Córdoba.

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El siguiente viernes llegó muy rápido entre los programas, las responsabilidades de cada uno y la preparación para el próximo show.

Esa mañana no hacían programa porque el vuelo era temprano, así que luego de dejar todo organizado en la oficina, a las 10:00am estaban todos reunidos en Aeroparque para viajar a Córdoba.

El vuelo salió sin contratiempos, fue corto y tranquilo. Hasta Flor, que no es amante de volar, lo disfrutó. Por supuesto, Olivia la acompañaba con sus patadas y movimientos sin fin.

El aire de Córdoba ponía feliz a cualquiera. Era un remedio muy eficaz para dejar atrás la vorágine de Buenos Aires, sus ruidos, sus grandes edificios y conectar con un poco más de naturaleza, aire puro y silencio.

Después de registrarse en el hotel, bajaron a la pileta para darle inicio a un fin de semana de descanso y disfrute grupal. En esta oportunidad, volverían todos juntos el domingo por la noche. Así que tenían dos días enteros para desconectar.

Aunque mucha gente los esperaba afuera del hotel, ellos decidieron esa vez dejar los saludos para el teatro. Se recluyeron dentro de la pileta o el spa y disfrutaron del bar en la terraza, donde tomaron tragos y comieron pizzas.

El sábado amanecieron tarde, se permitieron descansar cuanto necesiten y encontrarse nuevamente en el bar de la terraza para almorzar. Por suerte, Olivia había aflojado con los movimientos esa noche, haciendo que Flor descanse bien y pueda, después de muchos muchos días, dormir de corrido.

Después de almorzar volvieron cada uno a su habitación para prepararse para el show. Con el pasar de los días, cada vez estaban más cancheros para prepararse. Ya no les demoraba tanto tiempo. A las 19:30 y estaban todos tomando fernet en el camarín más grande del teatro (que era el de Nico, por supuesto) y cantando algunos temas que siempre sonaban en sus previas y que preparaban el mood para encarar el show con buena energía.

El show en Córdoba salió bien, pero Nico, fiel a su exigencia, se bajó del escenario con gusto a poco. A sus compañeros no les dijo nada, aunque varios de ellos intuyeron por su cara que algo no lo había conformado del todo.

Flor, que lo conocía como a la palma de su mano, espero que estuvieran solos en su habitación del hotel para interrogarlo

Flor: buen show hoy, no?

Nico: estuvo bueno, si

Flor: me encantó el caso de la chica y su papá, estuvo re divertido.

Nico: si, creo que fue lo que mejor salió.

Flor: dale, te conozco, deci lo que pensas de verdad

Nico: eh?

Flor: se te nota en la cara

Nico: es que vos me conoces demasiado -suspiró- hay cosas del pulpo que salieron desprolijas, Gaspi entró tarde en dos o tres temas. Son cosas chiquitas pero que a mí me cambian

Flor: y si, vos te estás fijando siempre en todo. Es tu trabajo también. Pero no se notaron tanto esas cosas que decís

Nico: yo las noté y eso me hace poner así. Mejor si la gente no se dio cuenta.

Flor: sos muy exigente, mi amor. Que las cosas salgan así también es parte de la dinámica del show, lo que ve la gente en el programa todos los días. Que blanqueamos todo, que a veces resolvemos sobre la marcha, que las cosas pueden no salir como pensamos...

Nico: si, ya se. Pero cuando hacemos estos shows quiero que la gente reciba algo increíble, porque están pagando para venir a vernos. Muchos de ellos viajan incluso...

Siempre fuiste vos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora