Las cejas de Agnes se arquearon ante esas palabras.
«¿Raymond Spencer? ¡No, ya les dije que no me gusta ese tipo...!»
En la mente de la gente, todavía parecía ser un fan de Raymond Spencer.
«Cambiar los prejuicios no es fácil. Uf, estoy muy molesta. ¿Eh? Un momento, tal vez esto...»
Ahora había muerto en un accidente de carruaje y regresó a la vida.
Dado que fue un accidente importante que ocurrió en una calle muy transitada a plena luz del día, debía haber una gran cantidad de personas que lo presenciaron. ¡Incluso dejó de respirar y milagrosamente regresó...!
Los sirvientes y doncellas presentes aquí eran testigos. Incluso si ahora tuviera amnesia, todos lo creerían.
Por supuesto, si decía que perdió todos tus recuerdos, las cosas se complicarían demasiado. Sin embargo, para sacar provecho de la situación...
«¿Existe un momento más perfecto que este?»
Agnes pensó que ahora era su oportunidad para deshacerse por completo de su imagen de "fanática de Raymond Spencer". Tal vez a partir de este momento, no sería descabellado poder decir "Soy fan de Kaylo Gray".
Se dice que se produce un gran cambio en las personas que regresan de la muerte, entonces, ¿alguien la llamaría loca?
—Padre —dijo Agnes con los ojos brillantes.
—Sí, está bien. Agnes, hija mía... Pide lo que sea, ¡este padre tuyo te dará lo que quieras!
—¿Quién es Raymond Spencer? ¿Por qué pides que lo traigan?
—¿Eh? ¿Q-Qué?
Los presentes empezaron a mirarse entre sí ante el tono curioso de Agnes.
—¿Preguntas quién es Raymond Spencer? ¡¿No es con quien tanto sueñas casarte?! —preguntó Demian mientras le sujetaba ambos hombros a Agnes.
—¿Yo? ¿Cuándo?
Demian miró al médico de la corte con una mirada fría.
—¿No dijiste que definitivamente estaba bien?
—Bien, eso... Se lastimó la cabeza, por lo que puede tener un problema temporal.
—Creo que hay un problema con la memoria de Agnes... —dijo Demian con voz seria.
Agnes sonrió como si se preguntara de qué estaban hablando.
—Hermano, ¿qué estás diciendo? Mi memoria está bien, pero no sé quién es esa persona.
—...
Los alrededores se quedaron en silencio debido a la alegre voz de Agnes.
En medio del ambiente tranquilo, el médico rápidamente le hizo algunas preguntas a Agnes.
—Princesa, ¿recuerdas dónde está ahora?
Cuando comenzaron las preguntas, todos los ojos se deslizaron hacia Agnes.
—Sí, esta es mi habitación —respondió Agnes con confianza.
—Entonces, el nombre de la Princesa es...
—Agnes. Es un nombre precioso que me dio mi padre.
—La fecha de hoy es...
—Lo recuerdo exactamente. Es el 2 de agosto del año 332 en el Calendario Imperial. ¿Está bien? Esa era la fecha hasta esta mañana...
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La Princesa otaku trabaja duro hoy
RomanceReencarnada en una novela donde su personaje favorito respira y vive. Se decía era la más bella del continente, la joya más preciada por el Emperador, la reina de los círculos sociales... La bomba de tiempo de Winchester. ¡Se convirtió en la Princes...