Ha arrasado en mi interior un incendio. Se han estado consumiendo todos mis peldaños, los cielos rojos me abruman la cabeza, el humo quema los pulmones tanto como la piel. El fuego se hace más grande y me está recorriendo desde el pecho hasta el vientre. Hubiera querido culparte, pero quien dejó el cigarrillo a medio apagar fui yo.
Me he incendiado. Te estoy ayudando a destruirme.
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Cartas que nunca llegaron
Romancelibro de gilraen eärfalas el libro no es mío todos los derechos reservados a la autora