El rey me hizo su reina

Capítulo 23

-¿Cómo pretendes lograrlo?-pregunto haciendo referencia sobre la explosion

-Ese es muy mi problema.

-No me digas -sono sarcastico

Quizas antes de llevar a cabo su plan, podria solo huir...

-Esa chica parece familia tuya-observo Arista atenta

-¿Qué? -Elian se reincorporo del muro en el que estaba arrimado -¿Por qué lo dices?

-Bueno, mírala. Tiene ojos verdes y cabellos pelirrojos. Se parece bastante a ti. Podría ser tu gemela buena

-¿Insinúas que sería el malvado?

-¿Admites que son familia?

Elian rueda los ojos- ¿Te crees listilla?

-¿Lo son o no?

-No sé ni por donde comenzar a responderte eso. ¿Dices que todos los pelirrojos del mundo en automáticamente somos familia?

-No.

-¿O es que acaso me estás diciendo que parezco una mujer?

-Calla. No me refería a eso.

-Pues eso fue grosero. En ambos sentidos.

-¿Problemas de hombría?

-Problemas de conversaciones absurda. ¿Por qué estamos perdiendo el tiempo en esto? Karim me ha ordenado enseñarte lo necesario para que hagas una explosión

-No me interesa aprender nada. Créeme, cualquier cosa que me enseñes ahora ya lo se.

"Además, sería una pérdida de tiempo" pensó Arista "todo en vano"

-Ganaría mas aprendiendo de mi oponente y para ese segundo caso solo debo observarla -menciono mirando a la joven de traje ajustado gris. Una que al parecer estaba entrenando.-ella es nuestra invitada, debemos ser cortes

La joven estaba lanzando cuchillas a un blanco fijado más allá en la pared de piedra. Y daba todos en el blanco. Era muy buena.

-Quizás debería ir a presentarme formalmente. -propuso Arista

Otro cuchillo silbo en el aire clavándose con firmeza en la madera -Quizás no sea el mejor momento para eso... -vacilo Elian

-Aún no se su nombre – se lo hizo notar como si eso fuera una buena razón

Sus ojos verdes voltearon hacia ella -¿Y queremos saberlo? El rey no lo quiso

Sus ojos castaños solo viéndola. Y otro chuchillo dando de forma perfecta en el blanco-pues yo sí. -entonces empezó a caminar hacia la joven

-No... Arista... no creo que... es una mala... -pero ella ya no lo escuchaba

Cuando llego hasta la joven esta ya estaba recogiendo las dagas del suelo -hola -saludo. Como si ella no fuera su rival. Como si ella no fuera su "enemiga" como si ella no la detestara

Sus ojos se estrecharon mirándola con molestia -hola- saludo de forma seca.

-Eres muy buena – se lo hizo notar

-Si. Y usted no ha hecho ni un solo movimiento desde que entro a la arena de combate ¿No piensa entrenar? ¿O es que no quiere mostrarme sus habilidades?

¿Habilidades?

¿Cuales?

-No tengo muchas... habilidades físicas – confeso – confío... confió en que mi magia habla mas alto que mis acciones.

-O que sus palabras

-¿Cuál es su nombre?

-¿Por qué quieres saberlo? Creí que habían dicho que no era de su importancia

-Jamás dije eso. Lo dijo el rey. Para mí, saber su nombre es de suma importancia

La mujer miro hacia otro lado rodando los ojos – me llamo Calista

-Vaya, y rima con Arista -una voz las hizo mirar hacia atrás a las dos

-Creí que ya te habías ido, Elian. -le contesto mirándolo poco impresionada

-Aunque no es tan místico como solo "Arista" -siguió bromeando el

-Un brujo cómico eh. No tienen pinta de ser muy "reales" -la chica volteo hacia ambos esta vez con su completa atención

-Somos como tú. Somos brujos. Solo hacemos nuestro trabajo y cada quien mira su propio beneficio. No es que no te entendamos. No queremos que haya resentimiento.

-¿Insinúa que perderé?- ataco la joven y sus cabellos rojos parecían tan fieros como ella

Elian alzo los brazos -j-jamás dije eso...-se aclaro la garganta -Arista...-pidió tosiendo -ayudame...

-No vale la pena pelear por eso -intervino ella

-Claro que no. Usted ya tiene el favor del rey

-Puedo preguntar, ¿para que quiere ser reina? -presentaba genuino interés ignorando su anterior y evidente comentario

-No es problema suyo

-Por lo que me han dicho, usted es una bruja prodigiosa. Entonces ¿Por qué?

-Quiero poder y dinero ¿no es eso suficiente?

-¿El rey de occidente la mando aquí? ¿o es que acaso quieren poner a una de las suyas en el trono de Rochcaster?

-Esto no tiene nada que ver con nuestro rey- y había seriedad en sus ojos

-Yo solo decía que...-pero cuando miro hacia Elian noto que el comentario también lo había molestado a el -¿Qué?

-Es nuestro soberano. No deberías hablar así de él. Después de todo, aunque nunca hayas pisado las tierras de occidente también es el tuyo

Claro, porque ella era una bruja. Adorable.

-Si. Fue un comentario inapropiado. Pido mil disculpas. -se inclinó.

-Ya he sido honesta contigo. Quero el dinero y quiero el poder. Es todo. He demostrado ser mejor que Mary y creo firmemente que puedo romper cualquier maldición.

Arista entendió que no ganaría nada aquí

Unas voces más allá sonaron. Como unas trompetas y un alboroto -el rey ha llegado -anuncio Elian mirando hacia la entrada de la arena

-¿Esta aquí?- había interés en Calista

Y cuando su capa negra asomo por el recodo y sus ojos rojos recorrieron todo hasta detenerse en ella, fue cuando Arista realmente sintio su llegada.

-Sí.-dijo- Lo esta.

Porque el siempre la buscaria con la mirada.

Porque el siempre la encontraria

Porque no existia un lugar en el mundo en el que ella pudiera huir...