𝗗𝗔𝗥𝗟𝗜𝗡𝗚 ¹ | 𝐊𝐨𝐥 𝐌𝐢𝐤𝐚𝐞𝐥𝐬𝐨𝐧

XI

– ¿Por qué todo nos tiene que salir mal? –preguntó Damon pasa si mismo, lanzando su vaso de bourbon a la chimenea cabreado. Haciendo que el fuego se avivase más.–

Avery se echó hacia atrás en el sofá, viendo mirando en la dirección de Stefan que se acercaba a ella.

– ¿Por qué no nos contaste esto antes Avery? –dijo Stefan sereno, sentándose al lado de la rubia.–

– No lo sé, ¿vale? Por una parte, algo me decía que todavía no debía contároslo... Y mirad que Klaus me dijo que os lo contará si os traíais algo entre manos

– Es astuto el cabrón –habló Damon.–

– Lo bueno es que os he salvado –dijo mirando a cada uno.– A todos. Un poco tarde...

– Y te lo agradecemos Avery –¿Damon dando las gracias? ¿Acaso he muerto?.– pero debiste contároslo antes

– Lo sé, y lo siento –Stefan pasó un brazo por sus hombros, comenzando a frotarle uno.–

– Tranquila, y ahora cambiando de tema... ¿que hacemos? Porque si pertenecemos al linaje de Klaus, estamos muertos

Otro problema más.

– ¿Y si no es así? –habló Caroline.– Pensemos —la rubia hizo una breve pausa.— Yo fui convertida con la sangre de Damon, Damon y tú con la de Katherine

– Katherine debió convertirse con la sangre de Rose... –continuó Elena.– Y ya no sabemos más

– Y Rose está muerta, ¿verdad? –dijo Caroline y Damon asintió.–

– Jeremy puede contactar con ella –ofreció Damon.– Podríamos ir a Denver a hacerle una visita

— Me parece bien —aceptó Elena.—

– Genial. Entonces mañana a primera hora iremos a hacerle una pequeña visita al pequeño Gilbert.

✃

– Rebekah tiene a Damon

Había dicho Stefan entrando en la habitación de Avery, la cual la susodicha se encontraba sentada en su silla detrás del escritorio leyendo un libro, con las piernas colgando sobre uno de los reposabrazos de la silla.

Había pasado dos días desde que el plan de Damon de ir a Denver y hablar con Mary Porter había fracasado. Todo porque Kol había interferido y la había matado.

Y con interferir, lo más seguro es que Niklaus hubiese estado detrás de todo.

– Que ha hecho ahora para que Rebekah lo tenga retenido contra su voluntad –dijo Avery sin apartar la mirada de su libro.–

– Amm.. muy buena pregunta la verdad –respondió Stefan.– pero hay que ir a por él

– ¿No podemos dejar que Rebekah se divierta un poco con él? —preguntó apartando la mirada de su libro para mirar a Stefan y hacer un puchero.—

– Avery...

– Es broma, es broma –cerró su libro para a continuación dejarlo sobre el escritorio y bajar las piernas al suelo.– ¿Que tienes pensado? –preguntó la rubia.—

– Darles las estacas a Klaus a cambio de Damon

– ¿Todas? –preguntó Avery.–

– Dejaré tres por si acaso

– Se acabará dando cuenta de que no le has entregado todas. —hizo una pequeña pausa.— Sabes que Klaus es muy astuto y siempre va un paso por delante –dijo Avery.–