Hubo muchas ocasiones en las que las palabras no salieron de su garganta.
¿Por qué no me preguntas sobre mí como antes?
¿Por qué no pasas tanto tiempo conmigo como antes?
Todo eran cosas presuntuosas.
«Mierda...»
Kaylo pasó bruscamente una mano por su cabello y cerró los ojos.
Solo él perdería si caía en una tonta ilusión. Después de todo, ¿no tiene él su propio propósito? Debía tener éxito de alguna manera y vengarse del Vizconde Gray.
Desde niño sobrevivió persistentemente, esperando solo poder vengarse.
Sin embargo, debido a la Princesa Agnes, el propósito estaba siendo olvidado. Incluso ahora, las palabras de Raymond Spencer influyeron mucho.
Kaylo sabía que no debía ilusionarse, como le había advertido Raymond, pero sus ojos miraban persistentemente más allá de la gruesa puerta.
Sentía náuseas, como si le hubieran cortado el corazón.
La sangre corrió hasta el punto en que mis ojos estaban inyectados en sangre y los músculos de su mandíbula cerrada se contrajeron.
Mientras imaginaba a las dos personas frente a frente, apreté los puños.
Quería abrir esa puerta ahora mismo y sacar a Raymond Spencer.
Y después de eso...
Después...
... ¿Qué deseaba hacer realmente?
Las personas de la alta sociedad estaban muy entusiasmadas con el Baile de Otoño.
Como era el evento más importante tras el Festival de la Fundación Nacional, los grandes nobles que habían estado en sus territorios se reunieron en la capital.
Entre ellos se encontraba el Duque de Salton, que había heredado el título hacía unos meses y estaba muy ocupado.
Con la llegada de nuevos vientos, la atención de la gente se centró en el nuevo posible prometido de la Princesa Agnes. Excluyendo a Raymond Spencer, el candidato más probable era el Duque de Salton.
El Ducado de Salton era una familia prestigiosa y leal al Imperio.
También fue la familia la que descubrió por primera vez las habilidades de la Santa y la apoyó.
~En la residencia capital de la familia Salton~
El Duque de Salton, que acababa de llegar a la capital desde su territorio, se dirigió directamente a la mansión.
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La Princesa otaku trabaja duro hoy
RomanceReencarnada en una novela donde su personaje favorito respira y vive. Se decía era la más bella del continente, la joya más preciada por el Emperador, la reina de los círculos sociales... La bomba de tiempo de Winchester. ¡Se convirtió en la Princes...