Felipe
— Jaime del Burgo ... Sentí un profundo asco al tener aquel hombre en frente de mi. El que mas daño a causado a mi familia. Su único propósito era llenarse los bolsillos de dinero, una persona sin escrúpulos y carente de cualquier sentimiento de bondad. Es un ser ruin y despreciable.
— ¿Como va todo? ¿La familia? ¿Estas atendiendo bien a mi mujer? ... Tuve el impulso de golpearlo, inclusive de matarlo en ese preciso momento, pero eso era lo que el quería, me estaba provocando para tener justamente esa reacción de mi. No le iba a dar el gusto. Me reí ante su comentario de "mi mujer".
— ¿Como llegaste hasta aquí? ... No podía decir nada ofensivo o amenazarlo con matarlo, este tipo, probablemente me estará gravando, tal vez sea paranoia pero no me iba a arriesgar.
— Aun conservo buenos amigos en Madrid... Se levanto de mi silla, se tambaleaba como si estuviera borracho, no esta en sis cinco sentidos.
— ¿Que es lo que quieres? ¿Dinero? ... Comenzó a reír como si estuviera desquiciado
— Hay Felipe, como se ve que tu vida siempre ha sido el dinero, hay muchas cosas que no puedes arreglar con tu maldito dinero.
— Esto que estas haciendo lo haces por dinero, aunque nadie crea una sola de tus palabras
— Te asombrarías la cantidad de personas que están en tu contra, y esto lo hago por venganza porque no sabes cuanto te odio ... No tenia que decirlo, su mirada delataba ese sentimiento lleno de rabia y rencor.
— Es mucho mas la gente buena y razonable que nos apoya y quiere. Saben que la monarquía ... Me interrumpió de golpe
— Dejate de tonterías Felipe, no comiences con uno de tus vacíos y aburridos discursos que nadie cree. Sabes cuando yo era un niño, soñaba con tener una vida perfecta, tenia todo para ser un brillante político, mi padre fue un gran ejemplo para mi. Pero las oportunidades al parecer no son para todas las personas. No todos nacemos para ser reyes. ¿Dime que dificultad has tenido tu a lo largo de la vida? Problemas difíciles, no solo el no saber que corbata usar.
— Los demás no tenemos la culpa de tus frustraciones o fracasos, eres lo que cosechas y por eso estas donde estas.
— Eres un imbécil, siempre lo has sido. Te falta mucho para ser un verdadero rey, pero sobre todo te falta mucho para ser un verdadero hombre.
— La opinión que tu puedes ejercer sobre mi persona o mi trabajo, me tiene sin cuidado. Es claro que necesitas ayuda psiquiátrica
— Yo no necesito ayuda de nadie. Lo único que quiero es acabar contigo y tu familia
— Y por eso decidiste inventar todas esas mentiras, fingir que esto lo haces por mi padre cuando tus intensiones también son acabar con él
— Tu padre se hundió solo, no puede robarle a España y fingir que no paso nada, no puede ir por la vida matando animalitos indefensos y mucho menos ir cosechando amantes y pretender que los Españoles también las mantengan, ya con tu madre era suficiente. Y con Letizia, esa maldita mujer. Siempre me provoco, sabia que me moría por ella y aun así me quiso como amigo para restregarme en la cara su felicidad, me provocaba con ese maldito encanto, siempre me ha provocado y no puedes provocar a alguien y luego simplemente arrogarte de su vida, como si fueras basura que ya no sirve... Camino como pudo a la mesa donde se encontraban las bebidas, se sirvió un coñac y tomo de un solo sorbo. No esta bien.
— Y eso te llevo a decir un montón de mentiras sobre ella
— Ella iba a ser mi mujer Felipe, desde que la vi en televisión supe que tenia que ser mía, hice todo para conocerla y así lo hice. Yo lo estaba logrando, pero tenias que aparecer tu. No te bastaba simplemente casarte con una mujer de tu misma clase. No tenias que ir a poner los ojos donde no debías.
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El Día Que Decidí Amarte (Terminada)
FanfictionEstá historia es un fanfic , todo es inventado