XXII

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Al igual que el capítulo anterior, repito: si te sientes incómodo leyendo escenas spicy +18, puedes pasarla y seguir disfrutando del capítulo sin problema.
Disfrutad el capítulo de hoy 🥰 que queda muy poquito para que acabe el acto 1 y empiece lo bueno, (y lo malo también), no os voy a engañar 💔

Kol acarició el cabello mojado de la Salvatore tratando de recuperar el aire. Salió de su interior, depositando a Avery en el suelo, dejando que disfrutase de su post orgasmo mientras agarraba el tarro de champú, para echarse un poco en la mano y comenzar a enjabonarle el cabello.

– Si hubieras querido seguir sin compromiso, estas cosas bonitas no ocurrirían –Kol sonrió al ver como la rubia sonreía ante su comentario, con los ojos cerrados.–

– Entonces he hecho bien en dejar de seguir con el sexo sin compromiso, ¿no?

– ¿A caso no me quieres de nuevo como novio o sólo por el sexo? –bromeó el castaño riendo mientras masajeaba el cuello cabelludo de su chica lleno de champú con olor a frutas.–

Avery soltó una leve risita mordiendose el labio.

– Mmm –la rubia hizo como que pensaba.– el sexo sin compromiso estaba bien, pero admito que me encanta tenerte de nuevo como novio.

– ¿Mejor que con compromiso? Has puesto los ojos en blanco dos veces, yo creo que tu lenguaje corporal destapa todas tus mentiras, preciosa.

– Mi lenguaje corporal puede mentir –Avery mintió, y le miró a los ojos. Kol sonrió mostrándo su característica sonrisa.–

– Te recuerdo no puedes mentirme, porque yo mismo te enseñé a hacerlo, cariño.

– Bueno, puede que esta vez este mintiendo –volvió a mentir, y Kol subió su mano hacia los labios de la Salvatore para acariciar el inferior con el pulgar, a Avery se le cortó la respiración y Kol sonrió canalla mirándola.–

Cariño, no funciona. –hizo una pequeña pausa antes de seguir hablando.– Acabas de tener dos orgasmos, no me puedes mentir. Tus pupilas te delatan.

– Vale esta bien, me has pillado. –Avery subió los brazos para pasarlos por detrás de su cuello.– ¿Vas a castigarme por haber mentido? –Kol río por su nariz mientras se mantenía sonriente.–

– Oh cariño, esto no ha hecho más que comenzar, pero primero hay que ducharnos. No quiero que te quedes con la cabeza llena de jabón.

Avery asintió, dándose la vuelta para aclararse el pelo, pasándose las manos por este y dejando que todo el jabón resbalase por su espalda. El original comenzó a dejar de nuevo en su nuca y en sus homoplatos pequeños besos, haciendo que Avery cerrase los ojos, mordiendose ligeramente el labio. Kol cerró la regadera de la ducha y la rubia se giró de nuevo hacia él para mirarle a la cara.

– ¿La cama de Damon o la tuya? –preguntó el original.–

– Mejor vayamos a mi habitación –respondió Avery, volviendo a pasar los brazos por detrás de su cuello.–

– Tu mandas.

A velocidad vampírica, ambos fueron hacia la habitación de la Salvatore, dejando a esta sobre la cama debajo de él, colocando cada rodilla al lado de sus costados, al igual que sus brazos, que se encontraban apoyados por sus manos en las sábanas a ambos lados de la cabeza de la rubia, volviendo a besarla. Avery le correspondió el beso subiendo la intensidad de este con pasión y lujuria, sus manos colocadas sobre las mejillas del original. Ambos entreabrieron los labios para dejar paso a la lengua del otro y que se enredasen jugando entre ellas.

𝗗𝗔𝗥𝗟𝗜𝗡𝗚 ¹ | 𝐊𝐨𝐥 𝐌𝐢𝐤𝐚𝐞𝐥𝐬𝐨𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora