Clave De Dio (Saga Claves)

Capítulo 16: Plan maestro

Cinco meses después de la muerte de Lucía

Estaba atardeciendo y no paraba de llover con fuerza, dos personas estaban de espaldas mirando fijamente una tumba mientras se cubrían del agua con un paraguas.

—Descansa hijo, te prometo que no se va a quedar así, te lo prometo joder... Esa.. esa familia nos ha jodido la vida. Pero tu muerte no quedará en vano Álvaro, tu hermano y yo seguimos aquí y vamos a poner fin a todo esto, vamos a cortar de un tajo el hilo que une a nuestras familias.

—Papá... ¿Álvaro llegó a conocer a Alaia?, nuestra hermana.

—Sí hijo, sí la conoció, sé que tú no tuviste la oportunidad, pero era una niña preciosa. Si no hubiese estado en aquel coche... aquel puto coche, dios... Me siento tan culpable.

—Papá tu no tuviste nada que ver, fue el padre de esa familia la que acabó con su vida.

—Ya lo sé Ricardo, pero yo le mandé a recogerla, aun así, eso nunca va a remediar mi rabia, primero por culpa de su padre tu hermana está muerta y ahora por culpa de su dichosa hija Sofía tu hermano también lo está, bajo esta tierra mojada y llena de mierda. Dios... voy a terminar con ellos aunque sea lo último que haga.

—Papá no, por favor no te metas en nada en lo que puedas llegar a salir lastimado, no quiero perderte a ti también.

—Lo sé hijo, lo sé, buscaremos una manera, no sé cuánto tardaremos pero la encontraremos, o los encontraremos.

—¿A qué te refieres?.

—A que si yo no puedo terminar con esto... tal vez alguien quiera hacerlo por nosotros, o ayudarnos a hacerlo. ¿Entiendes?, podemos tenerlos vigilados, solo necesitamos a alguien que se acerque a la vida de ellos, de sus seres queridos para que no nos estorben en el camino. Alma, ¿sabes quien es?.

—No, no tengo ni idea de quién es.

—Bien pues, es la noviecita del hijo de Marcos, hay que mantenerla alejada de él para que no se interponga en nuestro plan, cuanta más personas haya cerca de ellos más complicado se nos hará acabar con ellos.

—¿Y qué propones?.

—Propongo que debemos buscar una distracción, algo que haga que Alma no esté tan atenta a ese mediocre.

—¿Y Sofía?.

—Sofía no va a suponer un problema, con la muerte de Lucía está destruyéndose a sí misma la estúpida, se distanciará de su hermano y se quedará sola así que podéis encargarnos de ella sin problema. Además, tenemos esto, Ricardo, con esto es más que suficiente para terminar con todos ellos. —dijo mostrando un móvil que había sacado de su bolsillo.

—¿Un móvil? ¿de qué nos va a servir un móvil?.

—Lo importante es de quién es, hijo.

—¿Y de quién es?.

—De Lucía, aquí dentro, Ricardo, están todos nuestros enemigos.

—Papá...

—¿Sí?.

—Nada, perdón.

Ricardo y Alvin se quedaron mirando fijamente al horizonte, observando la tumba de Álvaro.

23 de Noviembre de 2022, Madrid España.

—¿Así que le encantó la sorpresa?.

—¡Sí!, no veas como se puso, me hacía cada sonrisa... ojalá y podamos volver a estar como antes, la verdad que no sé cómo lo pude dejar escapar, me convencí de que no le quería cuando realmente me tiene loca. —fantaseaba Laura mientras le explicaba a Paula la sorpresa que le había dado a Bruno.