🪷 Capítulo 122 🪷

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El rumor extendido fue bastante detallado y minucioso...

Kaylo se preguntaba qué pasó por la mente de Agnes al inventar semejante historia.

—¿Qué pasa si el honor de la Princesa se daña sin motivo alguno?

—... ¿Cómo puede dañarse la reputación de personas que están a punto de casarse sólo por tener una cita nocturna? —murmuró Agnes con frustración.

—...

Kaylo jugó con los dedos de Agnes, que todavía tenía en su mano.

Los dedos blancos y suaves tenían puntas rosadas, por lo que parecía que tendrían un sabor dulce si se los metiera en la boca.

Quería morder y chupar cada uno de los lindos dedos y saborearlos deliciosamente.

—Bueno, está bien si no te gusta... —dijo Agnes con calma mientras observaba a Kaylo juguetear con sus dedos.

—No dije que no me gustara.

—Entonces, ¿volverás más tarde?

—Vendré a ti sin que ni un ratón ni un pájaro lo sepan —respondió Kaylo en tono seguro.

Agnes se echó a reír desconcertada.

Kaylo miró a Agnes, que sonreía alegremente sin saber nada, y pasó saliva con dificultad.

«¿Podré soportarlo?»

Hoy en día, a menudo tenía sueños sobre Agnes.

Quería besar los ojos que lo miraban con amor, la punta de la nariz y los labios.

En lugar de besarla suavemente, quería profundizar en su boca con voracidad, como si fuera a devorarla.

Eso no fue todo.

Quería bajarle el vestido que bellamente se ajustaba a ella, acariciar los lugares que nadie podía ver y besar sus labios.

Intentó aliviar ese deseo por su cuenta, pero sin importar lo que hizo, no disminuyó.

Tenía cada vez más sed.

Aunque sabía que ya estaba recibiendo demasiado amor, su codicia estaba por las nubes.

Lo atormentaba la urgencia de un deseo distinto al de antes.


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~Esa noche~

Agnes fingió que estaba por dormir y despidió a las doncellas.

El dormitorio quedó a oscuras.

Agnes se levantó de la cama y encendió la luz de la mesita de noche. Luego, se puso la bata de seda que había colocado a un costado y salió con cuidado del dormitorio.

La Princesa otaku trabaja duro hoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora