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Hablemos de suerte. Hablemos de que se han alineado todos los astros y alguien que me debe querer mucho ha decidido que viajamos el martes hacia Milán para jugar el partido del miércoles. No solo es que me encante Italia y que me flipe esta ciudad, es que por fin hemos podido salir a beber con tranquilidad en un viaje sin tener que estar grabando.
Así que aquí estamos toda la expedición excepto jugadores y cuerpo técnico, incluido el presi. Me pinchan y no sangro.

-Aquí tienes. Madre mía, hay que hacer una carrera de obstáculos para volver de la barra.- dice Paula mientras me entrega una cerveza.

-La verdad que lo del llamamiento en twitter a los aficionados se nos ha ido de las manos.- me río y tomo un trago de mi cerveza mientras mi amiga se encoge de hombros.

Noto que mi móvil vibra en el bolso y lo saco para ver quién es. Sorpresa, el único futbolista al que de momento he dado mi número de teléfono. Estaréis esperando que os diga que es Robin, pero por supuesto es Remi.

Alex Remiro

Tía, es real lo que estoy viendo en twitter? Que tenéis formado en el bar ese?

JAJAJAJA no sé, se nos ha ido de las manos
Está aquí el presi, vale?

Buah, que envidia... y yo aquí comiendo techo

Que pasa? No te da bola tu compañero de habitación o qué? Le hacía más divertido

Que forma tan sutil de preguntarme por Robin 🙄

Sabes que no voy por ahí, idiota JAJAJAJA

Muchas cosas sé yo 🫢
Pero me las callo

No, habla. Tan valiente que eres

Dormidito está muy guapo. Quieres que te mande una foto?  😜

Sabes quién está muy guapo también?
Tú cuando callas esa bocaza que tienes 🙂

JAJAJAJAJAJA

Me río yo sola ante ese último mensaje y bloqueo el móvil. Vuelvo a la vida social y me uno a un grupo de baile improvisado sin sentido alguno.

La noche acaba sobre las 3 de la mañana porque alguien decidió ser responsable. Alguien: el dueño del bar que nos echó a todos. La Ane de las 9 de la mañana está agradeciendo que fueran las 3 y no las 5, la verdad.
Me visto con la ropa del club, hago mi rutina de skincare y me maquillo un poco para tratar de estar presentable. A Tomás y a mi nos toca unirnos al grupo de jugadores que darán un paseo por los alrededores para activarse y no me gustaría parecer un zombie al lado de su aura de futbolistas.
Una vez arreglada bajo al desayuno a tomarme un colacao y alguna tostada rápida que me asiente el estómago. Saludo a todos los que me voy encontrando sin pararme con nadie para conseguir mi objetivo: comer.
Cuando por fin tengo mi desayuno en la mano, me dirijo a una mesa y veo a Remiro hacerme aspavientos con la mano, por lo que no me queda otra que dirigirme hacia allí sabiendo que recibiré una sesión de bullying importante.

-Buenos días.- saludo a mis 4 fantásticos a los que esta vez se les une Oyarzabal.

-Para unos más que para otros... menuda fiesta ayer, no?- pregunta Mikel y comienzo a contarles un resumen de la noche.

-Bueno y hubo un momento que estaba yo perreando literalmente hasta el suelo con Raúl y Paula y miro para el lado y me encuentro al presi mirándonos. No sé si estoy ascendida o en la puta calle, depende de cuánto le guste Maluma.

Cuando te vi - Robin Le NormandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora