Capítulo 35

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╰─▸ ❝ @[Una gota de sangre]

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╰─▸ ❝ @[Una gota de sangre]

Sin duda hay algo que nunca entenderé.

¿Cómo carajos es que Astoria y yo nos volvimos amigas después de todo lo que pasó?

Cuando recupere la consciencia deseché ese pequeño reencuentro, poco me importaba.

Quería dejarlo atrás como un evento sin importancia.

Pero ahora las cosas son distintas.

Sé cuál es el destino que le espera, sé que yo seré su verdugo y sé que, a pesar de todo, no merece algo así.

Es por eso que no puedo dejar de preguntarme cómo es que volvimos a coincidir.

Es decir, ¿Qué tan drogada estaba como para acceder a hablar con ella?

Tener esa respuesta no cambiaría nada, solo me dificultaría las cosas.

Aunque... También sería mi última oportunidad para enmendar las cosas con ella.

Al carajo, no me serviría de nada.

-¿En qué piensas?

La voz de Mattheo resonando a mis espaldas consigue sacarme de mis pensamientos.

Giro sobre la silla para centrarme en él con una mueca llena de disgusto, llevamos tres horas encerrados en mi habitación para nada.

-En cualquier cosa menos en esto -Exhalo con frustración pasando mi vista por el escritorio lleno de libros -No puedo concentrarme.

Escucho como su cuerpo se desliza por la cama hasta llegar hasta mí, instala sus manos en mis hombros y empieza a masajear la zona.

-Relájate -Murmura sobre mi oído, no necesito escucharlo dos veces para cerrar los ojos y dejarme llevar por sus caricias -No es necesario que hagas esto, las clases fueron suspendidas.

-Debo ponerme al día...

-Y lo harás, pero no así.

Suelto un pequeño bufido sabiendo que tiene razón, no sirve de nada estar anclada a un escritorio fingiendo leer páginas y páginas cuando solo puedo pensar en ella.

Es por eso que decido levantarme tomando sus manos para arrastrarlo hasta la cama, él toma asiento y en cuanto lo hace no dudo en recostarme sobre sus piernas.

-¿Qué harás en las vacaciones? -Pregunto en un intento por cambiar el tema de conversación.

Al principio guarda silencio al mismo tiempo en que empieza a acariciarme el cabello, cierro los ojos disfrutando de su contacto.

-Iremos a Malfoy Manor.

Frunzo el ceño y me aparto ligeramente para mirarlo a los ojos.

-¿Iremos?, ¿Tú y yo?

Siguiendo Tus LatidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora