Don't blame

XVI. Culpa

A medida que los meses pasaban, SeokJin observaba con pesar cómo su hermano Namjoon se sumía cada vez más en la tristeza y la melancolía por la pérdida de Jackson. A pesar de sus mejores esfuerzos por ofrecerle apoyo y consuelo, Namjoon parecía cada vez más distante y ensimismado, atrapado en una espiral de dolor y nostalgia que amenazaba con consumirlo por completo.

Para SeokJin, la preocupación por su hermano se sumaba a la carga de trabajo que se multiplicaba día a día. La muerte de Jackson había dejado un vacío enorme en la familia, y la responsabilidad de manejar las consecuencias de su partida recaía en los hombros de SeokJin. A pesar de contar con la ayuda incondicional de Jungkook, el trabajo seguía siendo abrumador, con cada día trayendo consigo nuevas demandas y desafíos que debían enfrentar.

Cada intento de SeokJin por mantenerse al tanto de Namjoon y ofrecerle apoyo era obstaculizado por la abrumadora carga de responsabilidades que debía enfrentar. Aunque deseaba estar allí para su hermano en su momento de necesidad, la realidad de su situación laboral lo mantenía ocupado y alejado, dejándolo con una sensación de impotencia y frustración.

Con el tiempo, la tensión y el estrés comenzaron a pasar factura a SeokJin, dejándolo agotado y abrumado por la magnitud de sus responsabilidades. Aunque intentaba mantenerse firme y enfocado en su trabajo, la presión constante estaba comenzando a pasar factura a su salud y bienestar emocional.

-¿Llegó más trabajo?-, pregunto al ver a Jungkook con más carpetas en las manos.

-Si-, dijo con un mohin en los labios.

Desde que había pasado la muerte de Jackson, SeokJin no hacia nada más que trabajar sin descansar y ya no había tiempo para citas.

-Bien, pásame lo más importante primero.

A pesar de todo, SeokJin se aferraba a la esperanza de que algún día las cosas mejorarían. Con la ayuda de Jungkook y su determinación inquebrantable, estaba decidido a superar los desafíos que se le presentaban y encontrar una manera de ayudar a su hermano a encontrar la paz y la sanación que tanto necesitaba.

[...]

Al llegar exhausto después de otro agotador día de trabajo, SeokJin se encontró con una escena que lo dejó atónito y sin aliento. Tenía planeado leer el nuevo libro que le había regalado Jungkook en la semana y que había comenzando en el auto. Cuando noto un auto familiar que estaba estacionado frente a la entrada de la mansión, y al llegar a la sala, SeokJin se acercó y vio a Jackson parado junto a Namjoon. La sorpresa inicial al ver a alguien que se suponía que estaba muerto fue abrumada por la incredulidad al presenciar la violenta escena que se desarrollaba frente a él.

Su padre, estaba furioso y fuera de sí, golpeando a Jackson con una ferocidad que hizo que SeokJin contuviera el aliento. La visión de su padre descargando su ira sobre Jackson era impactante y perturbadora, especialmente considerando que Jackson se suponía que había muerto hacía meses.

SeokJin se quedó paralizado por un momento, incapaz de procesar completamente lo que estaba viendo. ¿Cómo era posible que Jackson estuviera vivo y de pie frente a él después de todo este tiempo?

Mientras observaba la escena, una mezcla de emociones turbulentas lo invadió. La confusión, el shock y la preocupación se entrelazaban en su mente, creando un torbellino de pensamientos y sentimientos. SeokJin no sabía qué hacer ni qué decir. Se sentía atrapado en medio de una situación que estaba fuera de su comprensión y control. Al avanzar pudo entender el contexto de la situación, el porque si padre golpeaba a Jackson y porque este se dejaba golpear cuando claramente de un solo golpe podría acabar fácil con Soo Hyun.

Con el corazón latiendo con fuerza en su pecho, SeokJin finalmente reunió el coraje para acercarse y tratar de calmar las cosas.

-¡Alto!

Con una sola mirada, detuvo la violencia en seco, su voz tranquila y firme rompiendo el silencio mientras se dirigía a Soo Hyun con una autoridad indiscutible.

La presencia de Seokjin era como un bálsamo para la ira de Soo Hyun, sus palabras resonando en el aire con una fuerza que era imposible de ignorar.

-¿Somos animales?-, SeokJin soltó el libro entre sus manos.-Tú-, señalo a Jackson. -Venir hasta aquí para buscar tu propia muerte, ¿Acaso perdiste la cordura? Venir aquí no remediara lo que tu tío hizo. Qué mueras no remediara mi dolor-, el castaño miro a su padre con un dolor en los ojos.- Papá, ¿En serio pensabas matar al esposo de tu hijo, el padre de tus nietos?

- Lo que pasó. Necesitaba que alguien pagar alo que te hizo....

-Papá, no estuviste cuando paso y por eso buscas apagar la culpa haciendo esa casería. No necesito tu ayuda para aliviar mi dolor, cuando te necesite no me creíste. No finjas ser un héroe cuando no lo eres.

Con un suspiro resignado, Soo Hyun se detuvo, su cuerpo temblando con el esfuerzo de contener su furia mientras luchaba por controlar sus emociones.

En medio del silencio que siguió, Jackson se acercó a Soo Hyun con una mirada seria en sus ojos, su voz llena de determinación mientras hablaba con él.

-Entiendo por lo que pasas. Soy padre y mis hijos son lo más preciado en mi vida. Si algo les pasará acabaría con el mundo yo mismo-, Jackson tomo la mano de Nam.-Bo hyuk fue un miserable, fue su culpa lo que pasó y nuestra familia cargará con eso por incubrirlo, pero el no haberle creído a tú hijo cuando te contó es tu culpa

Aunque las palabras eran duras, también estaban llenas de comprensión, una oferta de paz en medio del caos que los rodeaba.

Con el corazón lleno de gratitud, Namjoon se acercó a Seokjin, su expresión llena de alivio y gratitud mientras lo abrazaba con fuerza. En ese momento, sabía que aunque el camino por delante sería difícil, mientras estuvieran juntos, podrían superar cualquier desafío que se interpusiera en su camino. Y con esa certeza reconfortante en su corazón, se prepararon para enfrentar el futuro, unidos en su determinación de encontrar la justicia y la paz que tanto anhelaban.