Capitulo 13 el día que la vida, se oscureció de una parte

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Amelí

Retrocedo tambaleando impactada por el golpe, la sangre escurre de manera grotesca.

Trato de poner mi mano y meter lo que se salió, trato de contener la herida.

El golpe me aturdió, fue tan grande el daño que no me estoy regenerando rápido.

Mientras los vítores suenan de fondo la perdida de sangre es bastante, pienso rápido, tengo poco tiempo para terminar esta pelea.

No le doy importancia al ojo pienso, el no se puede mover tiene una pierna herida, es tan grande que le cuesta reincorporarse, el problema es que se está convirtiendo en un lobo completo.

Automáticamente pierdo la visión del ojo derecho, casi no veo por el otro.

Mi cara está llena de sangre siento pedazos de mi pómulo colgar por mi cara.

Tengo una parte del rostro destrozado, no siento dolor por la adrenalina.

El ya está recuperando y transformado por completo en un lobo.

Grande de pelaje color oscuro, con ojos brillantes, es muy grande, ruge y el lugar vibra, es tan feroz que paraliza.

Grande de pelaje color oscuro, con ojos brillantes, es muy grande, ruge y el lugar vibra, es tan feroz que paraliza

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Se acabó no queda más, no me puedo mover, solo tengo una oportunidad.

Eso me dio una idea tengo que esperar a que el que se lance, es tanto su frenesí que ya no está pensando.

Solo esta actuando de manera instintiva.

Aun tengo el cuchillo en mis manos enfrentarlo o morir, no hay vuelta atrás.

El se lanza y de un movimiento le volé la oreja, doy otro navajazo, está vez cortó su cara por la mitad.

La verdad es que no veo bien, solo corto por supervivencia, el corte justo le da a la altura de la ojos cegándolo.

El corte fue tan profundo que su cara se abrió parcialmente a la altura de los ojos.

El está desesperado fue mucho el daño recibido, por alguna extraña razón volvió a su forma humana.

El escenario es dantesco está vuelto loco porque no puede ver, no se regenera, pareciera que no se puede transformar.

Aún así está tratando, pero antes de que el lo haga.

Peor algo me pasa, otra ves ardo por dentro parece que mi cuerpo quisiera cambiar - Lo dijo!! Recordé.

El abogado antes de que yo entrara como retadora, una de las cosas que hacía que se negara a participar en la apuesta.

Era la posibilidad de que en esta pelea me transformara en endriago, era un hecho de que no sería una pelea fácil.

El temía que el frenesí del momento provocara una posible transformación, aunque estoy apunto de cambiar de forma, trato de imponer.

Bruma sangrienta Y espada de oroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora