parte.- se encogió de hombros y se acercó al contrario.

Ambos comenzaron a caminar en silencio.

-. Desde hace unos días quería preguntarte como seguías, pero no habia tenido la oportunidad de acercarme.- Shino rompió el silencio -. Por el incidente que tuviste con unos chicos.- aclaró.

-. No fue nada grave.- respondió luego de unos segundos -. Así que estoy bien.

-. Me alegra.

Ambos llegaron a la cafetería y pidieron su almuerzo, cuando se los entregaron se dirigieron al patio delantero de la institución.

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