Cuando te vi - Robin Le Normand

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Ane's POV

No he tenido muchas citas en mi vida. Si te paras a pensar, quizá sea algo que no se estile mucho en estos tiempos. Pero si hay algo que tengo muy claro es que la cena de esta noche con Robin va a ser muy difícil de superar. Nunca antes había sentido tanta complicidad con alguien en mi vida. Hemos estado todo el tiempo hablando, riéndonos, acariciándonos, picándonos... Hace ya un tiempo que no mantener contacto físico no es una opción para nosotros. Por eso, cuando el camarero vino a retirarnos los platos y supimos que teníamos que abandonar la habitación para volver cada uno a la nuestra, aprovechamos nuestros últimos minutos abrazados en el balcón. Tan solo mirábamos el paisaje mientras nuestras respiraciones se oían calmadas. De hecho, fui yo misma quien rompió el contacto dándole una palmada en el culo para indicarle que nos íbamos, lo cual desencadenó por su parte una reflexión sobre que había abierto la veda para poder tocar mi culo cada vez que quisiera. Mortal lo de este chico, qué os voy a decir.

Volviendo al presente y dejando de fantasear con un francés de metro ochenta y siete, el partido contra el PSG finalizó hace unos minutos. Hemos caído dos goles a cero, un poco lo esperado. Sabemos que esta eliminatoria se decidirá en la vuelta, en casa y con nuestra gente. Con el único de mis chicos que he coincidido tras el pitido final ha sido Zubi y solo ha sido el tiempo de darnos un abrazo y darle algo de ánimo.
Por fin embarcamos y los últimos en subir al avión somos el equipo de comunicación por habernos quedado grabando la entrada de los jugadores. Voy detrás de Raúl por el pasillo del avión y detrás de mí escucho a Paula decirle que vaya un poco más rápido a ver si nos sentamos antes de que despegue. Sí, como veis el cansancio ha hecho que hasta nuestros ánimos disminuyan pero nunca la ironía y el sentido del humor que nos caracteriza. Revuelvo el pelo de Zubi cuando paso por su lado e inmediatamente busco con la mirada dónde está sentado Robin.

-Le Normand a tus 10.- susurra Paula en mi oído y giro la cabeza riéndome.

-No le estaba buscando.- respondo sacándole la lengua.

-Lo que no sé es cómo tienes que buscarle. Yo sentiría su mirada clavada en mi desde que subí.- explica mi amiga.

Exactamente, Robin está justo donde Paula me dice, compartiendo asiento con Remi.

-Hola, guapos.- saludo a ambos tendiendo mi mano, la cual Robin aprovecha para coger y apretar entre su mano.

-Oye!- me regaña Robin por haber incluido en el piropo a nuestro amigo y nos arranca una carcajada a ambos.

Lo último que veo es a Remi burlarse de él y llegar a las manos picándose, como siempre. Son dos niños pequeños que en el fondo se adoran, qué puedo decir.
En cuanto me planto en mi asiento comienzo con la edición del último reel que se publicará esta noche, en cuanto aterricemos. Me ha tocado sentarme con Paula solas pero, en cuanto me vio trabajando se mudó al asiento de al lado de Raúl y Tomás a dormir porque según ella "no soportaba mi hiper productividad". Y sí, estoy en modo focus total. Tanto que ya me he puesto a adelantar trabajo de mañana para así poder descansar la tarde con tranquilidad. Y os digo que cuando me concentro no hay nada a mi alrededor que me distraiga. Tanto es así que, hasta que no me quitan uno de los cascos de la oreja, no me doy cuenta de que tengo a Alex y Robin tomando los asientos que hay a mi lado.

-Hombre, la parejita.- les saludo.

-Literalmente soy la tapadera.- resopla Alex dejando que Robin se siente a mi lado.- Venga, haced vuestras cosas rápido que me he dejado el ipad en mi asiento y me aburro.

-¿Pero qué cosas, imbecil?- pregunto riéndome.

-Pues vuestros tonteos varios y eso que hagáis. No voy a meterme tampoco en vuestra intimidad...- se encoge de hombros y me lanzo hacia él dándole un golpe en el brazo.