¿Rojiblanco o azulgrana? // H.Fort

03. Tortitas

Haizea Mendizabal
26 de enero de 2024

–He tardado porque así ya traía la masa de las tortitas hecha.– Asentimos a lo que ha dicho Saioa mientras dejamos todo en el banco.

Por lo que sé, es algo así como una tradición para ellas ir al local que tiene Saioa de vez en cuando y hacer tortitas. Yo hace poco me uní al grupo pero probablemente fue la mejor decisión que he tomado.

Saioa y sus padres son los dueños del local pero muchas veces nos dejan usarlo simplemente para estar o guardar cosas. La de gafas no es con la persona con la que más me llevo pero de todas maneras puedo decir que me cae muy bien y es muy agradable.

Nerea se sienta a mi lado en el banco y empezamos a hablar entre todas. A ella la conozco porque repitió y este año terminó en mi clase pero antes de eso ya había salido con ellas alguna vez. Es una persona maja con la gente que conoce bastante sino ni siquiera te mirará.

–Y dime Haizea, ¿los jugadores del Barça están tan buenos como en las fotos o mejores?– Y esa es Maia.

Ella es la razón por la que estoy aquí, nos conocimos el año pasado en una academia de inglés y por suerte este año también estamos juntas. Desde el primer momento nos llevamos bien y no nos hemos vuelto a separar ni sorprendentemente a tener ninguna discusión. Es una chica muy guapa, fanática del Barça aunque no estoy segura de si es por como juegan o por como están los jugadores.

–La verdad es que no los he visto en fotos y en persona tampoco me fijé demasiado.– Admito.

–A mi no me gusta el fútbol pero hay que decir que todos esos jugadores parecen modelos.– Esa es Jare.

Es a la que conozco desde hace más tiempo, siempre hemos ido al mismo colegio pero ella un curso más por su edad. A pesar de eso, nos conocemos bastante ya que nuestros padres son amigos e incluso hemos ido de vacaciones juntas.

Alguien toca la puerta y Saioa se levanta a abrir mientras nosotras seguimos hablando.

–Estoy segura que viste a los más jóvenes, Pau es una monada. ¿Lo has visto?– Yo solo río sabiendo lo enamorada que está de ese chico.

–Saioa, ¿quien era?– Pregunto curiosa, en todas las veces que he estado aquí nadie ha tocado la puerta porque si fueran sus padres habrían abierto con llave.

La anterior nombrada entra sin decir nada y parece que ha visto un fantasma.

–Eeeh, no sé muy bien la verdad.– Murmura y es cuando nos damos cuenta de que hay otro chico a su lado.

Hector Fort

El grito de Maia me saca de mis pensamientos y creo que me deja medio sorda.

–¡Es Hector! ¡Hector Fort! ¿No está Pau contigo? ¿Y Marc o Lamine? ¡AHHH!– El chico parece sorprendido y un poco asustado.

–Maia, tranquilízate, lo estás asustando.– Río a carcajadas al ver la mirada de Hector y el entusiasmo de mi amiga.

–Pero... es que... ¿Lo has visto?– Habla más bajo cuando parece que se da cuenta de que él también la escucha.

–Si, y él a ti también.– Lo señalo dándome cuenta que parece que se ha quedado mirándome fijamente sin moverse.

–Bueno, ¿que haces por aquí?– Le cuestiona Maia y es ahí cuando quita su mirada sobre mi.