Madeline Bennett, una reconocida modelo de Inglaterra, aceptó una invitación para una entrevista que prometía ser distinta a cualquier otra que hubiera tenido antes. Con nerviosismo y curiosidad, se preparaba para lo inesperado.
-Por cierto, ¿has oí...
Ya habíamos regresado a Londres la noche anterior. Estaba sentada en el desayunador, revisando mis redes sociales mientras comía cereal. Las notificaciones y mensajes eran una mezcla de lo usual: trabajo, amigos, y... rumores. Entre las fotografías de prensa, vi titulares insinuando un "romance" entre la puertorriqueña y yo.
"En estos últimos meses se ha revuelto un rumor donde la cantante puertorriqueña Young Miko y la modelo británica Madeline Bennett podrían tener un romance escondido fuera de las cámaras. Se les ha visto en muchas ocasiones juntas, así como la modelo ha visitado Puerto Rico en varias ocasiones y la cantante, Londres."
Ruedo los ojos al leerlo. La foto que habían elegido era de nosotras en Puerto Rico, caminando juntas por la playa. El timbre sonó, haciéndome levantar una ceja. No esperaba a nadie. Me levanté de mi lugar y fui a la puerta, donde vi a un chico con un ramo de peonías rosas tan grande que apenas podía cargarlo.
—Muy buenos días, señorita. Una admiradora le ha mandado este ramo de flores—dijo con una sonrisa, extendiéndome el gran ramo.
«¿Una admiradora?»
—¿Gracias?—respondí, algo confundida.
El chico se alejó por el pasillo hacia el elevador. Observé las flores, tratando de adivinar quién podría haberme enviado algo así. Últimamente había dos personas que podrían estar interesadas en hacerlo: la cantante y la actriz.
«Diablo, deja algo pa' los demás», pensé, mordiendo mi labio para contener una sonrisa
Decidí colocar las flores en el fregadero lleno de agua. Eran demasiado grandes y no tenía ni la menor idea de dónde podría acomodarlas. Mientras las dejaba en el fregadero, mi móvil vibró con un mensaje que no me emocionaba en absoluto.
Ángela W: Hola bonita, ¿cómo va tu día?
Respondí rápidamente:
¿Fuiste tú?
¿Fui yo de qué? No entiendo.
Lo de las flores, las peonías.
No te he mandado flores, y si alguien quiere enamorarte, creo que deberían saber que amas las rosas y que son tus favoritas.
«¿Se hace la pendeja o es?» pensé con sarcasmo.
Dejé el mensaje en visto. Claro que no sabía que mis flores favoritas eran las peonías, pero Ángela nunca había tomado el tiempo de preguntarme si realmente me gustaban las rosas. Si no fue ella, ¿quién podría haber sido?
«No lo sé, quizás una platinada, cantante, mucho más alta que tú, guapa, puertorriqueña», pensé, sintiendo cómo mi voz interna se convertía en mi mayor hater.
Me acerqué de nuevo al ramo, revisando si había alguna nota escondida. Para mi suerte, encontré una. La saqué con cuidado y la leí:
"Para ti, baby. Solo por bonita."
No había duda de quién había enviado esas flores. Solté una sonrisa de felicidad al reconocer el apodo. La platinada había vuelto a sorprenderme, y, de alguna manera, eso hacía que el día empezara con el pie derecho.
Mi móvil vibró de nuevo sobre la mesa, sacándome de mis pensamientos. Lo tomé rápidamente, medio esperando otro mensaje de Ángela, pero no, era un mensaje de la puertorriqueña:
baby miko: Hola baby, ¿qué tal todo?
Gracias por las flores, ¿cómo supiste con mis favoritas?
No creí que recibiría esta pregunta, pueda ser que me informe bien antes de mandarlas.
Enserio muchas gracias, creo que nadie se había informado o tomado el tiempo para preguntar.
Solté una sonrisa estúpida, como esas de adolescente que se enamora por primera vez. Dejé mi teléfono en la recámara y decidí darme una ducha. Después de un largo rato en la bañera, tuve que salir, aunque parte de mí hubiera querido quedarse allí para siempre.
«¿Por qué no puedo ser una sirena?», pensé, mientras buscaba algo cómodo en mi armario.
No tenía planes de salir ese día, así que opté por ropa ligera y holgada. Mientras me vestía, escuché la puerta del departamento abrirse. Supuse que eran mis dos amigas, quienes tenían una llave y la costumbre de entrar sin previo aviso.
—¡Trajimos almuerzo!—gritó Elena desde la cocina.
Salí de mi habitación y me dirigí al comedor, donde habían colocado una bandeja de sushi. Me senté y, justo cuando iba a tomar un bocado, Maggie se giró hacia mí con una mirada curiosa.
—¿Quién es la afortunada que se robó tu corazón ahora?—dijo, señalando el enorme ramo de peonías que descansaba en el fregadero.
—Epa, ¿quién descubrió que amas las peonías? Es la primera vez que veo un ramo que no es de rosas rojas—comentó Elena, lanzándome una mirada coqueta.
—Una admiradora secreta—respondí con una sonrisa tonta.
—¿Y quién es esa? Cuéntanos todo, pendeja—insistió Maggie, acomodándose a mi lado, ansiosa por los detalles.
—Pensé que había sido Ángela—comencé, pero Elena me interrumpió con un tono de disgusto.
—¿Ángela Williams? No creo que ella se haya tomado el tiempo para averiguar eso.
—Déjame terminar—le respondí con una mirada seria—. Entre las flores había una nota muy bien escondida. Cuando la leí, decía: "Para ti, baby. Solo por bonita." Y la única persona que me llama así es Victoria.
—¡No me jodas, tía!—exclamó Maggie con su característico acento español—. Creo que ella será la primera cantante con la que tendrás una relación después de negarte a eso por tantos años.
Solté una carcajada al ver la emoción de Maggie.
—No lo creo. Victoria parece de esas que solo quieren tener sexo y luego se van como si nada hubiera pasado—intenté sonar indiferente, aunque en el fondo, la idea de que ella se hubiera tomado el tiempo para enviarme mis flores favoritas me hacía sentir especial.
—¿Cómo supo que te gustan las peonías y no simplemente te mandó rosas como el resto?—preguntó Elena, arqueando una ceja.
—Me dijo que se había informado bien, como si quisiera sorprenderme—le expliqué.
—Eso no suena a alguien que solo quiere tener sexo—replicó Maggie, hablando con la boca llena.
Me encogí de hombros y seguimos disfrutando del almuerzo, aunque en mi mente, la platinada ya había conseguido algo que pocas personas lograban: sorprenderme de verdad.
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DIOSITO, SOY YO DE NUEVO. MÁNDAME A UNA PUERTORRIQUEÑA ASÍ POR FAVOR🙏🏻🙏🏻🙏🏻🙏🏻🙏🏻🙏🏻
