Siempre fuiste vos.

La previa.

Nico, por su parte. Disfrutaba de la comida con sus padres, abuelos, hermano y cuñada. La conversación era relajada y distendida. Se reían de las ocurrencias de la abuela mientras ella juraba ser una estrella de la farándula.

Mientras comían el postre, su mamá observó a Nico mientras sonreía a su celular.

Pichi: cómo estás vos, hijo? Como te trata el laburo?

Nico: fueron unas semanas intensas. Estamos con muchas cosas, ahora tenemos ganas de armar una gira nacional para el show o meter algunas fechas en Buenos Aires

Pichi: seguís entrenando también?

Nico: si, intento. Me gustaría dedicarle más, pero en la semana estoy muy a mil y hay días que no llego.

Pichi: no te hace falta ir al gimnasio, tenes un cuerpo bárbaro.

Nico: hay que mantenerse

Agustín: que onda las fotos que se filtraron?

Nico: que foto?

Agustín: en la puerta del edificio de Flor... no salieron a desmentir nada en el programa

Nico: ah, bueno. Ya que preguntan, aprovecho y les cuento -hizo un silencio en el que todos lo miraron- estoy de novio

Pichi: eh???? -saltó de su silla-

Nico: no te la esperabas, eh -dijo, entre risas.

Antonio: con quien?

Agustín: con quien va a ser, papá? Con Flor!

Pichi: MENTIRA! -gritó, mientras sonreía y abrazaba a su hijo

Nico: si se calman un poquito les cuento. Sentate, ma.

Volvieron a tranquilizarse todos e hicieron silencio para escucharlo

Nico: con Flor nos venían pasando cosas, nos estábamos haciendo los boludos y sostuvimos eso por bastante tiempo, pero en enero estalló la bomba y se nos fue todo de las manos

Pichi: enero???? -no salía de su asombro- estamos en junio ya!

Nico: nos lo guardamos para nosotros. Había cosas que resolver, Flor estaba en pareja, tampoco nosotros teníamos tan claro que nos pasaba. Decidimos ir día a día, y bueno, ahora ya estamos de novios

Antonio: hijo! Que alegría!

Pichi: con florcita! Que suerte! La queremos tanto.

Nico: ya sabía que la noticia iba a caer bien. Sobre todo porque hace años que me quieren poner de novio con la primera que aparece para que deje de andar por los boliches de la ciudad -dijo, riendo

Agustín: es una genia Flor, me encanta la pareja

Nico: otra cosa -hizo una pausa- es probable que lo contemos en el programa. Estamos hinchados de andar escondidos y bueno, creemos que ya es momento de vivir más libres

Pichi: ay, hijito. Que linda noticia nos diste! -volvió a abrazarlo-

Conce: el domingo que viene la podrías traer a comer unos ñoquis...

Nico: te parece? Le puedo preguntar a ver si quiere...

Para Nico, llevar a alguien a almorzar un domingo a la casa de sus abuelos no era cosa simple. Era su día preferido de la semana y su ritual familiar predilecto. No cualquiera podía ser parte. Con otras parejas, la simple idea de presentarla a la familia le parecía un bochorno. Prefería no mezclar los mundos.

Pero, esta vez, cuando su abuela sugirió invitar a Flor, sintió todo lo contrario: tenía sentido. Quería compartir con ella cada ámbito de su vida, que lo conozca en su intimidad más pura, la familiar.

Finalmente, Flor decidió volver de Lanús en un auto de aplicación. Sentía que ya lo había molestado demasiado haciendo que se desvíe hasta allá a la ida. Llegó a su casa pasadas las 18:30. Hacía frío, por lo que decidió llenar la bañera y darse un baño de inmersión con sales y velas. Uno de sus planes preferidos.

Nico le mandó un mensaje a las 19:15.

-Nico: estoy por salir, te busco?

Flor respondió desde la bañera.

-Flor: no, gracias bebito. Ya estoy en mi departamento. En este momento adentro de la bañera

-Nico: como es que me estoy perdiendo de eso?

-Flor: jajaja. Cuando quieras la hacemos. Avísame cuando llegues! Maneja con cuidado.

El lunes decidió quedarse un ratito más en la cama, el día estaba muy frío y lluvioso. No caminaría hasta Luzu como de costumbre, iba a pedirle a Momi que la busque o iría en un auto de aplicación.

Se levantó con el estómago revuelto. Algo la inquietaba y no podía dilucidar qué era. Se sentó a escribir en su journal, convencida de que sacar las palabras hacia afuera la iba a ayudar a entender qué la tenía tan inquieta.

Luego de escribir un rato, entendió: ambos le habían contado a sus familias de su noviazgo, y todos sus amigos estaban enterados también. Ahora faltaba la parte más difícil: el blanqueo público.

En su mente imaginaba miles de escenarios donde todo era una catástrofe: los medios salían a hostigarlos, sus seguidores no estaban de acuerdo, Agustín aparecía enojado o decía algo en los programas de chimentos... todo parecía factible en su mente.

Llegó con Momi al programa. Se la notaba tensa. Saludó a todos y se detuvo detrás de Nico para besar sus mejillas y acariciar sus hombros.

Nico: estas bien? Tenes cara rara

Flor: estoy rara...

Nico: por? Queres que vayamos a hablar a la oficina?

Flor: si, dale.

Se fueron de la mano a la oficina y cerraron la puerta detrás de ellos

Nico: que pasa?

Flor: le contaste a tu familia, no?

Nico: si, se pusieron re contentos. Vos a la tuya?

Flor: si, también. Y también los vi contentos.

Nico: entonces que te tiene así?

Flor: que ahora solamente falta contarlo al público

Nico: y eso te asusta?

Flor: en mi mente ya encontré mil maneras de que salga todo mal

Nico: que es lo que puede salir mal? Confía! Estamos juntos y felices, importa algo más?

Flor: no... tenes razón... pero me cuesta verlo así o estar relajada.

Nico: capaz es la previa nomas, y después de que lo contemos te sentís mejor. Queres que lo digamos hoy?

Flor: una parte de mi quiere no dilatarlo más, sacar la curita de una. La otra parte tiene mucho miedo.

Nico: confía en mi, te prometo que todo va a estar bien. Si queres me ocupo yo de decirlo, no me molesta

Flor: bueno, gracias -se acercó y lo abrazó- siempre me calmas.

Nico: vamos que tenemos un programón por delante.