•Capitulo 47•

1.1K 94 21
                                    

MADELINE
|LOS RUMORES SON CIERTOS|

Hoy me desperté con una sonrisa que no se me iba por nada del mundo. Tenía dos razones muy importantes para estar así. La primera, y más significativa, era que Victoria me había pedido que fuera su novia la noche anterior. Y no fue cualquier pedido; lo hizo de la manera más romántica que podría haber imaginado.

Me llevó a un lugar secreto en Nueva York, uno que desconocía por completo. Era un pequeño jardín escondido en lo alto de un edificio, un oasis en medio de la ciudad. Estaba iluminado con luces suaves que colgaban de los árboles, creando un ambiente casi mágico. Todo estaba perfectamente planeado, desde la música suave de fondo hasta el sendero de pétalos de rosa que conducía a una mesa elegantemente decorada. Cuando llegamos al centro del jardín, me sorprendió con un ramo de peonías, mis flores favoritas. Me miró a los ojos, tomó mis manos y, con una voz suave y emocionada, me pidió que fuera su novia. En ese instante, todo el mundo se detuvo, y lo único que importaba era ella y ese momento perfecto. No pude hacer otra cosa que decir que sí, con lágrimas de felicidad en los ojos. Después, sellamos nuestra promesa con un beso que parecía durar una eternidad.

La segunda razón de mi felicidad era que en unos días tendría el desfile más importante de mi carrera. No es que los otros desfiles no fueran emocionantes, pero este tenía un toque especial. Iba a conocer a mi modelo favorita, Madeline Monroe. Solo pensarlo me ponía nerviosa y emocionada al mismo tiempo. Era como un sueño hecho realidad.

Hoy, para bajar un poco la adrenalina, salimos de compras. Estábamos en una tienda con Victoria y Maggie, buscando algunas cosas como ropa. Mientras caminábamos por los pasillos, de repente vi a lo lejos un póster gigante con mi cara, promocionando una de mis marcas de maquillaje favoritas. Mi corazón dio un brinco, y no pude evitar sonreír como una niña en Navidad. Me acerqué corriendo, dando vueltas como una bailarina, hasta quedar justo frente al póster. Me paré ahí, posando con una gran sonrisa, mientras Maggie se reía de mi entusiasmo.

—¡Ah!—grité emocionada al ver lo enorme que era el póster—. ¡Esa soy yo!

—No, Madeline—respondió Maggie con sarcasmo—. Y espérate a darte cuenta de que eres una modelo mundialmente famosa.

Victoria, a mi lado, no podía contener su risa.

—Preciosa, ¿sabes que tu cara está por todo el mundo?—dijo Victoria, mirándome con esos ojos llenos de cariño y diversión.

Ruedo los ojos, tratando de disimular mi orgullo.

—¿Y qué? Déjenme disfrutarlo—repliqué, mientras me alejaba un poco de ellas, con una sonrisa que simplemente no podía borrar.

Maggie y Victoria se quedaron observando cómo me alejaba, intercambiando una mirada de complicidad y riendo suavemente. Aunque intentaba mantenerme seria, era imposible no sentirme emocionada al ver mi rostro en un póster tan grande. Era un recordatorio de todo el trabajo duro que había puesto en mi carrera y de lo lejos que había llegado.

Victoria se acercó a mí, con esa sonrisa que siempre lograba calmarme y al mismo tiempo hacer que mi corazón latiera un poco más rápido.

—Es normal que estés emocionada—dijo mientras tomaba mi mano—. Has trabajado mucho para estar donde estás, y es justo que disfrutes cada logro.

La miré, sintiéndome más enamorada que nunca. Sabía que ella entendía cómo me sentía porque había pasado por lo mismo en su carrera musical. Ambos habíamos luchado para llegar a donde estábamos, y era increíble poder compartir esos momentos juntos.

—Gracias, baby—le respondí, dándole un apretón suave a su mano—. Es solo que a veces no puedo creerlo. Todo esto... mi cara en un póster gigante, el desfile que se viene... y ahora tú, aquí conmigo.

I CAN SEE YOU (YOUNG MIKO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora