No te has topado con este archivo de pura casualidad, fuiste elegido, bendecido por el Omnissiah, eres uno de los muchos que vendrán, conocerás los secretos de este universo, las múltiples creencias y costumbres, una cantidad infinita de razas.
Cono...
"Estaba tirado en el suelo, con un Hormagante preparado para destriparlo con sus garras en forma de guadañas, y sus compañeros de nido, alineándose para trocear lo que quedase."
—Ciaphas Cain. Comisario Imperial
Los Hormagantes son temibles, pero prescindibles Tiránidos, que son empleados a miles de millones y, a menudo, preceden al ataque tiránido principal. Se trata de una subespecie del género gante armada con afiladas garras y guadañas que se desplaza sobre poderosas patas traseras de una forma extremadamente rápida, como deslizándose, de modo similar al paso de los insectos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hormagante
Descripción
Antes del ataque principal de la Flota Enjambre, los hormagantes desembarcan mediante esporas micéticas en cantidades tan grandes que, aunque muchos son destruidos por las defensas orbitales, los que logren desembarcar representarán un serio problema para los habitantes.
La única idea que mueve al hormagante es llegar hasta su enemigo y destriparlo con sus garras con forma de guadaña. Son muy rápidos e infatigables y, desde lejos, parecen solamente un grupo de garras y exoesqueletos protuberantes. Aunque esta bioforma parece una alteración del género gante, adopta una posición más erecta y sus dos primeros pares de patas acaban en garras muy desarrolladas y afiladas. Las patas traseras del hormagante son largas y potentes y pueden plegarlas bajo su cuerpo cuando está descansando, una posición desde la que podrá propulsarse rápidamente en caso de peligro.
Los hormagantes tienen una capacidad instintiva para cazar de modo que no necesitan demasiada dirección por parte de la mente colmena. Tienen tan sólo el propósito de la caza y no harán caso de lesiones personales ni del cansancio hasta que hayan acabado con su presa. Entonces, el hormagante se alimenta de su víctima, arrancando pedazos de carne con los dientes, además de con las garras. Sin embargo, su extremadamente rápido metabolismo siempre los llevarán a la búsqueda permanente de nuevas víctimas. Por lo general son abandonados a su suerte una vez que un ataque tiránido está en marcha, aunque a veces la Mente Enjambre interviene y los dirige hacia un objetivo más importante.
Los Hormagantes a menudo son arrojados a un mundo presa en esporas micéticas (explicado en el siguiente capítulo). No importa si la mayoría de esporas micéticas son destruidas por emplazamientos de defensa orbital incluso antes de que aterricen en el planeta, ya que si una sola espora de hormagantes llega a la superficie puede convertirse rápidamente en un problema serio para los defensores del mundo presa. Desde el momento en que han aterrizado, los hormagantes recorren el paisaje en manadas de pesadilla, buscando y atacando constantemente a las formas de vida nativas.
A diferencia de otras criaturas tiránidas, los hormagantes tienen la capacidad de poner cientos de huevos en el terreno y así reproducirse independientemente de la flota enjambre. Cada Hormagante tiene una vida corta pero una vez que una generación ha muerto, una nueva ya ha salido del cascarón y crece hasta la madurez; lista para devastar el mundo que la generación anterior había dejado atrás. Para cuando llega la mayor parte de la flota enjambre, los defensores ya están a la defensiva, atrapados detrás de las murallas de la fortaleza mientras un mar retorcido de hormagantes hace estragos en todo el planeta.
Evolución Mejorada
Los hormagantes tienen una gran capacidad de adaptación. Algunas variaciones conocidas incluyen:
Aumento de la fuerza.
Aumento de la velocidad de reacción.
Caparazón más grueso.
Glándulas de adrenalina.
Fuentes
Codex: Tiránidos (Ediciones 3ª, 4ª, 5ª y 8ª).
Fight or Flight. Relato corto de Ciaphas Cain, por el autor Sandy Mitchell.