28

2K 140 2
                                    

Ane's POV

Viernes por fin, aunque un viernes bien movidito. Los días antes de partido no suelen tener demasiado contenido porque el entrenamiento suele ser más de activación y táctica que otra cosa, además suelen ser en el Estadio por lo que no tenemos ni que desplazarnos. Pero con una final de Copa del Rey a la vuelta de la esquina os podéis imaginar la de contenido que hay que pensar, grabar, editar y ajustar. Justamente estamos los redactores dándole una vuelta a cómo ordenar el contenido cuando la pantalla de mi móvil se ilumina dejándome ver que Robin me pregunta si me puede llamar. Me excuso con mis compañeros y me aparto para llamarle.

-Hola. ¿Ha pasado algo?- pregunto en cuanto descuelga.

-No, no. No quería asustarte. Solo es que voy para casa y quería comentarte una cosita.- responde haciendo una pausa. Miedo me da.

-A ver con qué me sales ahora.- río bajito y le escucho imitarme al otro lado de la línea.

-Imanol nos da libre hasta el miércoles. Ahí empezamos ya full con últimos partidos de Liga y final de Copa. Entonces he pensado que podíamos aprovechar el partido en Granada y quedarnos por el sur a coger mucho sol, pasear tranquilos, estar mucho en la cama...- intenta convencerme y mi sonrisa amenaza con salir de mi cara.

-¿Me has llamado para proponerme irnos al sur a estar todo el día en la cama, bandido?- bromeo y suelta una risa.

-Te llamo para que muevas ese culo increíble que tienes y le pidas dos días de vacaciones a Jose. Y lo de la cama... No solo quiero hacer cositas en la cama. En el mar no estaría mal.- añade y rio dándome por vencida.

-Se lo digo a Jose, no creo que ponga problema, aunque te va a pillar manía.

-¿Qué más puede hacerme? Ya me ha dicho que no me quiere para el spot de la camiseta de la final.- me cuenta y suelto una carcajada por su indignación.

-Es que tú estás mucho mejor sin camiseta.- digo en tono bajito porque sigo estando en una oficina.

-Durante la siesta me recuerdas cómo de bien estoy sin camiseta, ¿vale? Tira a trabajar que yo organizo todo. Un beso, guapa.- tras esto, no me deja despedirme y cuelga.

Me quedo pasmada y, cuando reacciono, vuelvo a mi sitio. Una vez que tenemos más o menos enfocada la planificación, les digo a mis compañeros que yo me encargo de ir a buscar a Jose para que venga a darnos el ok y así aprovecho para hablar con él.

-Aquí estoy otra vez.- bromeo entrando en su despacho.

-¿Ahora qué? ¿Te casas con Alguacil?- responde y suelto una carcajada.

-No, no está entre mis planes de momento. Venía a decirte que si no te importa me gustaría cogerme de vacaciones el lunes y el martes.- digo con mi mejor cara de cachorrito y arranco una carcajada de mi jefe.

-Mientras tengas todo tu trabajo bajo control, tú gestionas tus vacaciones como quieras.- sentencia y asiento dándole las gracias.

-Pues vente conmigo, que te enseñamos la planificación para la Copa, a ver qué te parece.- se levanta y caminamos juntos hacia mi mesa.- Si quieres cambiar algo, la culpa a Isa y Carlos.- bromeo y me sigue el juego.

Por lo visto hemos hecho un buen trabajo porque Jose a penas nos pone pegas. Nos ponemos manos a la obra y a las 2 cuando todos mis compañeros se marchan a tomar algo juntos, yo me quedo adelantando cosas para poder despreocuparme lunes y martes y disfrutar de lo que sea que Robin prepare para nosotros, que miedo me da.
Sobre las 4 menos cuarto aparco en la puerta de su casa y llamo al timbre.

-Aaay, qué carita. ¿Estabas dormido?- hago un puchero viendo cómo se frota los ojos.

-Me he quedado un poco dormido en el sofá esperándote. ¿Has parado a tomar algo?- pregunta dándome un beso y abrazándome a su cuerpo para hacerme pasar.

-He estado trabajando hasta ahora. Tenía que avanzar cosillas antes de desaparecer hasta el miércoles.- respondo y sonríe ampliamente.

-Qué bien, porque está ya todo más que organizado. Y no, no te voy a contar nada. ¿Te preparo algo de comer?

-Mm no, prefiero irnos directamente a dormir.- asiente no muy convencido, odia que me salte comidas, pero le abrazo por la espalda empujándole para que se dirija hacia la habitación.

Deshace la cama mientras me desvisto y cojo una de sus camisetas, como ya es costumbre, y nos metemos juntos a la cama. Me abrazo a su cuerpo mientras bosteza y dejo un beso en su mejilla.

-Perdón por despertarte, bebé.- digo haciendo un puchero y sonríe.

-Luego te doy llave y la próxima vez te unes directamente a mi en el sofá.- suelto una risita y asiento.

Prácticamente paso mas de la mitad de mi semana en esta casa, así que supongo que no es tan raro que tenga una llave para mi.

Tras la siesta nos dirigimos al paseo marítimo de la Concha para dar una vuelta, aprovechando que salimos para Granada mañana por la mañana en lugar de esta noche. Pero nuestro paseo dura poco porque se pone a llover, así que decidimos pasar por mi casa a hacer mi maleta e irnos después a la suya.

Hacer la maleta para un viaje de 3 días puede parecer fácil, pero yo soy una chica de llevar muchos por si acasos. Y Robin no ayuda intentando meter toda la ropa interior y bikinis que va viendo por mis cajones.

-Robin, no tenemos tiempo físico para ponerme tantas bragas.- le regaño cuando veo que vuelve a coger parte de mi ropa interior e intenta meterlas en mi maleta.

-Tangas.- corrige.- Y sí te da tiempo de usarlos todos, porque cada vez que te los pongas pienso quitártelos.- añade con cara pícara y se acerca a besarme el cuello.

-Quita, anda, que me lías.- le empujo riéndome.- Elige dos bikinis, eso sí que te dejo.

Termino la maleta a duras penas y volvemos a su casa. Me encargo de preparar la cena mientras prepara su maleta y, cuando estoy terminando, por fin reaparece en la cocina.

-He estado pensando...- comienza a hablar mientras viene a mi posición a cogerme de la cintura.- La comida se puede calentar luego, ¿verdad?- asiento riéndome y me giro para pasar mis brazos por su cuello.- Pues nos vamos a la ducha.

Ni siquiera puedo intentar replicar cuando ya me lleva en brazos hacia el baño. Es un chico con una misión y no seré yo quien ponga impedimentos ante ello.

Cuando te vi - Robin Le NormandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora