|Mad||h.s|

Procesando...

- ¿Harry?.

No hubo respuesta.

-¡¿Harry?!.- intensifique mi llamado, me encontraba organizando un poco la casa, ya que ayer pasó un ciclon y hizo un caoz, literal.

Baje las escaleras para ir a la cocina, cuando me encuentro a la bella durmiente en el sofa; Habia utilizado una de las mantas que le habia pedido que doblara como sabana para arroparse, es un idiota.

- Harry...- Lo sarandee un poco,-¡Harry!.

-¡Yo no fui!..¡Ah!.- Se levantó dando un brinco, luego de rascarse los ojos se dió cuenta de mi cara de enfado.

- Te pido un simple favor y no lo haces.

- Pero...

- ¿Que tan dificil es doblar una manta?.- iba a decir algo pero lo corté.- uh si, estoy cansado y como no se doblar mantas mejor me duermo.- de nuevo iba a decir algo.- ¡yo tambien estoy cansada,¿y,que hago?.

- lo haces porque eres demasiado terca...Te dije que mañana vendria mi ama de llaves y,¿que hiciste?, me ignoraste.

- Yo no entiendo como puedes estar tanto tiempo en el desorden.

- Quizas porque soy hombre.- dijo antes de volverse a acomodar en el sofa.

- ¿Pusiste a lavar la ropa que te dije?.- El asintió, antes de volver a acostarse.

- Otra cosa,¿Has visto a copito?, es hora de su comida.- Pregunté preocupada, no habia sentido sus pisadas en un buen rato.

- Recuerdo haberlo visto jugando en el...- Se levantó de un salto y se dirigió al cesto vacio que estaba al lado de las escaleras.- cesto de ropa.

Ambos nos quedamos viendo por unos segundos antes de que los dos reaccionáramos y bajaramos al cuarto del lavado corriendo, el corazon me latia muy rapido, no podia dejar de pensar en la pequeña criatura que debe estar en la lavadora. Dios mio.

Al llegar encontramos a la maquina en su completo furor, Dios mío. Corrí hacia ella y presioné rápidamente el botón de apagado, harry se acercó a esta y con sumo cuidado busco entre la ropa mojada a copito. Mi corazón me latía a mil por hora, estaba asustada y desesperada.

- Aquí está.- dijo en un susurro mientras lo sacaba, mi pequeño corazón se partió al ver al pobre animal respirando a duras penas, instintivamente lagrimas brotaron de mis ojos.- Tranquila todo va a estar bien.

Harry intentó tranquilizarme mientras nos dirigíamos al auto, pero simplemente estaba mal.

[...]

Al llegar a urgencias de un hospital veterinario, a nuestro pequeño se lo llevaron automáticamente ingresamos, únicamente nos habían dicho que esperáramos por novedades.

Estaba dolida. Molesta. Cansada, ugh.¿porqué estaba pasándome esto?

- Todo hubiera sido distinto, si hubieras hecho las cosas bien...- le solté.

-¿Qué?. Espera,¿estás diciendo que esto fue culpa mía?.- preguntó indignado.

- No lo sabes tú, que estaba a cargo de poner a lavar la ropa.- dije sin interés con un atisbo de rabia.- ¿cómo es posible que tú no te hayas dado cuenta que copito iba dentro del cesto?,¡Es increíble!.- dije irónicamente.

- ¡Simplemente no lo vi!, ¡simplemente pasó!. Fue un accidente, supéralo.

Eso fue lo ultimo que quería escuchar de él.

- Ya veo lo mucho que te importa nuestra mascota, parece más mía que tuya.

- En teoría lo es.- dijo poniendo los ojos en blanco.